Mostrando las entradas con la etiqueta redes sociales. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta redes sociales. Mostrar todas las entradas

miércoles, enero 25, 2017

Comunidades de marca: ¿La solución al desgaste de las Redes Sociales tradicionales?

Comunidades de marca: ¿La solución al desgaste de las Redes Sociales tradicionales?




La solución: ¿redes sociales propias?

Comunidades de marca: ¿La solución al desgaste de las Redes Sociales tradicionales?


Cada día son más las compañías que deciden probar suerte en este territorio y lanzar su propia comunidad de marca fuera del alcance de las redes sociales tradicionales
Publicado por Redacción en Redes Sociales hace 1 días
Temas Marketingcomunidades De Marcaredes Socialesestrategia





Cuando aparecieron las redes sociales, estas se convirtieron rápidamente en uno de los elementos favoritos de las marcas, que las vieron como uno de los elementos con mayor potencial de los últimos tiempos. Este interés de las marcas por las redes sociales tenía muchas explicaciones. En un primer momento, era absolutamente cierto aquello que señalaba que las marcas podían conseguir grandes cosas sin más coste que el de la gestión de sus perfiles en las redes sociales. Abrirse un perfil en Facebook o en Twitter no costaba dinero (solo el tener a un profesional dotándolo de contenido) y, sin embargo, permitía lograr grandes réditos. Las actualizaciones de las marcas tenían gran éxito y las compañías lograban rápidamente conectar con los consumidores y posicionarse ante ellos. Por otro lado, las redes sociales eran algo nuevo, algo que los consumidores buscaban con entusiasmo y algo en donde había que estar haciendo cosas para conectar con los potenciales clientes y ofrecerles lo que ellos esperaban.

Las cosas han ido cambiando desde ese principio luminoso y altamente optimista. Las marcas ya no están en la misma situación que estaban entonces, porque el entorno de las redes sociales ha cambiado por completo. Por un lado, las redes sociales han descubierto el filón que suponen las marcas y, de una manera o de otra, han ido entrando en su relación con los consumidores. Los cambios de algoritmo han ido poniendo cada vez más difícil llegar al feed de noticias (las redes sociales explican que lo hacen para que los consumidores reciban el contenido realmente relevante que quieren recibir) y las marcas ya no tienen esa comunicación tan directa con los consumidores. Si quieren estar ahí, tendrán que pasar, además, por el peaje que supone el post patrocinado.

De forma paralela a ello, las marcas son cada vez menos optimistas en lo que a resultados se refiere. Cada vez están más convencidas de que medir el ROI de las redes sociales es más y más difícil, que en realidad hay que estar ahí porque es lo que impone el mercado pero que los resultados que se consiguen no son tan maravillosos como se pensaba (o como se podía imaginar viendo lo que ocurría en el primer momento) y que el entorno es más cuestionable. Las marcas han, de hecho, empezado a dejar de fiarse de Facebook. Las últimas acciones de la firma, que ha tenido que reconocer en varias ocasiones haber ofrecido datos erróneos a las marcas, han hecho que estas sean cada vez más críticas con la red social y con sus resultados.

A todo esto, se suma que las marcas están cada vez más hartas que los datos que generan con su actividad en redes sociales (y que son uno de los elementos que más buscan y más necesitan) acaben en manos de las firmas que controlan esas redes sociales y no en las suyas propias. Quienes controlan lo que se sabe de los seguidores de sus perfiles son las redes sociales, no ellas.

Y, encima de todo esto, se puede añadir que cada vez la actividad en redes sociales de los consumidores es mucho menos entusiasta. Es lógico: cuando algo alcanza la madurez y cuando se va avanzando hacia un escenario mucho menos novedoso y mucho más normalizado, el frenesí de los primeros tiempos pasa y la actividad se va enfriando. No hay más que mirar lo que ocurre con los regalos de Reyes de los niños para comprender esta situación. Los niños reciben sus regalos el día 6 de enero con muchísimo entusiasmo y prometen jugar con ellos para siempre y todos los días. Una semana más tarde, ya han vuelto a su juego favorito que ya tenían.
La solución: ¿redes sociales propias?

En este entorno, por tanto, no resulta tan sorprendente descubrir que las marcas están intentando encontrar una solución alternativa. Si sus consumidores son menos reactivos en los perfiles de las redes sociales 'mainstream', si ahí resulta más difícil conectar con ellos y si ahí son esclavas de las decisiones de otras, ¿por qué no crear sus propias redes sociales y sus propios entornos?

Las comunidades de marca son cada vez más recurrentes y cada vez más habituales. Cada día son más las compañías que deciden probar suerte en este territorio y lanzar su propio escenario. Además, las compañías ven un elevado y positivo impacto tanto en los ingresos (así lo cree un 86% de los marketeros) como en el proceso de compra (un 85%). Un estudio señalaba que por cada dólar invertido en una comunidad de marca se recibe un retorno del 20%.

Para las marcas, los beneficios de estas comunidades de marca son claros.

Por un lado, son ellas quienes controlan lo que ocurre y lo que se hace. Ellas marcas sobre qué quieren que se hable en sus comunidades y para qué quieren que se use. Por otro lado, todo lo que ocurre en ellas se queda en la marca. Es decir, los datos que estas generan y los beneficios que aportan no van a parar a manos de un tercero que hará con esa información lo que quiera, sino que se queda dentro de la propia marca que la ha puesto en marca. Y, finalmente, las marcas no son esclavas de los cambios: su actividad y sus resultados no se verán afectados porque un tercero decida cambiar de pronto las reglas del juego.

