Ísimo, la revolución del hard discount que está transformando el consumo en Colombia - AmericaMalls & Retail
Ísimo, la revolución del hard discount que está transformando el consumo en Colombia - AmericaMalls & Retail
Ísimo, la revolución del hard discount que está transformando el consumo en Colombia

Tienda Ísimo
Ísimo, la revolución del hard discount que está transformando el consumo en Colombia, en un entorno económico desafiante, caracterizado por la inflación, el alza del costo de vida y la búsqueda constante de ahorro por parte de los consumidores, los formatos de tiendas hard discount han emergido como una alternativa clave en América Latina. En este escenario, Ísimo, una cadena de tiendas colombiana que ha apostado por precios bajos y productos de calidad, se ha convertido en uno de los actores más dinámicos del mercado. Su plan para 2025 es ambicioso: abrir 100 nuevas tiendas, consolidando su crecimiento exponencial y su impacto en la economía nacional.
Este artículo analiza en profundidad el fenómeno Ísimo, su modelo de negocio, su plan de expansión, el impacto social y económico de sus operaciones, y el contexto general del retail en Colombia y América Latina.
Vea también: Bre-B y la revolución de los pagos inmediatos en Colombia
Una expansión a toda marcha: 100 nuevas tiendas en 2025
El proyecto de expansión de Ísimo no es menor. La compañía ha anunciado que invertirá 140.000 millones de pesos colombianos para llevar a cabo la apertura de 100 nuevos puntos de venta en diversas regiones estratégicas del país. Esto responde a una estrategia clara: aumentar su cobertura nacional, llegar a nuevas comunidades y reforzar su presencia donde ya se ha consolidado.
Las regiones priorizadas para esta expansión incluyen Atlántico, Cundinamarca, Antioquia, Tolima y Huila. Esta elección obedece tanto a la densidad poblacional como a las oportunidades de penetración en zonas donde el formato hard discount aún tiene espacio para crecer.
Resultados que avalan el crecimiento
Durante 2024, Ísimo alcanzó resultados sorprendentes: cerró el año con más de 262 tiendas y ventas superiores a los 650.000 millones de pesos, lo que representó un crecimiento del 27% respecto al año anterior. Para 2025, la meta es aún más ambiciosa: alcanzar ventas por 850.000 millones de pesos, lo que representaría un aumento del 30% anual.
Este ritmo de crecimiento es notable y coloca a Ísimo como uno de los líderes del sector minorista en el país, particularmente dentro del segmento hard discount.
Un modelo basado en eficiencia, cercanía y marcas propias
El modelo de negocio de Ísimo se fundamenta en tres pilares esenciales:
1. Precios bajos todos los días
Ísimo sigue la lógica clásica del formato hard discount: eliminar los sobrecostos innecesarios, optimizar la logística, reducir la cantidad de referencias en tienda y enfocarse en ofrecer precios más competitivos. Este modelo ha demostrado ser especialmente efectivo en entornos económicos desafiantes, donde los consumidores priorizan el ahorro.
2. Marcas propias como motor de rentabilidad
Un aspecto clave en la estrategia de Ísimo es la fuerte apuesta por marcas propias. En 2024, estas marcas representaron cerca del 50% de las ventas de la compañía. Para 2025, el objetivo es llevar esa participación al 60%, fortaleciendo la fidelidad del consumidor con productos accesibles y de buena calidad.
Las marcas propias permiten a la empresa controlar la calidad, ofrecer productos a menor precio y diferenciarse frente a sus competidores. Además, reducen la dependencia de grandes marcas multinacionales.
3. Oferta local y apoyo a proveedores nacionales
Ísimo se ha destacado por tener una política activa de inclusión de proveedores locales. El 87% de sus proveedores son pequeñas y medianas empresas nacionales, lo cual no solo estimula las economías regionales, sino que también permite ofrecer una propuesta de valor basada en productos frescos y de cercanía.
Impacto económico y social: mucho más que ventas
El crecimiento de Ísimo no solo se traduce en números. La expansión tiene un impacto directo en la generación de empleo, el fortalecimiento de la economía local y el dinamismo del sector agroalimentario y manufacturero colombiano.
Por cada tienda que se abre, se crean decenas de empleos directos e indirectos. Además, al trabajar con proveedores locales, Ísimo contribuye a formalizar cadenas de suministro y promueve la competitividad del tejido empresarial colombiano.
Su modelo, más allá de ser rentable, ha demostrado tener un enfoque de impacto social consciente, al atender necesidades reales de consumo de millones de colombianos que buscan precios bajos sin sacrificar calidad.
El contexto del hard discount en 2025: tendencia en alza
El auge del modelo hard discount no es exclusivo de Colombia. Según datos de Kantar, este formato crece a un ritmo del 25% en valor a nivel regional, particularmente en países como México, Colombia, Perú y Brasil. Se estima que en Colombia, más de la mitad del gasto en consumo masivo ya se realiza en canales modernos, entre ellos el hard discount.
