Mostrando las entradas con la etiqueta CONSUMIDOR COLOMBIANO. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta CONSUMIDOR COLOMBIANO. Mostrar todas las entradas

viernes, marzo 16, 2018

El colombiano se ha convertido en comprador conveniente y consumidor conformista


El colombiano se ha convertido en comprador conveniente y consumidor conformista

La reducción en el ingreso por cuenta de los impuestos, la inflación y la devaluación de años pasados, transformaron la dinámica en las compras y el consumo de los hogares.




Bloomberg

BLOOMBERG
POR:
PORTAFOLIO
MARZO 15 DE 2018 - 10:31 P.M.

“Para entender los cambios de comportamiento del consumidor colombiano hay que tener claro que ‘consumidor’ no es lo mismo que ‘comprador’. Son dos cosas distintas, así sean la misma persona”, explica Camilo Herrera Mora, fundador de Raddar.

En los últimos años, de la mano con los cambios en el contexto económico del país, se han dado cambios en la dinámica del comprador. Esto como consecuencia del choque de ingresos que tuvo la economía del 2014 al 2017, derivado de un menor ingreso per cápita, una inflación más alta, una devaluación del peso, la implementación del IVA y el aumento en el número de personas que tributan de la base de personas que tributan renta.

(Lea: El consumidor colombiano es más receptivo a la publicidad que el promedio mundial)


DEL LADO DEL COMPRADOR

“La estructura del gasto en el consumo ha cambiado de manera importante y se derivaron dos fenómenos. El primero es que la gente cada vez más prefiere promociones y descuentos”, dijo Herrera a Portafolio.co.

(Lea: Confianza del consumidor en terreno negativo durante febrero, pero mejor que en 2017)



Mindsets del comprador en Colombia.

RADDAR CONSUMER KNOWLEDGE GROUP

De acuerdo con los cálculos de Raddar, en el año 2010, el comprador de promociones era el 17%, el de oportunidad era el 40% y el de valor era el 42%. Al cierre del año pasado, el 90% del mercado era comprador de promociones.

“Eso muestra una transformación gigantesca en la racionalidad de compra del colombiano, producto de dos fenómenos: efectivamente la gente el año pasado tuvo menos plata, por lo que buscó precios bajos, y el mercado le dio esos precios bajos al comprador”, explica Herrera.

Como fue evidente, en 2017 se fortalecieron y expandieron las cadenas que ofrecen precios bajos, conocidos como los hard disccounts, pasando de ser el 0,5% a ser el 3,2% del mercado minorista local. Así mismo se expandieron los servicios de domicilios online, las aerolíneas de bajo costo, tiendas internacionales de ropa llegaron con precios bajos, entre otros. En otras palabras, todo el ecosistema hizo que el comprador comprara más barato.

Para Herrera “la evolución del comprador en los últimos años ha llevado a que cada vez busque precios más bajos, formatos de cercanía y tiendas de precios bajos. Del otro lado, el comprador actual usa las tarjetas débito y crédito en mayor medida que antes, quitándole espacio al efectivo”.



Estimado de la participación de medios de pago en el gasto de los hogares 2017.

RADDAR CONSUMER KNOWLEDGE GROUP

CAMBIOS EN PREFERENCIAS DEL GASTO EN HOGARES

El choque de ingresos que derivó en una racionalización diferente del gasto forzó un cambio en las prioridades de compra de los hogares.

“Los jefes de hogar defendieron a capa y espada el gasto en alimentos, en salud y en educación, que no solo son los elementos más importante de la canasta, sino también los que más subieron de precio, por situaciones como el Fenómeno de la Niña, que elevaron la inflación. Este cambio llevó a que otras categorías perdieran espacio dentro de la proporción del gasto del hogar. Todas menos una: entretenimiento”, argumenta el fundador de Raddar.

En su análisis se ve que ‘sistemáticamente’ el gasto de los hogares en el componente de Entretenimiento aumenta de manera continua y profunda. Esto se explica, según Herrera, a que el colombiano, como consumidor y no como comprador, tiende a confundir el concepto de ‘felicidad’ con las palabras ‘diversión’ y ‘placer’. En este orden de ideas, al buscar felicidad recurre a planes de entretenimiento en busca de placer. Según las cifras de Raddar, el 32% del gasto de los hogares se pagó con tarjeta de crédito en 2017.

DEL LADO DEL CONSUMIDOR

Desde el 2002 hasta el 2014, aproximadamente, el fenómeno de revaluación permitió al consumidor colombiano acceder a más productos de mejor calidad, en muchos de los casos importados y de marcas reconocidas, por lo que el nivel de satisfacción era alto. El mismo choque de ingresos ocurrido en 2014, que llevó al comprador a buscar el camino de los descuentos, llevó al consumidor a pasar de lo que Camilo Herrera calificó como “premium” a ser un consumidor “moderado”.

Agrega que en Colombia “pasamos de un consumidor que se sentía con mucha plata, que se sentía en abundancia, que estaba feliz, a ser un consumidor mucho más moderado y prudente, que reflexiona con mucho detenimiento y cuidado lo que va a consumir”.

Otros aspectos, como el contexto de concientización sobre el cuidado del medio ambiente, por ejemplo, llevaron a que los colombianos se replantearan sus hábitos de consumo de bolsas plásticas, o de agua y energía tras el Fenómeno del Niño de 2016. Otro ejemplo citado por Herrera es el debate sobre la tenencia excesiva de prendas de vestir y la discusión sobre si las líneas de producción de confecciones de las grandes cadenas mundiales son socialmente responsables en materia ambiental y laboral. En el tema de transporte, la gente está debatiendo si es necesario tener un vehículo propio o si puede pasarse a usar el transporte masivo, o medios alternativos como la bicicleta.

“En ese orden de ideas, tanto el comprador como el consumidor están en procesos de transformación muy grandes, y en el 2017 nosotros percibimos en Raddar la velocidad más grande de esta transformación en todo el tiempo que llevamos de registro”, indicó.

Tras hacer este análisis, Camilo Herrera llega a tres conclusiones principales.

1. “Estamos en un problema grande, pues el comprador y el consumidor en esa transformación conocieron pisos que no conocían. El comprador se convirtió en un comprador conveniente, al querer comprar todo rápido, barato y cerca, lo que no es necesariamente lo mejor. Al momento de comprar algo, entre más opciones de elección es mejor. El comprador conveniente sacrifica su libertad de elección por precio, velocidad y cercanía. Eso desemboca inevitablemente en otro problema de consumo: el consumidor consumista, que al saber que está accediendo a productos más baratos, espera menos del producto. Menor calidad o menor rendimiento. Esto puede cambiar en la medida en que el ingreso puede subir, con una decisión de compra más elaborada”.

2. Las marcas tienen que buscar al consumidor y no lo están haciendo, pues enseñan a comprar pero no a usar. ¿Cuántos productos tenemos en la casa y cuando los vamos a usar no sabemos cómo hacerlo, o los usamos mal? Es clave el tema de educación al consumidor.

3. Es importante saber que el consumidor tiene derechos, pero también tiene deberes. En la legislación mundial los deberes son mucho más claros que en la colombiana.