Las marcas lanzan estas redes para, según los datos de los estudios sobre la materia, aumentar la retención y la satisfacción de cliente, poder recoger ideas para nuevos productos y servicios y para reducir los costes de soporte.
Contenido, no spam

Las redes sociales de marca crean además comunidad. Los participantes en las mismas son personas con el mismo interés, interés muy ligado con la marca, y que quieren conectar con más personas como ellos. Haciéndolo se sentirán mucho más próximos de la marca y de sus productos.

No hay más que ver algunos ejemplos de comunidades de marca. Lego cuenta con una, Lego Ideas, que está formada por entusiastas de sus juegos. En ella, los consumidores no solo pueden compartir lo que hacen con los Legos sino que también pueden ofrecer ideas para crear nuevos productos (que llegan en ocasiones a las tiendas). Otra compañía que tiene una comunidad de usuarios es PlayStation con Playstation Community, en la que en diferentes canales se puede hablar de los juegos y recibir recompensas.

No solo el mundo de los juegos puede dar para una comunidad. Sephora tiene una para hablar de productos de belleza y consejos, BeautyTalk, y Harley una para los dueños de sus motos, Harley Owners Group, que además funciona con cierto elemento de exclusividad.

Lo que tienen en común estas comunidades y lo que se puede aprender de ellas es que todas ellas apuestan por el contenido y por la actividad creadora de los consumidores, pero que ninguna de ellas es simplemente propaganda de la firma. Uno de los principales errores que pueden cometer las marcas en este terreno es confundir comunidad de marca con escenario para servir todo el spam que uno quiere. Con ello, solo lograrán acabar con el poder de la misma.



IIMN - Masters, postgrados, diplomados, cursos en MARKETING DIGITAL
Con acreditación Universitaria, Presencial y Online. España y Latinoamérica - solicita más info.

viernes, noviembre 18, 2016

Las tendencias que marcarán las decisiones de las marcas en redes sociales en 2017

Las tendencias que marcarán las decisiones de las marcas en redes sociales en 2017




El vídeo va a llegar a su punto culminante

Las tendencias que marcarán las decisiones de las marcas en redes sociales en 2017



Las redes sociales pueden servir para muchas cosas, pero muchas empresas y marcas siguen sin tener muy claro cómo usarlas para ello
Publicado por Redacción en Redes Sociales hace 1 días
Temas Marketingredes Socialestendencias2017




Las redes sociales se han convertido en una parte muy importante en la estrategia digital de las empresas. Las marcas emplean los diferentes escenarios sociales para intentar posicionar a sus productos, sus servicios y su identidad corporativa Las compañías dedican esfuerzo, talento y presupuesto a este escenario, lo que hace que lo que ocurra en las redes sociales se convierta en un elemento crucial, algo básico que hay que tener en cuenta a la hora de pensar hacia dónde va la marca y cómo conectará con las audiencias.

¿Qué se debe esperar de las redes sociales en 2017 y qué harán las marcas durante ese año? Según un estudio de Buffer, ciertas tendencias dominarán las decisiones corporativas con respecto a las redes sociales y su peso en la estrategia.
El vídeo va a llegar a su punto culminante

El vídeo es uno de los elementos que aparece de forma recurrente en los artículos y análisis de lo que se viene encima y en los que analizan qué es lo que ha dado de sí, por el momento, el mercado online. El vídeo es, además, una de las cuestiones que se ha ido colando en los últimos años en todas las previsiones de lo que va a cambiar o dominar durante el año entrante. ¿Qué ocurrirá durante 2017? Según las previsiones de Buffer, el vídeo está a punto de alcanzar su punto cumbre, por lo que las marcas tienen que entrar ya en este escenario. Está a punto de cruzar ese momento en el que o te subes ya al tren o lo pierdes.

Según sus datos, el 83% de los marketeros asegura que le gustaría crear más contenido de vídeo si no estuviesen tan limitados como están ahora por el tiempo y los recursos. A esto se suma que un 30% de marketeros quieren dedicar más tiempos y esfuerzos al vídeo en Facebook durante 2017 y que un 28% quiere añadir o ampliar el peso de YouTube.

De todos estos datos se puede sacar una interesante conclusión. Los responsables de las marcas quieren crear más vídeos y quieren dar más peso al vídeo en sus estrategias, pero a pesar de ello no pueden hacerlo. Quieren hacerlo, pero las circunstancias les superan. Si todo fuese más sencillo o barato, estarían mucho más centrados en el vídeo. Pero esperar a que sea más barato puede acabar saliendo más caro, porque ahora es cuando empiezan a entrar en masa las marcas en el vídeo y por tanto harán que en el futuro próximo sea más difícil destacar y las marcas tengan que apoyar su alcance orgánico con un alcance de pago.
Facebook no ha muerto (a pesar de todo)

Una de las cuestiones que han quedado claras en los últimos tiempos es que la posición de Facebook para las marcas es bastante más difícil de lo que lo era en el pasado. Tener un impacto de forma orgánica en la red social es mucho más difícil de lo que lo era, lo que ha llevado a las marcas a replantearse sus posiciones y a tener que comprender de un modo diferente las redes sociales. Sin embargo, y a pesar de todo esto, las marcas no han dejado de emplear Facebook y no han dejado de usar la red social como plataforma para conectar con los consumidores.