El consumidor latinoamericano ha cambiado. Hoy busca productos funcionales, a buen precio, con formatos de tienda sencillos, cercanos a sus hogares, y con una experiencia de compra rápida. Ísimo, como otras marcas del segmento, ha sabido adaptarse con agilidad a estas nuevas exigencias.
Competencia en el sector: ¿cómo se posiciona Ísimo?
El sector del hard discount en Colombia es dinámico y competitivo. Junto a Ísimo, operan marcas como D1, Ara y Justo & Bueno (actualmente en recuperación). Cada una ha desarrollado propuestas distintas, aunque todas coinciden en la búsqueda del cliente sensible al precio.
Ísimo se diferencia por su fuerte apuesta por marcas propias, su enfoque regional y su política de integración con pymes colombianas. Estas características le han permitido crecer de manera sostenida sin perder eficiencia operativa.
Además, su presencia en regiones intermedias y no solo en grandes centros urbanos le ha dado una ventaja competitiva frente a otras cadenas concentradas en las capitales.
Inversión sostenida: un motor clave para su consolidación
La inversión de 140.000 millones de pesos anunciada para 2025 marca un récord en la historia de la compañía. Estos fondos serán utilizados no solo para la construcción y adecuación de nuevas tiendas, sino también para fortalecer la logística, implementar tecnología y mejorar procesos internos.
Asimismo, parte de la inversión está destinada al desarrollo de nuevas líneas de marcas propias, al establecimiento de centros de distribución regionales y a la capacitación del personal, garantizando estándares operativos altos.
¿Qué esperar del futuro de Ísimo?
Todo indica que Ísimo está construyendo un modelo sostenible de crecimiento que combina eficiencia empresarial, compromiso social y visión estratégica. Su enfoque está alineado con las tendencias globales de consumo consciente y economía local, y responde a las necesidades de millones de consumidores que buscan soluciones económicas y confiables.
Si logra mantener la calidad de su oferta, controlar sus márgenes operativos y seguir apoyándose en proveedores nacionales, Ísimo no solo consolidará su posición en Colombia, sino que podría incluso pensar en exportar su modelo a otros países de la región.
Vea también: Movilidad inteligente en América Latina
Un caso de éxito en construcción
Ísimo está demostrando que es posible crecer con impacto. Su modelo de hard discount no solo ha respondido a las necesidades del consumidor colombiano contemporáneo, sino que también ha generado beneficios tangibles en términos de empleo, fortalecimiento empresarial y dinamismo regional.
En un momento donde el sector retail atraviesa grandes transformaciones y donde las marcas deben responder con rapidez, sensibilidad social y visión de futuro, Ísimo se posiciona como un actor clave del nuevo consumo latinoamericano.
Su expansión en 2025 marcará un hito, no solo para la empresa, sino para todo el sector.
Ísimo, la revolución del hard discount que está transformando el consumo en Colombia

Tienda Ísimo
Ísimo, la revolución del hard discount que está transformando el consumo en Colombia, en un entorno económico desafiante, caracterizado por la inflación, el alza del costo de vida y la búsqueda constante de ahorro por parte de los consumidores, los formatos de tiendas hard discount han emergido como una alternativa clave en América Latina. En este escenario, Ísimo, una cadena de tiendas colombiana que ha apostado por precios bajos y productos de calidad, se ha convertido en uno de los actores más dinámicos del mercado. Su plan para 2025 es ambicioso: abrir 100 nuevas tiendas, consolidando su crecimiento exponencial y su impacto en la economía nacional.
Este artículo analiza en profundidad el fenómeno Ísimo, su modelo de negocio, su plan de expansión, el impacto social y económico de sus operaciones, y el contexto general del retail en Colombia y América Latina.
Vea también: Bre-B y la revolución de los pagos inmediatos en Colombia
Una expansión a toda marcha: 100 nuevas tiendas en 2025
El proyecto de expansión de Ísimo no es menor. La compañía ha anunciado que invertirá 140.000 millones de pesos colombianos para llevar a cabo la apertura de 100 nuevos puntos de venta en diversas regiones estratégicas del país. Esto responde a una estrategia clara: aumentar su cobertura nacional, llegar a nuevas comunidades y reforzar su presencia donde ya se ha consolidado.
Las regiones priorizadas para esta expansión incluyen Atlántico, Cundinamarca, Antioquia, Tolima y Huila. Esta elección obedece tanto a la densidad poblacional como a las oportunidades de penetración en zonas donde el formato hard discount aún tiene espacio para crecer.
Resultados que avalan el crecimiento
Durante 2024, Ísimo alcanzó resultados sorprendentes: cerró el año con más de 262 tiendas y ventas superiores a los 650.000 millones de pesos, lo que representó un crecimiento del 27% respecto al año anterior. Para 2025, la meta es aún más ambiciosa: alcanzar ventas por 850.000 millones de pesos, lo que representaría un aumento del 30% anual.
Este ritmo de crecimiento es notable y coloca a Ísimo como uno de los líderes del sector minorista en el país, particularmente dentro del segmento hard discount.