Julián Calderón H.
julcal@eltiempo.com

domingo, octubre 08, 2017

¿Cuál es el ADN del consumidor colombiano?

¿Cuál es el ADN del consumidor colombiano?





¿Cuál es el ADN del consumidor colombiano?

MAYO 20, 2016 por DANIEL ANGULO



La única constante es el cambio. Este postulado, que por cierto también se aplica a la investigación de mercados, es la gran lección en torno a cómo se constituye el perfil del consumidor colombiano actual.

La impronta de nuestros tiempos está marcada por un personaje inteligente, mutante y crítico, que intenta romper el molde y hacerse su propio lugar en el entorno del mercado colombiano. Entender al cambio y a sus protagonistas es la base para satisfacer del mejor modo la demanda en función de la oferta.

Consumidores globalizados pero fuertemente locales. Hombres que difieren del patrón tradicional. Mujeres que buscan reivindicación. Compra inteligente, refugios digitales, conciencia colectiva. Estos son algunos de los rasgos que se muestran como distintivos del colombiano cuando se enfrenta a la compra y la toma de decisión. El reto para la investigación de mercados es entonces, abordar el cambio como una constante y dinamizar las metodologías y herramientas con las que se obtiene la información de los consumidores.

P&M quiso abordar el tema desde el centro del sistema solar del consumo: El consumidor. Y presentar a quienes se dedican a profundizar en el conocimiento de ese ciudadano que está en evolución, que cambia sus hábitos, sus formas de pensar y sus maneras de relacionarse con las marcas.

ADN del consumidor colombiano

Me informo luego existo. Este postulado es hoy una certeza y esa información es buscada en múltiples canales. La demanda actual es impulsada por la clase media, las mujeres y el crecimiento de las redes sociales y el acceso a telefonía móvil afirma Juan Felipe Saavedra, gerente comercial de Nielsen Colombia. La clase media ha hecho que existan muchos más consumidores con dinero disponible para hacer compras. Sin embargo, esto no se ve necesariamente reflejado en el incremento de sus compras “básicas” o que suplen sus necesidades. El consumidor colombiano es mucho más racional, analítico y conservador. Y también está aprendiendo a diversificar su gasto en otro tipo de compras como viajes, eventos, etc. También es un consumidor que analiza muy bien las opciones de mercado, y es cada vez más exigente con las marcas.

Aunque continúa siendo un consumidor leal a las marcas, demostrado por altos niveles de market share en varias categorías, el paso a marcas más económicas es recurrente como alternativa de ahorro en los últimos 5 años.

“No podemos decir que no necesitamos a la tv para llegar a la gente” expresa Catalina Bonnet de Millward Brown. Las empresas no somos nadie sin la opinión de las personas, y eso nos lleva a obtener opiniones de calidad, de manera agradable intentando extraer la información en blogs y lugares donde se comparte información. En redes sociales, el consumidor colombiano se sincera y en general también”.


Feminidad es la nueva masculinidad

Pulso, un estudio desarrollado por Discovery Insights en Colombia, arrojó resultados al respecto del consumidor colombiano masculino actual. Uno de ellos determinó que el 69% de los hombres colombianos piensa que la clave del éxito está en la reinvención. Asimismo, la estadística dice que el 72% de los hombres actuales tienen más libertad que los padres en su época. Por otro lado, la mayoría estuvo de acuerdo en que la corrupción es el factor que más se interpone en la posibilidad de alcanzar el éxito y la felicidad.

Entre otros resultados se encuentra que el 74% de los hombres colombianos opina que lo más importante es ser fiel a sí mismos, por encima de todo y todos; el 81% afirma que le gustaría llegar a ser su propio jefe en algún momento de su vida y el 71% valora más la creatividad que el éxito material. Un resultado curioso es que el 68% dice que la apariencia física del hombre es tan importante como la de una mujer, lo que los lleva a convertirse en grandes consumidores de productos de belleza. Para este estudio, es claro que el hombre de hoy “se adapta a los desafíos y lucha por lo que quiere, se encuentra en un estado de búsqueda personal, en un proceso de evolución y cambio”.


Colombianas entre tradición y cambio

60% de la población de mujeres hoy es profesional, y también uno de los principales aportantes a los gastos del hogar (33% en 2012). Este es sin duda uno de los cambios más importantes pues la mujer está aumentando significativamente su contribución a la actividad económica, cambiando su anterior rol de ama de casa, por el de jefe del hogar y comenzando a tomar cada vez con más fuerza decisiones dentro del mismo.

La colombiana ya no quiere parecerse al modelo de hombre que manejaba a la sociedad. Quiere ser ella misma, con un espacio suyo y propio donde logre salir y ser reconocida. “El proceso ha sido duro, hace varios años si la mujer no sale a generar un ingreso, el hogar no logra subsistir, expresa Catalina Bonnet. El insight es “Ya no soy la segunda en el hogar”.

Con esto concuerda Javier Restrepo de Ipsos: “Cada vez más, tanto en Colombia como en el mundo, la mujer quiere afianzar su diferencia con el hombre. Si en los 60 la liberación femenina quería la igualdad, ahora se quiere acabar con la discriminación”.

Pero paradójicamente, el espíritu de ama de casa, aún subsiste, afirman Liliana Baena y María Josefina Sierra de Connecta. “Las mujeres que trabajan quieren ser bien evaluadas; el ama de casa que trabaja no ha entregado la mitad de la responsabilidad, siguen echando sobre sus hombros la carga del hogar, hay muchos sentimientos de culpa cuando al hombre se le asignan labores de colaboración en el hogar”.

Se está desarrollando un segmento nuevo, de parejas jóvenes, que hacen que el modelo familiar tradicional sea ahora muy raro. Dinkers – Double Income No Kids- y parejas sin hijos que cada vez más postergan la paternidad y hacen que más que etapas de transición, se consoliden patrones de estilos de vida. Del mismo modo, agrega Sierra, segmentos como el adulto mayor ganan cada vez más participación en la medida en que la expectativa de vida se alarga y los jubilados tienen ingresos estables y alta capacidad de compra. “La gente de mercadeo en Colombia aún no se ha dado cuenta de lo interesante que es este segmento; hay paradigmas que deben romperse. Incluso la gente mayor cambia de marca” precisa Baena.


El sesgo de la cortesía

Armando Mora, mexicano y CEO de Ipsos en Colombia, tiene una mirada desde afuera alimentada por su experiencia en Colombia.

“El consumidor colombiano es muy dado a asumir el llamado “sesgo de cortesía”. Nos da miedo decir que no, afirma. Ante este problema, la investigación en medios digitales apunta a permitir que las personas expresen más libremente sus opiniones reales, porque se crea una sensación de intimidad y de dominio en la que la expresión sale a flote naturalmente. Es por esto que medios como la televisión se han vuelto más de entretenimiento, ya que los shoppers, usuarios o consumidores buscan y se informan a través de medios digitales.

Liliana Baena, de Connecta, comparte esta observación de Armando Mora. Luego de años de observar y explorar a los colombianos a través de investigaciones de mercados, se ha dado cuenta de la constante presencia de este sesgo: “hay una carga fuertemente cultural, todo lo que se le muestra a un potencial comprador dice “yo lo compraría”, y es así como a toda en encuesta calificamos mínimo con 3 sobre 5 y nunca contemplamos el 1 como calificación”.