Un 93% de los marketeros asegura que emplea Facebook para su negocio y un 91% está usando los anuncios de Facebook. Incluso, a pesar de cómo ha cambiado el peso de Facebook y cómo eso ha afectado a las operaciones de las marcas en el mismo, las compañías siguen dando una importancia muy elevada a la red social. Un 72% de los encuestados asegura que sigue usando Facebook igual o incluso un poco más durante los últimos doce meses.

Ese porcentaje de los marketeros que asegura usar Facebook supera ampliamente al uso que tienen otras redes sociales. El 88% emplea Twitter, un 65% LinkedIn, un 63% Instagram y un 56% YouTube para hacer llegar el mensaje de la marca.
Google + ha muerto y hay que aceptarlo

Google + es la historia de un fracaso en lo que a redes sociales se refiere. Google no consiguió asentar a su propuesta social y, por tanto, las marcas, que en un primer momento estaban como locas por entrar en ese escenario, están ya empezando a directamente olvidar y dejar esta herramienta. Google + ha dejado de ser relevante. Como concluyen en el estudio, las marcas están empezando a abandonar Google +. Durante 2017, el 27% de los encuestados asegura que usará menos esta red social. Bastante cerca se posiciona Twitter. Un 23% reconoce que empleará menos esa red social en sus estrategias.
Las marcas siguen sin emplean las redes sociales para ofrecer atención al cliente

A pesar de que los consumidores están muy interesados en conectar con las marcas a través de las redes sociales y a pesar de que esperan que las compañías les ofrezcan información y soluciones a sus problemas a través de las mismas, las compañías no están realmente empleando este escenario para ofrecer atención al cliente. A pesar de todo, solo 1 de cada 5 encuestados asegura emplear las redes sociales para ofrecer atención al cliente.
Las marcas buscan el reconocimiento de marca

¿Qué es lo que empuja a las marcas a las redes sociales? Según los datos del estudio, el objetivo principal es conseguir un mayor reconocimiento de marca. Quieren que los consumidores conozcan mejor a la compañía y que esta les suene más. Para eso emplean sus perfiles en las distintas redes sociales. Un 85% de los encuestados asegura que las redes sociales son herramientas para lograr un mayor reconocimiento de marca, mientras que un 71% apuesta por lograr un mayor engagement con la comunidad, un 61% por usarlas para distribuir contenido y un 54% para generar leads y ventas.

Al fin y al cabo, otros objetivos tienen aún ciertos elementos problemáticos, ya que las marcas aún no saben cómo conseguir ciertos efectos. Las redes sociales pueden servir para muchas cosas, pero las marcas aún no tienen muy claro cómo usarlas para ello. Un 58% asegura que el principal reto al que se enfrentan en el uso de las redes sociales es el de usarlas para dirigir el tráfico a su site, un 49% ve como un reto el generar leeds, un 42% el definir tanto el ROI que se consigue como el cómo medirlo y un 41% el encontrar el tiempo suficiente para dedicarlo a las redes sociales.
El de poder de la mensajería y de los nuevos chats

Aunque en el estudio de Buffer no han abordado este tema y no han analizado por tanto en la encuesta cómo las apps de mensajería y las nuevas herramientas de chat impactarán en la estrategia de las marcas en redes sociales, no debe dejarse de lado esta cuestión. Durante 2016 se han producido cada vez más adelantos y se ha asentado de forma cada vez más firme la presencia de las marcas en estos escenarios, creando nuevos formatos que hacen que sean más atractivos (por ejemplo, Facebook acaba de abrir Messenger a la publicidad).

Las marcas se interesarán cada vez más por estas herramientas y entrarán cada vez más en esos escenarios. A medida que la inteligencia artificial se vaya desarrollando y se vaya afinando, las marcas tendrán soluciones mucho más efectivas para conectar con los consumidores de un modo mucho más simple, sencillo y económico, lo que hará que estas herramientas se conviertan aún en más populares.
El crecimiento de las comunidades de marca

Otro punto a tener en cuenta y sobre el que pararse a hacer un análisis más profundo, otro de esos puntos a añadir a las conclusiones del estudio, es el potencial que tienen de cara al futuro las redes sociales de marca. Es decir, ¿qué papel jugarán en la estrategia de las marcas ya no solo las redes sociales de terceros en las que la marca está presente con sus propios perfiles sino también las redes sociales y comunidades que ella misma crea? La creación de escenarios propios no es nueva y de hecho algunas marcas les han sacado poderosos réditos en los últimos tiempos y se han convertido en ejemplos de lo mucho que se puede extraer de ellas. Uno de los tradicionales casos que se han convertido en referentes es Starbucks, que creó en su momento una comunidad en la que se podían lanzar propuestas de mejora para la tienda y sus productos.

