Análisis Luckas Emilo Ascárraga |
RESUMEN La relación comercial entre Nike y NBA comenzó en 1984 con la llegada de Michael Jordan a los escenarios de competencia, hasta convertir la Liga en un ritual de consumo en Estados Unidos, y hoy, con efecto en más de 180 países. El jugador elevó la visibilidad del producto deportivo, al tiempo que se convirtió en símbolo de la marca más allá del terreno del baloncesto. Es, quizá, el personaje más conocido del planeta. Y muchas de sus semejanzas con las de un héroe mítico tienen su origen en Nike y en las campañas de marketing que se crearon a su alrededor. Cada uno se alimentó del valor para los clientes de los otros. La fabricante era una marca que luchaba por sobrevivir cuando firmó un contrato con el atleta. Sus números estaban en rojo, por lo que se vio obligada a despedir a 400 operarios. Pero en 1996 y gracias a Jordan, logró el 44 por ciento del mercado de las zapatillas en los Estados Unidos, con ventas por valor de 3.600 millones de dólares. La confluencia de la estrella, el producto y la televisión advertía que la atracción por la marca de la NBA estaba impulsada por la "personalidad" del jugador. |
SI USTED DESEA MAS INFORMACIÓN SOBRE LOS TEMAS AQUI TRATADOS NOS PUEDE ESCRIBIR A igomeze@gmail.com