Inteligencia colectiva

“Uno de los aspectos que hemos identificado como un detonante para el proceso de compra es la demanda, que está asociada al mismo proceso de compra, pero bien diferenciada. El Shopper está en la búsqueda de razones mucho más elaboradas en el momento de hacer su compra, es mucho más exigente, y hacia allí es hacia donde se mueven las tendencias del mercado hoy en día” señaló Ricardo Gutiérrez de Nielsen.

Estamos buscando canales cercanos a la casa y compramos más que antes. La cercanía es fundamental, el tiempo es más reducido para que el consumidor colombiano pueda hacer sus compras, no queremos hacer filas ni perder tiempo. Los canales reflejan el cambio del comportamiento del shopper colombiano, afirma David Fiss, saliente director comercial de Kantar Worldpanel Colombia.

El colombiano incursiona en el consumo de categorías menos tradicionales, como es el caso del té y los jugos industrializados. Se trata de comprar practicidad, lo mismo que pasa en categorías como aseo y hogar. Según Fiss, sacrificamos el consumo de alimentos para comprar en otras categorías. El último cambio es cultural. Exige que los anunciantes sean claros en la comunicación sobre los beneficios de la marca. Y tienden a identificarse con productos hechos en Colombia. Somos globales pero ante todo colombianos, expresa.

Nos miramos al espejo

Cada vez más, al individuo, las marcas lo están persiguiendo para lograr su atención. Y cada vez más ese individuo está rechazando a la comunicación intrusiva. Es alguien que ahora expresa en voz alta, cuáles son los mensajes que quiere ver y oír, expresa Catalina Bonnet, directora de servicio al cliente de Millward Brown. Mientras tanto, otras marcas que no hacen tanto ruido pero que sí generan voz a voz, logran que sean los consumidores los que las busquen. Las marcas con más ruido suelen ser vistas como más genéricas para los colombianos. Somos más críticos y eso hace parte de nuestra idiosincrasia, ya no mordemos cualquier anzuelo, afirma Bonnet. “No queremos nada complicado”.

Para Bonnet, sin llegar a generalizar, si hay patrones en el consumidor colombiano: Nos gusta recibir comunicación original, mezclada con una parte de humor. Burlarnos de nosotros mismos nos atrae, somos empáticos, personales y abiertos a ver nuestras falencias. Las marcas que logran conectarse con nosotros son las que permiten que el colombiano sea crítico consigo mismo. Nos gusta mostrarnos como vencedores ante la adversidad.

La huella digital del colombiano

El consumidor colombiano tiene unas características particulares importantes. Es un consumidor que busca tener cercanía en los puntos de venta (de ahí la importancia que continúa teniendo la tienda tradicional), y que busca que éstos además mantengan un buen ambiente, es decir, que sean limpios, organizados, y que la tienda tenga una buena presentación.

También es un consumidor que hace desembolsos bajos, y que está muy pendiente de la relación precio vs calidad de los productos que compra. Una variable importante es que también está buscando promociones incluso más allá del precio bajo.

Otro aspecto fundamental, es que el consumidor colombiano espera un buen trato y atención en los canales de venta. A la hora de la decisión de compra, está atento a la opinión de los demás, incluso consultando diferentes canales para informarse, por lo que la decisión de compra en el punto de venta termina siendo un factor clave.

Del mismo modo, hay que decir que cambiamos también la forma de comprar. El que seamos “cazadores de ofertas” es un mito; en los últimos años el consumidor colombiano se muestra como observador de precios y tablas nutricionales, lee etiquetas, es inteligente y es decidido sobre lo que compra porque ante la abundancia de ofertas debe comprar sin arriesgarse mucho ante lo nuevo. Así pues, Javier Restrepo y Armando Mora, de Ipsos, creen que más que “malicia indígena” tenemos una inteligencia de compradores, que tras haber pasado experiencias malas y buenas, aprendimos a reconocer una oferta conveniente respecto a una que no lo es. “Es un mecanismo de defensa, nos cansamos del abuso y ahora tenemos muy en claro los valores, y esos valores los buscamos en las marcas”. Se necesita entonces un entorno responsable, en el que se fomenten las buenas prácticas y los valores, precisa Restrepo. Esta es una misión a la que no deben escapar las empresas de investigación, en su papel como parte del ecosistema de valor del mercado.

jueves, enero 05, 2017

Kantar Ibope Media revela hábitos de con...

Kantar Ibope Media revela hábitos de con...


Kantar Ibope Media revela hábitos de consumo de los colombianos en 2016

DICIEMBRE 29, 2016 por EDWIN AUGUSTO PEREZ


Kantar Ibope Media revela los hábitos de consumo de los colombianos en 2016. El siguiente es un resumen de los datos más relevantes que Kantar Ibope Media dio a conocer a lo largo del año, con base en los resultados del TGI (Target Group Index), como se le conoce al estudio que permite identificar el consumo de productos, hábitos y actitudes de los colombianos.




Los siguientes son algunos de los datos más relevantes:

Niños, entre los 4 y los 11 años

Dedican entre 5 y 10 horas a la semana a navegar en internet.
Entre los aparatos más utilizados por los menores para navegar en internet, se destacan el computador de escritorio con un 76%, el Smartphone con 66.8%, la Laptop con 46%, la Tablet con 32.7% y consolas de video juegos con 13.5%.
Incluso entre las principales actividades que realizan los padres junto con los niños están, jugar juegos Online con un 50%.

Los Millennials (nacidos entre 1979 – 1996)

En cuanto al consumo en medios la audiencia que más creció en este target fue la de internet pasando de un 86% a un 92%, seguida por cine que creció 3 puntos porcentuales llegando a un 11% y televisión por cable pasando de un 94% a un 96%.
El 92% de los millennials manifestó haberse conectado a internet en los últimos 7 días.
El 85% tiene un Smartphone. Esta cifra creció 16 puntos porcentuales en solo un año.
El 74% tiene computador y el 18% tiene Tablet.

Mujeres

Al analizar la jornada del consumo de medios de las mujeres de lunes a viernes la tendencia es la siguiente: Se despiertan oyendo radio, a medio día cambian a TV o a internet. A las 8 de la noche vuelven a la TV. El resto de los medios los consumimos en diferentes momentos a lo largo del día.
En los últimos 5 años las mujeres gastaron en promedio un 4% más de dinero en compras personales.
El lugar preferido de las mujeres entre los 25 y los 45 años para hacer las compras es el Centro comercial donde el pico de afluencia se produce entre las 6 y las 7 p.m. El 59% visita los centros comerciales semanalmente.

Los productos que más compraron en el último mes fueron Ropa interior, calzado y Ropa exterior.

Padres

El 70% de los padres en nuestro país considera que es muy importante estar bien informado. El 80% de ellos leyeron u hojearon periódicos y el 27% visitaron sitios de periódicos vía internet en los últimos 30 días.
Entre sus temas de consulta predilectos se encuentran los deportes; un 49% de ellos lee frecuentemente secciones de deportes en periódicos impresos y un 24% escucha en radio deportes en vivo.

