Tiendas Ara, el vecino que transforma los barrios de Colombia - AmericaMalls & Retail
Tiendas Ara, el vecino que transforma los barrios de Colombia
by Colombia-Brasil
octubre 27, 2025
in Colombia, Innovacion, Sostenibilidad, Supermercados, Tiendas Conveniencia
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Tiendas Ara, el vecino que transforma los barrios de Colombia, en una época donde la inflación, el desempleo y las brechas sociales siguen marcando la vida de millones de familias colombianas, Tiendas Ara se ha convertido en un actor clave para el comercio local y en un aliado indispensable para los hogares del país. Con más de 1.530 tiendas distribuidas en 29 departamentos y presencia en 350 municipios, la cadena filial del grupo portugués Jerónimo Martins ha consolidado un modelo de negocio que combina eficiencia operativa, sostenibilidad y cercanía comunitaria.
El propósito que guía a Ara desde su llegada a Colombia en 2013 es claro: democratizar el acceso a alimentos de calidad a precios justos, generando al mismo tiempo un impacto positivo en el tejido económico y social. Su visión trasciende el ámbito del retail tradicional; busca ser un verdadero “vecino confiable” que fortalece las economías locales, impulsa la producción nacional y fomenta la sostenibilidad ambiental.
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Un modelo de negocio con propósito social
Tiendas Ara nació en el país bajo una premisa fundamental: la calidad no debe ser un lujo. En un contexto donde más del 31 % de la población vive bajo la línea de pobreza monetaria y cerca de 16 millones de personas enfrentan dificultades para acceder a una alimentación adecuada, la empresa ha apostado por una propuesta de valor que prioriza la economía del consumidor y la inclusión social.
“Queremos ofrecer productos de calidad a precios justos, siempre bajo una filosofía de desarrollo sostenible y valor compartido”, explicó Nuno Sereno, director general de Jerónimo Martins Colombia. Bajo esta visión, Ara se ha propuesto mejorar la calidad de vida de las familias colombianas, sin perder de vista su papel en la generación de empleo, el fortalecimiento de la industria local y el respeto por el medio ambiente.
Su enfoque no es solo comercial, sino también cultural y humano. En muchas comunidades, las tiendas Ara se han convertido en puntos de encuentro: lugares donde los vecinos conversan, compran sus productos cotidianos y se sienten parte de un entorno más solidario.
Inversión que impulsa desarrollo local
Desde su desembarco en Colombia, Tiendas Ara ha invertido más de 1.250 millones de euros (cerca de seis billones de pesos colombianos) en su expansión, logística, centros de distribución y en el fortalecimiento de la producción local.
El 93 % de los productos que comercializa provienen de proveedores nacionales, lo que convierte a la marca en un motor del encadenamiento productivo y un apoyo directo a pequeñas y medianas empresas que hoy tienen acceso a mercados más amplios gracias a esta red.
A la par, Ara genera más de 19.000 empleos formales, muchos de ellos en municipios intermedios y zonas tradicionalmente rezagadas en oportunidades laborales. Este impacto se traduce en mayor formalización, estabilidad económica y desarrollo regional.
Para la compañía, invertir en Colombia no solo ha significado expandir su presencia comercial, sino apostar por el talento y la capacidad productiva local. Las alianzas con fabricantes, agricultores y emprendedores nacionales fortalecen la competitividad del país y consolidan un círculo virtuoso entre empresa, comunidad y sostenibilidad.
Compromiso social y comunitario
Tiendas Ara ha entendido que su papel como actor económico va de la mano con una responsabilidad social profunda. Por eso, ha tejido alianzas estratégicas con el ICBF, Unicef y la red de bancos de alimentos Abaco, con el objetivo de contribuir al bienestar de las comunidades más vulnerables.
En los últimos dos años, la compañía ha destinado más de tres millones de euros a proyectos centrados en nutrición, deporte, educación, empoderamiento femenino y primera infancia, beneficiando directamente a más de 50.000 personas.
Estos programas no se limitan a donaciones o patrocinios. Están diseñados para generar capacidades sostenibles, especialmente en niños, jóvenes y madres cabeza de hogar. Así, Ara se consolida como una marca que entiende que su éxito depende del bienestar colectivo.
“Queremos que las personas reconozcan a Tiendas Ara no solo por sus precios o su cercanía, sino también por su contribución a construir un país más justo y sostenible”, afirma Sereno.