Pero aunque estas herramientas no son nuevas, si es probable que el contexto haya hecho que sean ahora mucho más atractivas y tengan mucho más potencial. Las marcas han empezado a darse cuenta de que, depender de un tercero a la hora de establecer una estrategia en redes sociales, los pone en una situación de desventaja, ya que hace que dependan demasiado de las decisiones de otros. Cada vez que la red social de turno cambia las reglas del juego, quienes salen perjudicados son ellos. Por otro lado, los estudios han demostrado que el retorno que generan estas redes sociales propias es muy elevado, lo que las convierte en muy atractivas.
El móvil será el modo de acceso cada vez más recurrente

Y, a todos estos puntos, se debe sumar, finalmente, un elemento que funcionará como pegamento para todos ellos y que tendrá un impacto directo sobre todos ellos y sobre muchas más cosas más allá del marketing en redes sociales. Los consumidores están empleando cada vez más sus dispositivos móviles para acceder a prácticamente todo y esto también modificará por completo cómo se comportarán en el universo de lo social y cómo tendrán que actuar las marcas en estos espacios.



Prepara tu marca para la generación Z
En Selligent te explicamos como prepararte para la Generación Z con nuestra herramienta de automation marketing

martes, septiembre 27, 2016

Por qué el boca a boca sigue siendo un fenómeno vital para el marketing

Por qué el boca a boca sigue siendo un fenómeno vital para el marketing





Internet ha hecho que el marketing de boca a boca tenga una nueva vida

Por qué el "boca a boca" sigue siendo un fenómeno vital para el marketing


Las recomendaciones, sucedan donde sucedan, tienen un elevado valor para las marcas.
Publicado por Redacción en Marketing hace 21 horas
Temas Marketingboca A Bocaredes Sociales




460 Shares

Puede parecer, a medida que ciertos elementos de última generación se van asentando en la estrategia de marketing de las empresas, que los métodos más tradicionales están llamados a desaparecer y que han dejado de perder efectividad. Sin embargo, verlo así y eliminar de un plumazo todo aquello que simplemente suene a antiguo no es lo más adecuado y no es tampoco lo más inteligente.

Porque, ciertamente, los nuevos formatos y los nuevos métodos han creado una nueva realidad y han hecho que las marcas tengan un nuevo elemento que juega en su favor y que ayuda a conectar con los consumidores, pero los viejos métodos no han muerto por completo y no han dejado de ser efectivos. Lo que las marcas tienen que aprender a hacer es comprender que ahora juegan de un modo distinto, que ahora tienen que usarlos de una forma diferente para volver a conectar con los consumidores a través de ellos.

Y uno de esos métodos tradicionales que no han dejado por completo de ser efectivos es el marketing de boca a boca, el hacer que sean los consumidores los que hablen de los productos y los que pregonen sus beneficios, haciendo que las ventajas de los mismos lleguen a los demás consumidores con el sello de garantía de los otros. El método es muy efectivo y tiene mucho potencial, ya que hace que las recomendaciones se vean como mucho más seguras y fiables, como mucho menos publicidad o spam de la marca.

Lo cierto es que este método de marketing no solo no ha muerto con la irrupción de los nuevos formatos publicitarios y con la incorporación de nuevas herramientas al panorama de marketing, sino que, además, ha encontrado una especie de nueva realidad y de nueva existencia.

Internet ha hecho que el marketing de boca a boca o "Boca a oreja" tenga una nueva vida y que haya logrado conectar con los consumidores en nuevos escenarios. Las redes sociales e internet no son más que una prolongación de este tipo de contenidos y los tuits o las actualizaciones en Facebook en las que hablamos de tal o tal producto y comentamos sus bondades y beneficios no son, al final, más que la versión 2.0 del formato tradicional.
Boca a boca o "Boca a oreja" en la era de las redes sociales

El formato es además especialmente valioso para las marcas. "El valor del boca en boca es que es gratis", explica Jonah Berger, profesor de marketing en la Wharton School de la University of Pennsylvania, a eMarketer. "Si la gente comparte tu contenido, no te cuesta nada, aunque tienes que lograr que lo compartan", recuerda, apuntando que las marcas tienen un "montón de trucos y consejos para hacerlo".

De hecho, apunta, en el mundo en el que se mueven ahora las marcas, estas ya dan por hecho cuando hablan de marketing de boca a boca que sucederá en Facebook, Twitter o los blogs. "En realidad, solo entre el 7 y el 10% del marketing de boca en boca sucede online. La mayor parte del boca a boca es en realidad offline", puntualiza.

Las recomendaciones, sucedan donde sucedan, tienen un elevado valor para las marcas. Según una encuesta de la Word of Mouth Marketing Association (WOMMA) en colaboración con la American Marketing Association (AMA), el 64% de los responsables de marketing cree que las recomendaciones recibidas por esta vía son mucho más efectivas que las que se transmiten por marketing tradicional.

Un estudio de Nielsen, que preguntaba en este caso a los consumidores, les da la razón: el 84% de los consumidores se fía más de las recomendaciones de alguien que conoce que las que recibe de una marca o una fuente cualquiera.

martes, septiembre 06, 2016

Cómo los medios y redes sociales impactan en las compras impulsivas

Cómo los medios y redes sociales impactan en las compras impulsivas






Las redes sociales funcionan como un elemento referenciador para el consumo

Cómo los medios y redes sociales impactan en las compras impulsivas


Los consumidores no compran en las redes sociales, pero sí las utilizan como vehículo para encontrar qué comprar.
Publicado por Redacción en Comercio electrónico hace 1 días
Temas Marketingcompras Impulsivasredes Socialesimpulso




Las redes sociales han creado un nuevo modo de comunicarse. Han hecho que lo inmediato se convierta en una especie de elemento inevitable, destacado. Todos estamos conectados con todos nuestros contactos y lo estamos en el mismo momento en el que hacemos las cosas. Estamos de vacaciones, subimos una foto de nuestro glorioso desayuno de hotel. Compramos un producto, lo contamos rápidamente en Facebook o en Twitter compartiendo lo buena (o mala) que ha sido la experiencia. Compartimos la información en tiempo real y recibimos la información en tiempo real y eso ha modificado por completo cómo nos relacionamos con ella.