Para el 64% de los padres es importante ser atractivo para el sexo opuesto.
Al 50% les encanta cocinar. De ellos el 44% cocinó en el último mes. El 14% lee frecuentemente secciones de comida, bebida y cocina, El 12% ven programas de cocina.

La generación Baby Boomer (nacidos entre 1946 y 1964)

El 44% de esta generación lee periódicos casi todos los días.
El 35% se considera adicto a la televisión.
El 49% confía en los periódicos o en la TV para mantenerse informado.
Para el 43% la radio es su principal fuente de entretenimiento y escucha radio cuando necesita una actualización rápida de noticias.

El 41% de los Baby Boomers posee un Smartphone y el 6% piensa comprar uno en los próximos meses. El 30% ha usado su celular para conectarse a internet en los últimos 30 días.

martes, octubre 11, 2016

¿Cuál es el ADN del consumidor colombiano?


¿Cuál es el ADN del consumidor colombiano?

MAYO 20, 2016 por DANIEL ANGULO00000


La única constante es el cambio. Este postulado, que por cierto también se aplica a la investigación de mercados, es la gran lección en torno a cómo se constituye el perfil del consumidor colombiano actual.

La impronta de nuestros tiempos está marcada por un personaje inteligente, mutante y crítico, que intenta romper el molde y hacerse su propio lugar en el entorno del mercado colombiano. Entender al cambio y a sus protagonistas es la base para satisfacer del mejor modo la demanda en función de la oferta.

Consumidores globalizados pero fuertemente locales. Hombres que difieren del patrón tradicional. Mujeres que buscan reivindicación. Compra inteligente, refugios digitales, conciencia colectiva. Estos son algunos de los rasgos que se muestran como distintivos del colombiano cuando se enfrenta a la compra y la toma de decisión. El reto para la investigación de mercados es entonces, abordar el cambio como una constante y dinamizar las metodologías y herramientas con las que se obtiene la información de los consumidores.

P&M quiso abordar el tema desde el centro del sistema solar del consumo: El consumidor. Y presentar a quienes se dedican a profundizar en el conocimiento de ese ciudadano que está en evolución, que cambia sus hábitos, sus formas de pensar y sus maneras de relacionarse con las marcas.

ADN del consumidor colombiano

Me informo luego existo. Este postulado es hoy una certeza y esa información es buscada en múltiples canales. La demanda actual es impulsada por la clase media, las mujeres y el crecimiento de las redes sociales y el acceso a telefonía móvil afirma Juan Felipe Saavedra, gerente comercial de Nielsen Colombia. La clase media ha hecho que existan muchos más consumidores con dinero disponible para hacer compras. Sin embargo, esto no se ve necesariamente reflejado en el incremento de sus compras “básicas” o que suplen sus necesidades. El consumidor colombiano es mucho más racional, analítico y conservador. Y también está aprendiendo a diversificar su gasto en otro tipo de compras como viajes, eventos, etc. También es un consumidor que analiza muy bien las opciones de mercado, y es cada vez más exigente con las marcas.

Aunque continúa siendo un consumidor leal a las marcas, demostrado por altos niveles de market share en varias categorías, el paso a marcas más económicas es recurrente como alternativa de ahorro en los últimos 5 años.

“No podemos decir que no necesitamos a la tv para llegar a la gente” expresa Catalina Bonnet de Millward Brown. Las empresas no somos nadie sin la opinión de las personas, y eso nos lleva a obtener opiniones de calidad, de manera agradable intentando extraer la información en blogs y lugares donde se comparte información. En redes sociales, el consumidor colombiano se sincera y en general también”.


Feminidad es la nueva masculinidad

Pulso, un estudio desarrollado por Discovery Insights en Colombia, arrojó resultados al respecto del consumidor colombiano masculino actual. Uno de ellos determinó que el 69% de los hombres colombianos piensa que la clave del éxito está en la reinvención. Asimismo, la estadística dice que el 72% de los hombres actuales tienen más libertad que los padres en su época. Por otro lado, la mayoría estuvo de acuerdo en que la corrupción es el factor que más se interpone en la posibilidad de alcanzar el éxito y la felicidad.

Entre otros resultados se encuentra que el 74% de los hombres colombianos opina que lo más importante es ser fiel a sí mismos, por encima de todo y todos; el 81% afirma que le gustaría llegar a ser su propio jefe en algún momento de su vida y el 71% valora más la creatividad que el éxito material. Un resultado curioso es que el 68% dice que la apariencia física del hombre es tan importante como la de una mujer, lo que los lleva a convertirse en grandes consumidores de productos de belleza. Para este estudio, es claro que el hombre de hoy “se adapta a los desafíos y lucha por lo que quiere, se encuentra en un estado de búsqueda personal, en un proceso de evolución y cambio”.


Colombianas entre tradición y cambio

60% de la población de mujeres hoy es profesional, y también uno de los principales aportantes a los gastos del hogar (33% en 2012). Este es sin duda uno de los cambios más importantes pues la mujer está aumentando significativamente su contribución a la actividad económica, cambiando su anterior rol de ama de casa, por el de jefe del hogar y comenzando a tomar cada vez con más fuerza decisiones dentro del mismo.

La colombiana ya no quiere parecerse al modelo de hombre que manejaba a la sociedad. Quiere ser ella misma, con un espacio suyo y propio donde logre salir y ser reconocida. “El proceso ha sido duro, hace varios años si la mujer no sale a generar un ingreso, el hogar no logra subsistir, expresa Catalina Bonnet. El insight es “Ya no soy la segunda en el hogar”.

Con esto concuerda Javier Restrepo de Ipsos: “Cada vez más, tanto en Colombia como en el mundo, la mujer quiere afianzar su diferencia con el hombre. Si en los 60 la liberación femenina quería la igualdad, ahora se quiere acabar con la discriminación”.

Pero paradójicamente, el espíritu de ama de casa, aún subsiste, afirman Liliana Baena y María Josefina Sierra de Connecta. “Las mujeres que trabajan quieren ser bien evaluadas; el ama de casa que trabaja no ha entregado la mitad de la responsabilidad, siguen echando sobre sus hombros la carga del hogar, hay muchos sentimientos de culpa cuando al hombre se le asignan labores de colaboración en el hogar”.

Se está desarrollando un segmento nuevo, de parejas jóvenes, que hacen que el modelo familiar tradicional sea ahora muy raro. Dinkers – Double Income No Kids- y parejas sin hijos que cada vez más postergan la paternidad y hacen que más que etapas de transición, se consoliden patrones de estilos de vida. Del mismo modo, agrega Sierra, segmentos como el adulto mayor ganan cada vez más participación en la medida en que la expectativa de vida se alarga y los jubilados tienen ingresos estables y alta capacidad de compra. “La gente de mercadeo en Colombia aún no se ha dado cuenta de lo interesante que es este segmento; hay paradigmas que deben romperse. Incluso la gente mayor cambia de marca” precisa Baena.


El sesgo de la cortesía

Armando Mora, mexicano y CEO de Ipsos en Colombia, tiene una mirada desde afuera alimentada por su experiencia en Colombia.