Un modelo basado en eficiencia, cercanía y marcas propias
El modelo de negocio de Ísimo se fundamenta en tres pilares esenciales:
1. Precios bajos todos los días
Ísimo sigue la lógica clásica del formato hard discount: eliminar los sobrecostos innecesarios, optimizar la logística, reducir la cantidad de referencias en tienda y enfocarse en ofrecer precios más competitivos. Este modelo ha demostrado ser especialmente efectivo en entornos económicos desafiantes, donde los consumidores priorizan el ahorro.
2. Marcas propias como motor de rentabilidad
Un aspecto clave en la estrategia de Ísimo es la fuerte apuesta por marcas propias. En 2024, estas marcas representaron cerca del 50% de las ventas de la compañía. Para 2025, el objetivo es llevar esa participación al 60%, fortaleciendo la fidelidad del consumidor con productos accesibles y de buena calidad.
Las marcas propias permiten a la empresa controlar la calidad, ofrecer productos a menor precio y diferenciarse frente a sus competidores. Además, reducen la dependencia de grandes marcas multinacionales.
3. Oferta local y apoyo a proveedores nacionales
Ísimo se ha destacado por tener una política activa de inclusión de proveedores locales. El 87% de sus proveedores son pequeñas y medianas empresas nacionales, lo cual no solo estimula las economías regionales, sino que también permite ofrecer una propuesta de valor basada en productos frescos y de cercanía.
Impacto económico y social: mucho más que ventas
El crecimiento de Ísimo no solo se traduce en números. La expansión tiene un impacto directo en la generación de empleo, el fortalecimiento de la economía local y el dinamismo del sector agroalimentario y manufacturero colombiano.
Por cada tienda que se abre, se crean decenas de empleos directos e indirectos. Además, al trabajar con proveedores locales, Ísimo contribuye a formalizar cadenas de suministro y promueve la competitividad del tejido empresarial colombiano.
Su modelo, más allá de ser rentable, ha demostrado tener un enfoque de impacto social consciente, al atender necesidades reales de consumo de millones de colombianos que buscan precios bajos sin sacrificar calidad.
El contexto del hard discount en 2025: tendencia en alza
El auge del modelo hard discount no es exclusivo de Colombia. Según datos de Kantar, este formato crece a un ritmo del 25% en valor a nivel regional, particularmente en países como México, Colombia, Perú y Brasil. Se estima que en Colombia, más de la mitad del gasto en consumo masivo ya se realiza en canales modernos, entre ellos el hard discount.
El consumidor latinoamericano ha cambiado. Hoy busca productos funcionales, a buen precio, con formatos de tienda sencillos, cercanos a sus hogares, y con una experiencia de compra rápida. Ísimo, como otras marcas del segmento, ha sabido adaptarse con agilidad a estas nuevas exigencias.
Competencia en el sector: ¿cómo se posiciona Ísimo?
El sector del hard discount en Colombia es dinámico y competitivo. Junto a Ísimo, operan marcas como D1, Ara y Justo & Bueno (actualmente en recuperación). Cada una ha desarrollado propuestas distintas, aunque todas coinciden en la búsqueda del cliente sensible al precio.
Ísimo se diferencia por su fuerte apuesta por marcas propias, su enfoque regional y su política de integración con pymes colombianas. Estas características le han permitido crecer de manera sostenida sin perder eficiencia operativa.
Además, su presencia en regiones intermedias y no solo en grandes centros urbanos le ha dado una ventaja competitiva frente a otras cadenas concentradas en las capitales.
Inversión sostenida: un motor clave para su consolidación
La inversión de 140.000 millones de pesos anunciada para 2025 marca un récord en la historia de la compañía. Estos fondos serán utilizados no solo para la construcción y adecuación de nuevas tiendas, sino también para fortalecer la logística, implementar tecnología y mejorar procesos internos.
Asimismo, parte de la inversión está destinada al desarrollo de nuevas líneas de marcas propias, al establecimiento de centros de distribución regionales y a la capacitación del personal, garantizando estándares operativos altos.
¿Qué esperar del futuro de Ísimo?
Todo indica que Ísimo está construyendo un modelo sostenible de crecimiento que combina eficiencia empresarial, compromiso social y visión estratégica. Su enfoque está alineado con las tendencias globales de consumo consciente y economía local, y responde a las necesidades de millones de consumidores que buscan soluciones económicas y confiables.
Si logra mantener la calidad de su oferta, controlar sus márgenes operativos y seguir apoyándose en proveedores nacionales, Ísimo no solo consolidará su posición en Colombia, sino que podría incluso pensar en exportar su modelo a otros países de la región.
Vea también: Movilidad inteligente en América Latina
Un caso de éxito en construcción
Ísimo está demostrando que es posible crecer con impacto. Su modelo de hard discount no solo ha respondido a las necesidades del consumidor colombiano contemporáneo, sino que también ha generado beneficios tangibles en términos de empleo, fortalecimiento empresarial y dinamismo regional.
En un momento donde el sector retail atraviesa grandes transformaciones y donde las marcas deben responder con rapidez, sensibilidad social y visión de futuro, Ísimo se posiciona como un actor clave del nuevo consumo latinoamericano.
Su expansión en 2025 marcará un hito, no solo para la empresa, sino para todo el sector.
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