Y si las cosas empiezan a ser tan inmediatas, nuestra reacción a ellas también empieza a serlo. Estamos en todo momento en una suerte de conversación en tiempo real con los demás y estamos siempre comentando lo que ocurre en el momento que pasa. Pero esta inmediatez no solo tiene un impacto sobre la información y sobre nuestra reacción ante ella, sino que también modifica otros elementos. Nuestros hábitos de compra y nuestras decisiones de compra se ven ampliamente modificadas por lo que ocurre en las redes sociales.

El entorno social se ha convertido en un nuevo prescriptor. Los productos que son mencionados por amigos y familiares entran en nuestras decisiones de compra y las protagonizan, al tiempo que se echa mano directamente de las mismas para encontrar qué se quiere consumir. ¿Quién no preguntó en redes sociales qué comprar? ¿Y quién no pidió recomendaciones y opiniones sobre un producto que le interesa?

Pero el hecho de que las redes sociales sean tan inmediatas y que su posición sea tan y tan influyente debería tener un impacto en más ámbitos y en más momentos del proceso de compra. Al fin y al cabo, los consumidores hacen muchas compras impulsivas, compras que se deciden en el momento mismo en el que se ve el producto y sin que, muchas veces, se sea realmente consciente de que se quería ese producto en cuestión. Si esto ha ocurrido siempre y ha ocurrido en escenarios que no eran tan inmediatos como las redes sociales, ¿qué no ocurrirá si no en ellas?
Los consumidores no compran en las redes sociales, pero sí las utilizan como vehículo para encontrar qué comprar.

Los botones de compra de las redes sociales nacieron un poco con esa idea en la cabeza. Los consumidores usaban las redes sociales como elemento de recomendación de compra y descubrían a través de ellas muchos productos que querían, así que ¿por qué no capitalizar esta realidad y convertirla en un modo de generar cifras de negocio? Muchas fueron las redes sociales que lo probaron no hace tanto tiempo (el gran boom del botón de compra fue en 2015) pero todo este pico de interés se quedó en agua de borrajas y no funcionó realmente. Sin embargo, no se debe pensar por ello que las redes sociales no funcionan como recomendadores de compra y que no tienen un impacto en las compras impulsivas. Lo tienen, pero de otro modo.

Los consumidores no compran en las redes sociales, pero sí las utilizan como vehículo para encontrar qué comprar. Las redes sociales no son una tienda, pero sí un elemento referenciador que tiene un gran impacto a la hora de reconducir al consumidor. Ahí está el social proof, el hecho de ver a los demás comprando un producto y recibir una suerte de bendición social para hacer lo mismo, para demostrarlo.


La compra es impulsiva

La clave está en lo que vamos a hacer a esos escenarios. Los internautas no navegan por las redes sociales con la intención de comprar, no entrar a ver cosas como a una tienda online, sino que están viendo información en la que aparecen de pronto los productos. Y esto tiene un impacto directo en cómo se producen las respuestas de consumo. En redes sociales no se compra de serie, sino que se compra por el entusiasmo del momento.

Las redes sociales funcionan como un elemento referenciador para el consumo, como una especie de alerta, lo que hace que la compra en el momento sea la que funcione. Lo ves y lo quieres. Por ello, las marcas usan la publicidad en redes sociales como elemento para conducir ese consumo, más que entregarse a vender allí.

Como apunta una directiva de Teleflora a eMarketer (compañía que aun así sigue prefiriendo hacer publicidad en búsqueda porque los consumidores siguen usando los buscadores para encontrar servicios como los suyos, de venta de flores online), las redes sociales funcionan para hacer que se compre en ese momento, para dar el empujón final, para hacer que se tenga el impulso de comprar y se compre (ellos hacen mucha publicidad de retargeting y aprovechando fechas específicas).



¡Libere su creatividad con Fotolia!
Los mejores contenidos al mejor precio ¡Descubra más de 40 millones de fotos, vectores y vídeos!

sábado, junio 04, 2016

¿En qué tienen que seguir trabajando las empresas para mejorar su estrategia de Marketing en redes sociales?





¿En qué tienen que seguir trabajando las empresas para mejorar su estrategia de Marketing en redes sociales?



Las redes sociales se han convertido en una parte fundamental de la estrategia corporativa, una que es como una parada inevitable con la que todas las marcas deben cumplir si quieren realmente conectar con sus audiencias. Pero, a pesar de ello, las compañías siguen cometiendo ciertos errores y siguen fallando en ciertas cuestiones. No todas las cosas se están haciendo bien y no todas las cosas se están haciendo como deberían.