“El consumidor colombiano es muy dado a asumir el llamado “sesgo de cortesía”. Nos da miedo decir que no, afirma. Ante este problema, la investigación en medios digitales apunta a permitir que las personas expresen más libremente sus opiniones reales, porque se crea una sensación de intimidad y de dominio en la que la expresión sale a flote naturalmente. Es por esto que medios como la televisión se han vuelto más de entretenimiento, ya que los shoppers, usuarios o consumidores buscan y se informan a través de medios digitales.

Liliana Baena, de Connecta, comparte esta observación de Armando Mora. Luego de años de observar y explorar a los colombianos a través de investigaciones de mercados, se ha dado cuenta de la constante presencia de este sesgo: “hay una carga fuertemente cultural, todo lo que se le muestra a un potencial comprador dice “yo lo compraría”, y es así como a toda en encuesta calificamos mínimo con 3 sobre 5 y nunca contemplamos el 1 como calificación”.

Inteligencia colectiva

“Uno de los aspectos que hemos identificado como un detonante para el proceso de compra es la demanda, que está asociada al mismo proceso de compra, pero bien diferenciada. El Shopper está en la búsqueda de razones mucho más elaboradas en el momento de hacer su compra, es mucho más exigente, y hacia allí es hacia donde se mueven las tendencias del mercado hoy en día” señaló Ricardo Gutiérrez de Nielsen.

Estamos buscando canales cercanos a la casa y compramos más que antes. La cercanía es fundamental, el tiempo es más reducido para que el consumidor colombiano pueda hacer sus compras, no queremos hacer filas ni perder tiempo. Los canales reflejan el cambio del comportamiento del shopper colombiano, afirma David Fiss, saliente director comercial de Kantar Worldpanel Colombia.

El colombiano incursiona en el consumo de categorías menos tradicionales, como es el caso del té y los jugos industrializados. Se trata de comprar practicidad, lo mismo que pasa en categorías como aseo y hogar. Según Fiss, sacrificamos el consumo de alimentos para comprar en otras categorías. El último cambio es cultural. Exige que los anunciantes sean claros en la comunicación sobre los beneficios de la marca. Y tienden a identificarse con productos hechos en Colombia. Somos globales pero ante todo colombianos, expresa.

Nos miramos al espejo

Cada vez más, al individuo, las marcas lo están persiguiendo para lograr su atención. Y cada vez más ese individuo está rechazando a la comunicación intrusiva. Es alguien que ahora expresa en voz alta, cuáles son los mensajes que quiere ver y oír, expresa Catalina Bonnet, directora de servicio al cliente de Millward Brown. Mientras tanto, otras marcas que no hacen tanto ruido pero que sí generan voz a voz, logran que sean los consumidores los que las busquen. Las marcas con más ruido suelen ser vistas como más genéricas para los colombianos. Somos más críticos y eso hace parte de nuestra idiosincrasia, ya no mordemos cualquier anzuelo, afirma Bonnet. “No queremos nada complicado”.

Para Bonnet, sin llegar a generalizar, si hay patrones en el consumidor colombiano: Nos gusta recibir comunicación original, mezclada con una parte de humor. Burlarnos de nosotros mismos nos atrae, somos empáticos, personales y abiertos a ver nuestras falencias. Las marcas que logran conectarse con nosotros son las que permiten que el colombiano sea crítico consigo mismo. Nos gusta mostrarnos como vencedores ante la adversidad.

La huella digital del colombiano

El consumidor colombiano tiene unas características particulares importantes. Es un consumidor que busca tener cercanía en los puntos de venta (de ahí la importancia que continúa teniendo la tienda tradicional), y que busca que éstos además mantengan un buen ambiente, es decir, que sean limpios, organizados, y que la tienda tenga una buena presentación.

También es un consumidor que hace desembolsos bajos, y que está muy pendiente de la relación precio vs calidad de los productos que compra. Una variable importante es que también está buscando promociones incluso más allá del precio bajo.

Otro aspecto fundamental, es que el consumidor colombiano espera un buen trato y atención en los canales de venta. A la hora de la decisión de compra, está atento a la opinión de los demás, incluso consultando diferentes canales para informarse, por lo que la decisión de compra en el punto de venta termina siendo un factor clave.


Del mismo modo, hay que decir que cambiamos también la forma de comprar. El que seamos “cazadores de ofertas” es un mito; en los últimos años el consumidor colombiano se muestra como observador de precios y tablas nutricionales, lee etiquetas, es inteligente y es decidido sobre lo que compra porque ante la abundancia de ofertas debe comprar sin arriesgarse mucho ante lo nuevo. Así pues, Javier Restrepo y Armando Mora, de Ipsos, creen que más que “malicia indígena” tenemos una inteligencia de compradores, que tras haber pasado experiencias malas y buenas, aprendimos a reconocer una oferta conveniente respecto a una que no lo es. “Es un mecanismo de defensa, nos cansamos del abuso y ahora tenemos muy en claro los valores, y esos valores los buscamos en las marcas”. Se necesita entonces un entorno responsable, en el que se fomenten las buenas prácticas y los valores, precisa Restrepo. Esta es una misión a la que no deben escapar las empresas de investigación, en su papel como parte del ecosistema de valor del mercado.

lunes, mayo 09, 2016

¿Dónde prefieren hacer sus compras los hogares colombianos? | Perú Retail

¿Dónde prefieren hacer sus compras los hogares colombianos? | Perú Retail



jueves, agosto 20, 2015

América Retail – Confianza del consumidor colombiano cae en julio a su segundo nivel más bajo desde 2009

América Retail – Confianza del consumidor colombiano cae en julio a su segundo nivel más bajo desde 2009



América Retail



Confianza del consumidor colombiano cae en julio a su segundo nivel más bajo desde 2009

20 AGOSTO, 2015 0
Confianza del consumidor colombiano cae en julio a su segundo nivel más bajo desde 2009

La confianza del consumidor en Colombia cayó en julio a su segundo nivel más bajo en sus últimos seis años por un deterioro de las condiciones económicas actuales y de las expectativas, reveló una encuesta de Fedesarrollo.
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) cayó a 2,6% en julio, una contracción de 12,1 puntos porcentuales en comparación con junio y de 24 puntos porcentuales frente al mismo mes del año pasado. El indicador se situó levemente por encima del 2,3% que marcó en marzo, cuando se ubicó en su nivel más bajo desde junio de 2009.
El ICC predice el desempeño del consumo y está conformado por cinco componentes, de los cuales tres versan sobre las expectativas de los hogares a un año y dos sobre la percepción frente a la situación económica actual.
A su vez, el indicador es uno de los principales datos que tiene en cuenta el Banco Central en sus reuniones de política monetaria, que en los últimos 11 meses ha mantenido su tasa de interés de referencia en un 4,5%, un nivel que considera como expansivo. Según la encuesta, la confianza del consumidor cayó en las cinco ciudades que forman parte de la muestra, con mayor intensidad en Bogotá, donde bajó a su menor nivel desde abril de 2009.
“Desagregando los resultados por nivel socioeconómico, se evidencia una caída en todos los estratos, particularmente en el estrato alto”, precisó el informe.
Fuente: La República

lunes, mayo 25, 2015

¿CUÁL ES EL ADN DEL CONSUMIDOR COLOMBIANO?