Sostenibilidad ambiental: un pilar transversal
La sostenibilidad ambiental ocupa un papel central en la estrategia de Tiendas Ara. La empresa ha adoptado prácticas de economía circular y reducción de residuos, especialmente en la disminución de plásticos y cartones de un solo uso, promoviendo el uso de empaques reciclables o reutilizables.
Actualmente, más de 290 tiendas operan con paneles solares, lo que reduce significativamente su huella de carbono y su consumo de energía convencional. Asimismo, varios de sus centros de distribución han implementado sistemas de eficiencia energética y control de residuos, contribuyendo al uso racional de los recursos.
Pero el compromiso de Ara va más allá de la energía: la compañía también participa en proyectos de conservación de especies emblemáticas como guacamayas y polinizadores, reconociendo que la biodiversidad es un elemento esencial del bienestar social y económico del país.
Con estas acciones, Ara no solo cumple con estándares internacionales de sostenibilidad, sino que inspira a otros actores del sector retail a seguir su ejemplo, demostrando que la rentabilidad y el respeto ambiental pueden coexistir.
El desafío de mantenerse eficiente y cercano
El modelo de Ara ha logrado un equilibrio notable entre eficiencia y propósito, pero no está exento de retos. Uno de los principales desafíos es mantener su competitividad logística en un país con una geografía compleja y una infraestructura desigual.
A pesar de estas dificultades, la compañía ha invertido en tecnología, automatización y optimización de rutas, mejorando la distribución de productos y garantizando la frescura en alimentos perecederos, un aspecto crucial en su promesa de valor.
Otro reto es adaptarse a las particularidades regionales. Colombia es un país de gran diversidad cultural y gastronómica, por lo que Ara ha diseñado estrategias flexibles para ajustar su oferta según los gustos y costumbres de cada zona. Esto incluye desde productos locales hasta promociones pensadas específicamente para cada comunidad.
Este esfuerzo por entender al cliente desde su entorno ha permitido que Ara sea vista como un vecino más, no una gran corporación distante, lo que fortalece la lealtad y el sentido de pertenencia de sus consumidores.
El impacto del “vecino confiable”
Para muchos colombianos, Tiendas Ara representa la cercanía, el ahorro y la confianza. Su expansión constante no se basa únicamente en abrir puntos de venta, sino en crear relaciones sostenibles con las comunidades donde opera.
Cada nueva tienda implica no solo inversión y empleo, sino también una apuesta por la inclusión, el respeto y el desarrollo local. En este sentido, Ara se ha convertido en un ejemplo de cómo el retail moderno puede tener un propósito social profundo, integrando la eficiencia empresarial con un compromiso humano y ambiental.
La marca ha sabido conectar con la esencia del consumidor colombiano: alguien que valora la calidad, pero también la empatía; que busca precios justos, pero no a costa del bienestar del planeta ni de las personas que producen lo que consume.
Ara y el futuro del retail sostenible
En un contexto global donde las empresas deben adaptarse a consumidores más conscientes y exigentes, Tiendas Ara ha logrado posicionarse como pionera en el retail sostenible en Colombia. Su combinación de precios bajos, productos locales, impacto social y responsabilidad ambiental crea un modelo que muchos consideran el futuro del comercio moderno.
El crecimiento de la cadena también refleja una tendencia más amplia: la transformación del consumo hacia modelos más inclusivos, sostenibles y responsables. En ese sentido, Tiendas Ara no solo vende productos; vende confianza, empatía y propósito.
Para 2026, la empresa proyecta continuar su expansión hacia nuevas regiones del país, fortalecer sus alianzas con proveedores nacionales y aumentar el número de tiendas alimentadas con energía solar. Su visión a largo plazo es clara: ser el vecino que cada comunidad necesita, un socio del bienestar y del progreso compartido.
Vea también: Plazaween, halloween se vive a lo grande en Plaza de las Américas
En poco más de una década, Tiendas Ara ha pasado de ser una nueva apuesta extranjera en el comercio colombiano a convertirse en un símbolo de desarrollo regional, sostenibilidad y comunidad. Su modelo demuestra que la rentabilidad no está reñida con la empatía, y que la verdadera fortaleza de una empresa radica en su capacidad de transformar positivamente el entorno donde opera.
Con su cercanía, su compromiso y su enfoque humano, Ara ha redefinido lo que significa ser un buen vecino en Colombia: uno que ofrece más que precios bajos, ofrece esperanza, oportunidades y progreso.