¿Qué habría que tener en cuenta y en qué tendrían que trabajar seriamente las marcas en lo que respecta a su estrategia en redes sociales? Según el último informe 2016 State of Social Media Marketing Industry Report, de Social Media Examiner y que recoge TopRankBlog, las marcas siguen fallando en ciertos puntos y siguen necesitando prestar más atención a otros.
Se sigue fallando en lo que toca a medición

Puede parecer que en el mundo de las redes sociales hay ciertos elementos que ya se han dicho una y otra vez y que ya se han destacado hasta el hartazgo en los análisis y, sin embargo, se siguen cometiendo ciertos errores y ciertos fallos que esos análisis y estudios repiten que deberían ser evitados. Y así, a pesar de todo, continúan existiendo marcas que no están midiendo lo que están haciendo en redes sociales. Según los datos del estudio, no todos los responsables de marketing están empleando herramientas para medir el éxito de sus acciones en redes sociales y para establecer el ROI de lo que hacen. Para un número aún demasiado alto, las redes sociales siguen siendo una suerte de escenario misterioso en el que las cosas ocurren sin que se sepa muy bien cómo y cuándo.

Ver estos datos traducidos en cifras es mucho más impresionante. De los encuestados, solo el 19% se muestra por completo de acuerdo con la afirmación de que está analizando su actividad en redes sociales. A este número hay que sumar que solo el 41% tiene establecidas fórmulas realmente efectivas para medir el ROI de lo que hace en el entorno social.
Sí, Facebook ya no es la panacea en lo que a tráfico se refiere

Muchos medios de comunicación lograron triunfar en los últimos años gracias a un elemento clave: lo social. Cuando un link que publicaban se viralizaba en redes sociales, este se llenaba de visitas y acumulaban tráfico y más tráfico. En general, incluso aunque no se viralizase 'a lo grande', para muchos medios las redes sociales se habían convertido en una alternativa poderosa a los métodos tradicionales para lograr tráfico. Lo mismo se podía aplicar a las marcas.

Sin embargo, las cosas han cambiado, posiblemente al mismo tiempo que el algoritmo de Facebook ha ido cambiando y el alcance que se logra se ha ido neutralizando. Un 23% de las marcas encuestadas en el estudio ha asegurado que han visto como el tráfico asociado a Facebook ha ido descendiendo en los últimos 12 meses.
Las redes sociales son cada vez más complicadas

Y de ese punto se podría pasar fácilmente al siguiente: lo social es cada día más complejo y actuar en ellas es cada vez más complicado. Todo cambia muy rápido y, sobre todo, las cosas que funcionan están siendo modificadas más y más rápido. A eso hay que sumar que las redes sociales cambian sus normas prácticamente cada día para tener la foto final y ver que las cosas han dejado de ser tan sencillas como simplemente publicar un link en Facebook. Todo se ha llenado de complejidad y todo es cada vez más difícil. Un 40% de los encuestados asegura, de hecho, que en los últimos 12 meses las cosas se han complicado cada vez más.
Las redes sociales requieren cada vez más y más trabajo

A medida que las cosas se vuelven más y más complicadas y a medida que la dificultad es más y más elevada, el tiempo que hay que dedicar a analizar lo que ocurre y el tiempo que es necesario para actuar en ese entorno es cada vez mayor. Si alguien pensaba que liquidar las redes sociales era algo que se podía hacer en 20 minutos un lunes y dejar el trabajo hecho para toda la semana, lo lleva claro. Según apuntan en las conclusiones del informe, los responsables de marketing están dedicando más tiempo a las redes sociales de su jornada laboral y, a pesar de ello, sigue siendo insuficiente.

Los datos indican que las redes sociales se llevan unas 6 horas por semana de su tiempo de trabajo. Un 37% asegura estar dedicando a las redes sociales unas 5 horas semanales (una hora por día trabajado). Teniendo en cuenta que cada vez los consumidores esperan cada vez más y más actividad en redes sociales y sobre todo que esperan que las marcas sean más y más rápidas, lo de una hora al día no parece tanto tiempo. De hecho, parece algo bastante escaso. ¿Se puede generar todo lo que el consumidor espera en una hora diaria? Posiblemente los marketeros se queden cortos.
Los beneficios principales que reportan las redes sociales no son los que las marcas muchas veces esperan

¿Para qué sirven las redes sociales? Seguramente cada cual tiene su idea y posiblemente todos meterían en este listado que lo importante es el crear conversaciones, pero ¿qué es lo que se está consiguiendo realmente con las redes sociales? Según los datos de la encuesta, varias son las cuestiones que se están logrando. Un 89% de los encuestados asegura que lo más importante es que se aumenta la exposición de la marca. Tras este punto están quienes apuntan que sube el tráfico de la web corporativa (75%), se crea una base de fans leales (68%), se gana en conocimientos del mercado (66%) y que se generan leads (otro 66%).
Las redes sociales que dominan son tres y pagar es cada vez más inevitable

El mercado está lleno de redes sociales y entre ellas cada vez más y más son más populares y se están convirtiendo en cada vez más deseadas y buscadas por los responsables de marca. Pero a pesar de las modas, en la estrategia corporativa siguen dominando tres redes sociales: Facebook, Twitter y LinkedIn son todavía las que más se usan en la estrategia corporativa, a pesar de que el boom de redes como Instagram está empezando a hacer mella en alguna de ellas.