¿CUÁL ES EL ADN DEL CONSUMIDOR COLOMBIANO?


Logotipo de la Revista PyM


¿CUÁL ES EL ADN DEL CONSUMIDOR COLOMBIANO?



La única constante es el cambio. Este postulado, que por cierto también se aplica a la investigación de mercados, es la gran lección en torno a cómo se constituye el perfil del comprador colombiano actual.
La impronta de nuestros tiempos está marcada por un personaje inteligente, mutante y crítico, que intenta romper el molde y hacerse su propio lugar en el entorno del mercado colombiano. Entender al cambio y a sus protagonistas es la base para satisfacer del mejor modo la demanda en función de la oferta.
Consumidores globalizados pero fuertemente locales. Hombres que difieren del patrón tradicional. Mujeres que buscan reivindicación. Compra inteligente, refugios digitales, conciencia colectiva. Estos son algunos de los rasgos que se muestran como distintivos del colombiano cuando se enfrenta a la compra y la toma de decisión. El reto para la investigación de mercados es entonces, abordar el cambio como una constante y dinamizar las metodologías y herramientas con las que se obtiene la información de los consumidores. 
P&M quiso abordar el tema desde el centro del sistema solar del consumo: El consumidor. Y presentar a quienes se dedican a profundizar en el conocimiento de ese ciudadano que está en evolución, que cambia sus hábitos, sus formas de pensar y sus maneras de relacionarse con las marcas.
ADN DEL CONSUMIDOR COLOMBIANO
Me informo luego existo. Este postulado es hoy una certeza y esa información es buscada en múltiples canales. La demanda actual es impulsada por la clase media, las mujeres y el crecimiento de las redes sociales y el acceso a telefonía móvil afirma Juan Felipe Saavedra, gerente comercial de Nielsen Colombia. La clase media ha hecho que existan muchos más consumidores con dinero disponible para hacer compras. Sin embargo, esto no se ve necesariamente reflejado en el incremento de sus compras “básicas” o que suplen sus necesidades. El consumidor es mucho más racional, analítico y conservador. Y también está aprendiendo a diversificar su gasto en otro tipo de compras como viajes, eventos, etc. También es un consumidor que analiza muy bien las opciones de mercado, y es cada vez más exigente con las marcas.
Aunque continúa siendo un consumidor leal a las marcas, demostrado por altos niveles de market share en varias categorías, el paso a marcas más económicas es recurrente como alternativa de ahorro en los últimos 5 años.
 “No podemos decir que no necesitamos a la tv para llegar a la gente” expresa Catalina Bonnet de Millward Brown. Las empresas no somos nadie sin la opinión de las personas, y eso nos lleva a obtener opiniones de calidad, de manera agradable intentando extraer la información en blogs y lugares donde se comparte información. En redes sociales, los colombianos nos sinceramos”.
FEMINIDAD ES LA NUEVA MASCULINIDAD 
Pulso, un estudio desarrollado por Discovery Insights en Colombia, arrojó resultados al respecto del hombre colombiano actual. Uno de ellos determinó que el 69% de los hombres colombianos piensa que la clave del éxito está en la reinvención. Asimismo, la estadística dice que el 72% de los hombres actuales tienen más libertad que los padres en su época. Por otro lado, la mayoría estuvo de acuerdo en que la corrupción es el factor que más se interpone en la posibilidad de alcanzar el éxito y la felicidad.
Entre otros resultados se encuentra que el 74% de los hombres colombianos opina que lo más importante es ser fiel a sí mismos, por encima de todo y todos; el 81% afirma que le gustaría llegar a ser su propio jefe en algún momento de su vida y el 71% valora más la creatividad que el éxito material. Un resultado curioso es que el 68% dice que la apariencia física del hombre es tan importante como la de una mujer, lo que los lleva a convertirse en grandes consumidores de productos de belleza. Para este estudio, es claro que el hombre de hoy “se adapta a los desafíos y lucha por lo que quiere, se encuentra en un estado de búsqueda personal, en un proceso de evolución y cambio”.
COLOMBIANAS ENTRE LA TRADICIÓN Y EL CAMBIO
60% de la población de mujeres hoy es profesional, y también uno de los principales aportantes a los gastos del hogar (33% en 2012).  Este es sin duda uno de los cambios más importantes pues la mujer está aumentando significativamente su contribución a la actividad económica, cambiando su anterior rol de ama de casa, por el de jefe del hogar y comenzando a tomar cada vez con más fuerza decisiones dentro del mismo.
La colombiana ya no quiere parecerse al modelo de hombre que manejaba a la sociedad. Quiere ser ella misma, con un espacio suyo y propio donde logre salir y ser reconocida. “El proceso ha sido duro, hace varios años si la mujer no sale a generar un ingreso, el hogar no logra subsistir, expresa Catalina Bonnet. El insight es “Ya no soy la segunda en el hogar”.
Con esto concuerda Javier Restrepo de Ipsos: “Cada vez más, tanto en Colombia como en el mundo, la mujer quiere afianzar su diferencia con el hombre. Si en los 60 la liberación femenina quería la igualdad, ahora se quiere acabar con la discriminación”.
Pero paradójicamente, el espíritu de ama de casa, aún subsiste, afirman Liliana Baena y María Josefina Sierra de Connecta. “Las mujeres que trabajan quieren ser bien evaluadas; el ama de casa que trabaja no ha entregado la mitad de la responsabilidad, siguen echando sobre sus hombros la carga del hogar, hay muchos sentimientos de culpa cuando al hombre se le asignan labores de colaboración en el hogar”.
Se está desarrollando un segmento nuevo, de parejas jóvenes, que hacen que el modelo familiar tradicional sea ahora muy raro. Dinkers – Double Income No Kids- y parejas sin hijos que cada vez más postergan la paternidad y hacen que más que etapas de transición, se consoliden patrones de estilos de vida. Del mismo modo, agrega Sierra, segmentos como el adulto mayor ganan cada vez más participación en la medida en que la expectativa de vida se alarga y los jubilados tienen ingresos estables y alta capacidad de compra. “La gente de mercadeo en Colombia aún no se ha dado cuenta de lo interesante que es este segmento; hay paradigmas que deben romperse. Incluso la gente mayor cambia de marca” precisa Baena.
EL SESGO DE CORTESÍA
Armando Mora, mexicano y CEO de Ipsos en Colombia, tiene una mirada desde afuera alimentada por su experiencia en Colombia.
“El colombiano es muy dado a asumir el llamado “sesgo de cortesía”. Nos da miedo decir que no, afirma. Ante este problema, la investigación en medios digitales apunta a permitir que las personas expresen más libremente sus opiniones reales, porque se crea una sensación de intimidad y de dominio en la que la expresión sale a flote naturalmente. Es por esto que medios como la televisión se han vuelto más de entretenimiento, ya que los shoppers, usuarios o consumidores buscan y se informan a través de medios digitales.
Liliana Baena, de Connecta, comparte esta observación de Armando Mora. Luego de años de observar y explorar a los colombianos a través de investigaciones de mercados, se ha dado cuenta de la constante presencia de este sesgo: “hay una carga fuertemente cultural, todo lo que se le muestra a un potencial comprador dice “yo lo compraría”, y es así como a toda en encuesta calificamos mínimo con 3 sobre 5 y nunca contemplamos el 1 como calificación”.
INTELIGENCIA COLECTIVA
“Uno de los aspectos que hemos identificado como un detonante para el proceso de compra es la demanda, que está asociada al mismo proceso de compra, pero bien diferenciada. El Shopper está en la búsqueda de razones mucho más elaboradas en el momento de hacer su compra, es mucho más exigente, y hacia allí es hacia donde se mueven las tendencias del mercado hoy en día” señaló Ricardo Gutiérrez de Nielsen.
Estamos buscando canales cercanos a la casa y compramos más que antes. La cercanía es fundamental, el tiempo es más reducido para que el colombiano pueda hacer sus compras, no queremos hacer filas ni perder tiempo. Los canales reflejan el cambio del comportamiento del shopper colombiano, afirma David Fiss, saliente director comercial de Kantar Worldpanel Colombia.
El colombiano incursiona en el consumo de categorías menos tradicionales, como es el caso del té y los jugos industrializados. Se trata de comprar practicidad, lo mismo que pasa en categorías como aseo y hogar. Según Fiss, sacrificamos el consumo de alimentos para comprar en otras categorías. El último cambio es cultural. Exige que los anunciantes sean claros en la comunicación sobre los beneficios de la marca. Y tienden a identificarse con productos hechos en Colombia. Somos globales pero ante todo colombianos, expresa.
NOS MIRAMOS AL ESPEJO
Cada vez más, al individuo, las marcas lo están persiguiendo para lograr su atención. Y cada vez más ese individuo está rechazando a la comunicación intrusiva. Es alguien que ahora expresa en voz alta, cuáles son los mensajes que quiere ver y oír, expresa Catalina Bonnet, directora de servicio al cliente de Millward Brown. Mientras tanto, otras marcas que no hacen tanto ruido pero que sí generan voz a voz, logran que sean los consumidores los que las busquen. Las marcas con más ruido suelen ser vistas como más genéricas para los colombianos. Somos más críticos y eso hace parte de nuestra idiosincrasia, ya no mordemos cualquier anzuelo, afirma Bonnet. “No queremos nada complicado”.
Para Bonnet, sin llegar a generalizar, si hay patrones en los colombianos: Nos gusta recibir comunicación original, mezclada con una parte de humor. Burlarnos de nosotros mismos nos atrae, somos empáticos, personales y abiertos a ver nuestras falencias. Las marcas que logran conectarse con nosotros son las que permiten que el colombiano sea crítico consigo mismo. Nos gusta mostrarnos como vencedores ante la adversidad.
LA HUELLA DIGITAL DEL COLOMBIANO
El consumidor colombiano tiene unas características particulares importantes. Es un consumidor que busca tener cercanía en los puntos de venta (de ahí la importancia que continúa teniendo la tienda tradicional), y que busca que éstos además mantengan un buen ambiente, es decir, que sean limpios, organizados, y que la tienda tenga una buena presentación.
También es un consumidor que hace desembolsos bajos, y que está muy pendiente de la relación precio vs calidad de los productos que compra. Una variable importante es que también está buscando promociones incluso más allá del precio bajo.
Otro aspecto fundamental, es que es un consumidor que espera un buen trato y atención en los canales de venta.  A la hora de la decisión de compra, está atento a la opinión de los demás, incluso consultando diferentes canales para informarse, por lo que la decisión de compra en el punto de venta termina siendo un factor clave.
Del mismo modo, hay que decir que cambiamos también la forma de comprar. El que seamos “cazadores de ofertas” es un mito; en los últimos años el colombiano se muestra como observador de precios y tablas nutricionales, lee etiquetas, es inteligente y es decidido sobre lo que compra porque ante la abundancia de ofertas debe comprar sin arriesgarse mucho ante lo nuevo. Así pues, Javier Restrepo y Armando Mora, de Ipsos, creen que más que “malicia indígena” tenemos una inteligencia de compradores, que tras haber pasado experiencias malas y buenas, aprendimos a reconocer una oferta conveniente respecto a una que no lo es. “Es un mecanismo de defensa, nos cansamos del abuso y ahora tenemos muy en claro los valores, y esos valores los buscamos en las marcas”. Se necesita entonces un entorno responsable, en el que se fomenten las buenas prácticas y los valores, precisa Restrepo.  Esta es una misión a la que no deben escapar las empresas de investigación, en su papel como parte del ecosistema de valor del mercado.
CONTENIDO EXCLUSIVO REVISTA P&M  ©