Tiendas Ara, el vecino que transforma los barrios de Colombia
by Colombia-Brasil
octubre 27, 2025
in Colombia, Innovacion, Sostenibilidad, Supermercados, Tiendas Conveniencia
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Tiendas Ara, el vecino que transforma los barrios de Colombia, en una época donde la inflación, el desempleo y las brechas sociales siguen marcando la vida de millones de familias colombianas, Tiendas Ara se ha convertido en un actor clave para el comercio local y en un aliado indispensable para los hogares del país. Con más de 1.530 tiendas distribuidas en 29 departamentos y presencia en 350 municipios, la cadena filial del grupo portugués Jerónimo Martins ha consolidado un modelo de negocio que combina eficiencia operativa, sostenibilidad y cercanía comunitaria.
El propósito que guía a Ara desde su llegada a Colombia en 2013 es claro: democratizar el acceso a alimentos de calidad a precios justos, generando al mismo tiempo un impacto positivo en el tejido económico y social. Su visión trasciende el ámbito del retail tradicional; busca ser un verdadero “vecino confiable” que fortalece las economías locales, impulsa la producción nacional y fomenta la sostenibilidad ambiental.
Vea también: Parque Arauco alcanza un año histórico
Un modelo de negocio con propósito social
Tiendas Ara nació en el país bajo una premisa fundamental: la calidad no debe ser un lujo. En un contexto donde más del 31 % de la población vive bajo la línea de pobreza monetaria y cerca de 16 millones de personas enfrentan dificultades para acceder a una alimentación adecuada, la empresa ha apostado por una propuesta de valor que prioriza la economía del consumidor y la inclusión social.
“Queremos ofrecer productos de calidad a precios justos, siempre bajo una filosofía de desarrollo sostenible y valor compartido”, explicó Nuno Sereno, director general de Jerónimo Martins Colombia. Bajo esta visión, Ara se ha propuesto mejorar la calidad de vida de las familias colombianas, sin perder de vista su papel en la generación de empleo, el fortalecimiento de la industria local y el respeto por el medio ambiente.
Su enfoque no es solo comercial, sino también cultural y humano. En muchas comunidades, las tiendas Ara se han convertido en puntos de encuentro: lugares donde los vecinos conversan, compran sus productos cotidianos y se sienten parte de un entorno más solidario.
Inversión que impulsa desarrollo local
Desde su desembarco en Colombia, Tiendas Ara ha invertido más de 1.250 millones de euros (cerca de seis billones de pesos colombianos) en su expansión, logística, centros de distribución y en el fortalecimiento de la producción local.
El 93 % de los productos que comercializa provienen de proveedores nacionales, lo que convierte a la marca en un motor del encadenamiento productivo y un apoyo directo a pequeñas y medianas empresas que hoy tienen acceso a mercados más amplios gracias a esta red.
A la par, Ara genera más de 19.000 empleos formales, muchos de ellos en municipios intermedios y zonas tradicionalmente rezagadas en oportunidades laborales. Este impacto se traduce en mayor formalización, estabilidad económica y desarrollo regional.
Para la compañía, invertir en Colombia no solo ha significado expandir su presencia comercial, sino apostar por el talento y la capacidad productiva local. Las alianzas con fabricantes, agricultores y emprendedores nacionales fortalecen la competitividad del país y consolidan un círculo virtuoso entre empresa, comunidad y sostenibilidad.
Compromiso social y comunitario
Tiendas Ara ha entendido que su papel como actor económico va de la mano con una responsabilidad social profunda. Por eso, ha tejido alianzas estratégicas con el ICBF, Unicef y la red de bancos de alimentos Abaco, con el objetivo de contribuir al bienestar de las comunidades más vulnerables.
En los últimos dos años, la compañía ha destinado más de tres millones de euros a proyectos centrados en nutrición, deporte, educación, empoderamiento femenino y primera infancia, beneficiando directamente a más de 50.000 personas.
Estos programas no se limitan a donaciones o patrocinios. Están diseñados para generar capacidades sostenibles, especialmente en niños, jóvenes y madres cabeza de hogar. Así, Ara se consolida como una marca que entiende que su éxito depende del bienestar colectivo.
“Queremos que las personas reconozcan a Tiendas Ara no solo por sus precios o su cercanía, sino también por su contribución a construir un país más justo y sostenible”, afirma Sereno.