Sea en una o sea en otras, lo que sí parece claro es que cada vez es más inevitable el pasar por caja. A medida que las redes sociales complican las cosas con los cambios de algoritmo, no queda más remedio que pagar para posicionarse. O, como concluye el estudio, pagar por entrar en las redes sociales ha dejado de ser una opción, un lujo, para convertirse en una necesidad.
Y no, lo B2B sigue sin ser lo mismo que lo B2C

Y, para concluir, el estudio destaca otro punto que no por mucho repetir deja de ser importante. Puede que Facebook, Twitter y LinkedIn se hayan convertido en una especie de trinidad de las redes sociales, pero su importancia varía según el tipo de empresa y el tipo de público. No es lo mismo hacer una campaña para el mercado B2B que contactar con el de consumo.

miércoles, mayo 11, 2016

Las Chicas de la generación Z viven continuamente 'enganchadas' a las Redes sociales

Las Chicas de la generación Z viven continuamente 'enganchadas' a las Redes sociales



El 43% sigue a alguna marca en Instagram

Las Chicas de la generación Z viven continuamente 'enganchadas' a las Redes sociales


4 de cada 10 busca inspiración para sus compras en los social media
Publicado por Redacción en Redes Sociales hace 1 días
Temas Marketingredessocialesgeneracionzadolescentes





365 Shares

Las redes sociales se han convertido en una parte más de nuestro día a día. Allí nos ponemos en contacto con los amigos, vemos los vídeos del momento, leemos las noticias y también nos inspiramos para futuras compras. Y si esto es así entre la población general, mucho más entre la generación Z.

Y es que los adolescentes de entre 13 y 22 años están siempre pegados a la pantalla de su móvil (el 91% tienen acceso a uno, y el 69%, también a una tablet) y 9 de cada 10 ven vídeos en YouTube a diario. Pero aunque tanto chicos como chicas tienen una gran actividad online, a la hora de analizar el comportamiento en redes sociales, son ellas las que dominan el cotarro: según un nuevo estudio de Clique Media Group, reseñado por Warc, viven por y para las redes sociales.

¿Y qué plataformas utilizan? Cuantas más, mejor. Facebook sigue siendo la red social de referencia entre las chicas de entre 18 y 22 años, y el 93,1% de ellas tienen cuenta, pero no tanto entre las más jóvenes, ya que solo el 56,73% son activas en Facebook. La segunda más popular es Instagram, donde están presentes el 68,8% de las chicas de la generación Z, y después llegarían Snapchat (56,15%) y casi empatadas, Twitter (34,3%) y Pinterest (33,4%).

Todas estas plataformas las emplean sobre todo para mantenerse al día con los amigos, pero también para seguir marcas (el 39% sigue alguna marca en Facebook y el 43% en Instagram) o encontrar inspiración.

Entre los contenidos que más les gustan, destacan aquellos que les enseñan algo, como pueden ser los orientados a DIY, trucos de cocina o como vestir determinadas tendencias. Y un cuarto de las encuestadas aseguraron que la característica más importante de un contenido es que sea susceptible de ser compartido por mucha gente.

De todas maneras, también se observan diferentes entre las adolescentes y las chicas próximas a la veintena, y mientras las primeras priorizan los contenidos divertidos y les gusta seguir a celebrities, las segundas buscan algo con más sustancia, y prefieren seguir en las redes sociales a bloggers, marcas e influencers en los que confíen.

4 de cada 10 busca inspiración para sus compras en los social media

Como indicábamos antes, las redes sociales se usan para todo tipo de actividades, también para aquellas relacionadas con el shopping. De hecho, el 39% busca inspiración para sus compras en los social media, y el 34% ha encontrado allí productos que les han gustado.

A la hora de realizar la comprar, la mayoría intentan aprovechar sobre todo la época de rebajas u ofertas puntuales, y el 35% se ha suscrito a la newsletter de alguna marca para enterarse de las promociones y las novedades.

Por otro lado, en sus hábitos de compra el móvil también juega un papel clave, y el 70% de las chicas ha usado alguna app de compra en el último mes, un porcentaje que está a años luz del del resto de generaciones. Entre sus apps favoritas destacan Amazon y retailers de moda como Forever21 o H&M.

Es decir, a través del móvil y las redes sociales, las interacciones con las marcas son muy frecuentes, y como explican desde Clique Media Group: "La generación Z es muy consciente de la existencia de publicidad nativa y marketing dentro de las apps, y no les importa siempre y cuando la marca hable su lenguaje y sea genuina y sin filtros. Además, esas mentes jóvenes prefieren las conexiones one-to-one y dan prioridad a relacionarse con un individuo en lugar de con la marca al completo".

miércoles, abril 13, 2016

Emotional targeting: cómo las marcas usan las emociones para conectar en redes sociales

Emotional targeting: cómo las marcas usan las emociones para conectar en redes sociales





Las marcas han asumido la importancia de los mensajes con un cariz emocional

Emotional targeting: cómo las marcas usan las emociones para conectar en redes sociales


Los estudios han demostrado que cuando se consigue un impacto emocional fuerte con un mensaje se logra que crezca la intención de compra
Publicado por Redacción en Social Media Marketing hace 22 horas
Temas Marketingemocionesemotional Targetingredes Sociales




Si una palabra se ha convertido en casi una suerte de conjuro mágico o de llamada mágica para comprender qué es lo que hay que hacer y qué es lo que se está imponiendo en el mundo de la estrategia de marca, esa palabra es emociones. Las emociones se han convertido en lo que toda marca busca, en el elemento perseguido por todo el mundo y en la cuestión que protagoniza todos los informes, estudios y análisis que se pueda imaginar. Este interés creciente por las emociones viene marcado por varios elementos.