domingo, enero 06, 2013

Video, la tendencia del consumidor de la próxima década


Con el salto en el número de tabletas, teléfonos inteligentes y demás dispositivos que se espera tras la Navidad, un estudio de Bell Labs, la división de investigación de Alcatel-Lucent, sugiere que el aumento del consumo de contenidos de vídeo en dichos dispositivos pondrá al límite durante la próxima década a las redes fijas de banda ancha que transportan este tráfico.
Las proyecciones de Bell Labs sugieren que para 2020 los consumidores de Estados Unidos verán en promedio siete horas de vídeo al día - en lugar de las actuales 4,8 - y que cada vez más este vídeo será visto en tabletas, tanto en el hogar como en los desplazamientos. Además muestra un gran cambio en los hábitos de visionado, ya que los consumidores irán pasando de los actuales contenidos de difusión de vídeo a servicios de vídeo bajo demanda, que crecerán hasta alcanzar un 70% del consumo diario en lugar del actual 33%.
Las proyecciones también sugieren un aumento de 12 veces en el volumen de contenidos de vídeo en internet a medida que los servicios en la nube, los nuevos sitios y las aplicaciones de redes sociales van basándose cada vez más en vídeo, accesible de modo continuo en cualquier lugar y en cualquier momento a través de las tabletas.
El estudio pone también de manifiesto cómo estas tendencias agotarán las capacidades de las redes de banda ancha residenciales utilizadas por muchos de los proveedores de servicio: a medida que la entrega de contenidos de vídeo vaya pasando de la teledifusión tradicional a la entrega “unicast” de contenidos personalizados, irá también aumentando la presión puesta en la “frontera IP” de estas redes. La frontera IP (Internet Protocol) es la parte de la red que necesita más inteligencia para poder suministrar sofisticados servicios de vídeo e internet de alta velocidad. La difusión (broadcast) es un modo mucho más eficiente de suministrar servicios de vídeo, por lo que la transición hacia unicast creará enormes demandas de ancho de banda en las redes.
El suministro de vídeo desde la nube y desde redes de distribución de contenidos a las tabletas, televisiones y teléfonos inteligentes - con una calidad garantizada - supone una apasionante oportunidad de conseguir nuevos ingresos por parte de los proveedores de servicios de comunicaciones, pero esto sólo será posible si están preparados. Si no se gestiona adecuadamente, el rápido crecimiento en el tráfico de vídeo puede transformarse en un auténtico desastre. Es importante ver dónde tendrán más impacto las inversiones de los proveedores de servicios, y esta investigación revela claramente que la frontera de las redes IP tanto fijas como móviles - que cada vez más se están volviendo una misma cosa - ofrece la mayor oportunidad para mejorar las prestaciones de la red. Al mismo tiempo, es también la mayor fuente de riesgo si no se gestiona apropiadamente.
Bell Labs han descubierto que los servicios de vídeo bajo demanda, como por ejemplo servicios premium de películas de alta definición, serán cada vez más populares durante los próximos cinco años. El resultado es que el vídeo bajo demanda supondrá una buena parte de las horas que se pasa delante de una pantalla, y causará que en la hora punta el tráfico en la frontera de las nuevas redes basadas en IP crezca 2,5 veces más rápido que la cantidad de tráfico existente en las conexiones de banda ancha que llegan a los hogares. Este reto deberá ser abordado en su totalidad si los proveedores de servicios de comunicaciones quieren mantener su capacidad para suministrar a los consumidores servicios multimedia residenciales de alta calidad.
El consumo multitarea beneficia al video
El tiempo total dedicado a ver vídeo pasará de 4,8 horas a 7 horas por usuario, por día, en la próxima década según el estudio de Bell Labs. La mayoría de esta contribución procederá de consumidores de última generación más proclives a ver televisión mientras hacen una vídeo llamada en su tableta, lo cual resultará en un equivalente de siete horas de vídeo consumidas en un período de cinco horas.