Sostenibilidad ambiental: un pilar transversal
La sostenibilidad ambiental ocupa un papel central en la estrategia de Tiendas Ara. La empresa ha adoptado prácticas de economía circular y reducción de residuos, especialmente en la disminución de plásticos y cartones de un solo uso, promoviendo el uso de empaques reciclables o reutilizables.
Actualmente, más de 290 tiendas operan con paneles solares, lo que reduce significativamente su huella de carbono y su consumo de energía convencional. Asimismo, varios de sus centros de distribución han implementado sistemas de eficiencia energética y control de residuos, contribuyendo al uso racional de los recursos.
Pero el compromiso de Ara va más allá de la energía: la compañía también participa en proyectos de conservación de especies emblemáticas como guacamayas y polinizadores, reconociendo que la biodiversidad es un elemento esencial del bienestar social y económico del país.
Con estas acciones, Ara no solo cumple con estándares internacionales de sostenibilidad, sino que inspira a otros actores del sector retail a seguir su ejemplo, demostrando que la rentabilidad y el respeto ambiental pueden coexistir.
El desafío de mantenerse eficiente y cercano
El modelo de Ara ha logrado un equilibrio notable entre eficiencia y propósito, pero no está exento de retos. Uno de los principales desafíos es mantener su competitividad logística en un país con una geografía compleja y una infraestructura desigual.
A pesar de estas dificultades, la compañía ha invertido en tecnología, automatización y optimización de rutas, mejorando la distribución de productos y garantizando la frescura en alimentos perecederos, un aspecto crucial en su promesa de valor.
Otro reto es adaptarse a las particularidades regionales. Colombia es un país de gran diversidad cultural y gastronómica, por lo que Ara ha diseñado estrategias flexibles para ajustar su oferta según los gustos y costumbres de cada zona. Esto incluye desde productos locales hasta promociones pensadas específicamente para cada comunidad.
Este esfuerzo por entender al cliente desde su entorno ha permitido que Ara sea vista como un vecino más, no una gran corporación distante, lo que fortalece la lealtad y el sentido de pertenencia de sus consumidores.
El impacto del “vecino confiable”
Para muchos colombianos, Tiendas Ara representa la cercanía, el ahorro y la confianza. Su expansión constante no se basa únicamente en abrir puntos de venta, sino en crear relaciones sostenibles con las comunidades donde opera.
Cada nueva tienda implica no solo inversión y empleo, sino también una apuesta por la inclusión, el respeto y el desarrollo local. En este sentido, Ara se ha convertido en un ejemplo de cómo el retail moderno puede tener un propósito social profundo, integrando la eficiencia empresarial con un compromiso humano y ambiental.
La marca ha sabido conectar con la esencia del consumidor colombiano: alguien que valora la calidad, pero también la empatía; que busca precios justos, pero no a costa del bienestar del planeta ni de las personas que producen lo que consume.
Ara y el futuro del retail sostenible
En un contexto global donde las empresas deben adaptarse a consumidores más conscientes y exigentes, Tiendas Ara ha logrado posicionarse como pionera en el retail sostenible en Colombia. Su combinación de precios bajos, productos locales, impacto social y responsabilidad ambiental crea un modelo que muchos consideran el futuro del comercio moderno.
El crecimiento de la cadena también refleja una tendencia más amplia: la transformación del consumo hacia modelos más inclusivos, sostenibles y responsables. En ese sentido, Tiendas Ara no solo vende productos; vende confianza, empatía y propósito.
Para 2026, la empresa proyecta continuar su expansión hacia nuevas regiones del país, fortalecer sus alianzas con proveedores nacionales y aumentar el número de tiendas alimentadas con energía solar. Su visión a largo plazo es clara: ser el vecino que cada comunidad necesita, un socio del bienestar y del progreso compartido.
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En poco más de una década, Tiendas Ara ha pasado de ser una nueva apuesta extranjera en el comercio colombiano a convertirse en un símbolo de desarrollo regional, sostenibilidad y comunidad. Su modelo demuestra que la rentabilidad no está reñida con la empatía, y que la verdadera fortaleza de una empresa radica en su capacidad de transformar positivamente el entorno donde opera.
Con su cercanía, su compromiso y su enfoque humano, Ara ha redefinido lo que significa ser un buen vecino en Colombia: uno que ofrece más que precios bajos, ofrece esperanza, oportunidades y progreso.
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