IGNACIO GOMEZ ESCOBAR igomeze@gmail.com skype: igomeze (+57) 3014152370

martes, diciembre 11, 2012

El 73% de consumidores gastarán más en 2012, pese a la crisis


Bogotá_
De acuerdo con la encuesta anual realizada por Deloitte sobre las intenciones y expectativas de los consumidores de América Latina para fin de año, a pesar de que la situación económica mundial no es la más favorable en estos momentos, el 73% de los consumidores tiene proyectado gastar durante esta navidad una cantidad similar o superior a la desembolsada durante la misma celebración en el 2011.
El estudio, en el que participaron un total de 3.000 personas pertenecientes a cinco países latinoaméricanos: Colombia, Brasil, Chile, Argentina y México, reveló que el 61% de los encuestados piensa que la situación económica de sus respectivas familias hoy es igual o ligeramente mejor que la experimentada el año pasado, por lo que no se sienten cohibidos de gastos para esta fecha. Colombia, con un 24% es el país con mayor porcentaje de familias que consideran estar hoy mejor que el año previo.
Los resultados también revelaron que los regalos, las celebraciones y el vestuario, constituyen las principales prioridades de los consumidores para las festividades navideñas. De hecho, el 37% de los consumidores señaló que utilizará sus primas y bonificaciones de fin de año para realizar sus compras navideñas, adquiriendo un promedio de cinco regalos de aproximadamente US$35 cada uno, lo que equivale a cerca de $62.700. Sin embargo, pese a que la tendencia durante esta temporada es gastar, el 36% de los encuestados dijo que usará estos ingresos para pagar las deudas, mientras que el 28% los ahorrará.
Por otro lado, la encuesta mostró que los consumidores de la región tienen planeado aumentar sus gastos en viajes durante estas vacaciones. De acuerdo con el especialista en marcas, Ricardo Gaitán, esta tendencia se debe a que en este momento la competencia de las aerolíneas están marcando la pauta, razón por la que en el mercado pueden encontrarse tiquetes aéreos a costos muy bajos, pero sobretodo paquetes vacacionales que llaman la atención del consumidor colombiano.
Otro de los datos que llama la atención del informe, es que el 70% de los consumidores afirma que pagará la mayoría de sus compras en efectivo, mientras que un solo un 42% con tarjeta débito, y un 36% con tarjeta de crédito.
El consumidor colombiano
En cuanto a las cifras de consumo en el país, se determinó que el 94% de los consumidores colombianos invierte en vestuario principalmente durante sus compras navideñas. Después, se encuentran entre sus prioridades los regalos, los viajes, la cena y las celebraciones navideñas.
Además, se mostró que el 31% de los colombianos ha empezado a comprar más, mientras que el 20% está dejando de hacerlo, y un 18% hace compras por las páginas web. Finalmente, el estudio reveló que Colombia es el país en el que la gente hace más compra tiendas mayoristas y de descuento, con un 41%. El segundo lugar lo tiene Chile, con un 29%, seguido por Brasil, México y Argentina.
Plataformas web para hacer sus compras
Según el informe, el 61% de los consumidores Latinoamérica adquirirá en esta navidad algún producto en línea. Los sitios virtuales estilo “Groupon” son los más populares y el 33% de los consumidores utilizará dispositivos móviles o tabletas para tener acceso a ellos.
Invertir en aparatos tecnológicos
Para este fin de año, los gastos en aparatos tecnológicos serán más frecuentes. El 21% de los encuestados comprará dispositivos electrónicos portátiles como tabletas y teléfonos inteligentes. Además, al 33% de ellos les gustaría recibir alguno de estos productos de última tecnología.
Más efectivo y menos tarjetas de crédito
Al parecer para estas vacaciones, algo que tienen claro los consumidores es que no van a endeudarse. Por esta razón, el 70% de ellos prefiere hacer las compras navideñas en efectivo, mientras que el 36% afirma que las hará por medio de su tarjeta de crédito.
Aprovechar ofertas y promociones
En el estudio se reveló que para estos primeros días de diciembre los consumidores tienen pensado hacer sus compras navideñas, y tienen contemplado adquirir los regalos más costosos para sus hijos, sin embargo, pensando en el ahorro, no descartan las promociones que ofrecen los centros comerciales.
Más responsables antes de comprar
Otro dato interesante que se reveló sobre el perfil del consumidor latinoamericano, es que estos están planificando más cuidadosamente sus gastos de fin de año y son más cautelosos acerca de su capacidad de endeudamiento a futuro. Adicionalmente, las cifras revelan que el 50% de los consumidores latinoamericanos planea investigar más a fondo, antes de realizar las compras de sus regalos navideños. Las prendas de vestir serán los artículos más deseados por los consumidores de la región con un 47%, y los más comprados con un 79%. Seguidamente estarán los dispositivos electrónicos portátiles con un 33% y los cosméticos y perfumes con un 39%.
Las opiniones
Ricardo Gaitán
Especialista en marcas

“Durante esta época navideña no existe el ahorro en los hogares. La tendencia es que todos gasten de acuerdo a las necesidades que tenga cada uno”.
Camilo Herrera
Presidente de Raddar

“Al pensar en viajes no se pueden descartar los paquetes vacacionales, que ya están planeados previamente, razón por la cual se corren menos riesgos que en los viajes improvisados”.
Según el informe, el 61% de los consumidores Latinoamérica adquirirá en esta navidad algún producto en línea. Los sitios virtuales estilo “Groupon” son los más populares y el 33% de los consumidores utilizará dispositivos móviles o tabletas para tener acceso a ellos.
JOHANNA CELEDÓN OÑATE



IGNACIO GOMEZ ESCOBAR igomeze@gmail.com skype: igomeze (+57) 3014152370