En primer lugar, los propios consumidores esperan establecer relaciones emocionales con las marcas y con sus productos, como han demostrado los estudios en cuestión. En el caso de los millennials, la conexión emocional se da ya por cuestión básica. En segundo lugar, las emociones se han convertido en un elemento clave para generar engagement y para crear respuestas eficientes. Y en tercer lugar las emociones se han convertido en un elemento clave en las redes sociales, tanto que a la hora de crear una estrategia para el entorno de los social media las marcas ya han establecido que tendrán que jugar con esa variable.
Las marcas han asumido la importancia de los mensajes con un cariz emocional y los han incorporado de forma directa a la conversación

El uso de las emociones en este entorno y con la intención de conectar con el consumidor y hacer que responda tiene un nombre. Se llama emotional targeting, en su nombre en inglés, que bien podría ser traducido como segmentación emocional.

Las marcas han asumido la importancia de los mensajes con un cariz emocional y los han incorporado de forma directa a la conversación. Como recuerdan en SocialTimes, se ha demostrado que los mensajes que apelan a las emociones han resuenan más y por tanto se han convertido en uno de los elementos que funciona como base y como cuestión clave en las conversaciones que las marcas establecen con los consumidores. El hecho de que la tecnología haya evolucionado más y más en los últimos años y que se haya conseguido refinar más y más lo que se puede hacer y el cómo se puede comprender al consumidor ha ayudado a que emplear las emociones para conectar con los consumidores sea más sencillo.

Para las marcas, es más fácil ahora que en el pasado usar las emociones para segmentar el mensaje que están intentando lanzar, para posicionarlo y que conecte con el consumidor. Los mensajes pueden abarcar todo el arco de las emociones y las marcas están obligadas a comprender qué es lo que funciona mejor (y más) en cada momento. Los mensajes alegres son, recuerdan los expertos, los que logran mayores ratios de engagement y los que tienen, por tanto, un mayor eco en las redes sociales. Los mensajes emotivos que generan experiencias memorables también funcionan muy bien a la hora de conectar con la audiencia.

Los mensajes emocionales no solo logran, además, que la respuesta de los consumidores en redes sociales sea más positiva y más elevada, sino que además también crea una realidad más positiva para las marcas en lo que a ventas se refiere. Los estudios han demostrado que cuando se consigue un impacto emocional fuerte con un mensaje se logra que crezca la intención de compra. El peso de las emociones es tal que muchas son las marcas queestán ya modificando su estrategia en el área digital para trabajar las conexiones emocionales de forma prioritaria y conectar a través de ellas con los consumidores.
Las herramientas para generar emociones

Crear mensajes emocionales, especialmente mensajes que conecten con la audiencia y que los impulse a actuar (es decir, mensajes en los que se haya aplicado bien el emotional targeting) no es tan sencillo. Las marcas tienen no solo que ser muy cuidadosas a la hora de desentrañar las emociones de los consumidores y lo que esperan sino también a la hora de comprender cómo deben construir los mensajes para que realmente funcionen.

Como apuntan en un análisis de Kissmetrics, las marcas tienen diferentes trucos o herramientas que pueden usar para generar emociones o para sugerirlas y conectar así con los consumidores. Estas son las herramientas que emplean a la hora de generar sus mensajes en redes sociales y las estrategias psicológicas empleadas para generar la idea de la emoción (y hacer que el receptor del mensaje en cuestión responda a ellas).

Uno de los primeros elementos es el de echar mano a los elementos psicológicos que empujarán al consumidor a actuar. Existen ciertas correlaciones entre las emociones de los consumidores y el modo en el que responden a los productos de las marcas y como, por tanto, consumen. Cuando estamos contentos y felices, por ejemplo, nos sentimos más inclinados a compartir en redes sociales (lo que hace que si una marca quiere viralizar su mensaje tenga que apostar directamente por generar esa emoción).
Crear experiencias de marca asociadas a experiencias de vida y a recuerdos vitales tendrá un poderoso efecto a la hora de establecer conexiones emocionales entre los consumidores y las marcas

Tras este elemento, que aborda en realidad muchos subgrupos y muchas posibilidades, se sitúa el elemento 'memoria'. Crear experiencias de marca asociadas a experiencias de vida y a recuerdos vitales tendrá un poderoso efecto a la hora de establecer conexiones emocionales entre los consumidores y las marcas. Es lo que hacen, por ejemplo, todas esas marcas que aprovechan momentos señalados, como puede ser la vuelta al cole, por ejemplo, para hacer un 'paseo por la memoria' y conectar con los consumidores en sus perfiles sociales.

Pero no solo los elementos asociados al fondo de la historia funcionarán para crear esas conexiones emocionales que las marcas persiguen: el cómo se cuenta la historia resulta crucial cuando se está haciendo emotional targeting. Los mensajes tienen que tener una gran carga visual (lo visual, demuestran los estudios, tiene un gran poder como estimulador de las emociones) y una muy cuidada, muy estudiada y en la que se haya medido muy bien qué es lo que se quiere lograr y conseguir. Una buena foto puede hacer que se creen muchos vínculos emocionales.

Y, finalmente, otro de los elementos para generar conexiones emocionales son los demás, lo conocido como social proof. Los consumidores necesitan sentir que 'pertenecen', que son parte de un grupo, y estos elementos ayudan a lograrlo.

sábado, febrero 27, 2016

Tendencias de consumo de los millennials

Noticias de Economía, Finanzas y Negocio de Colombia y el Mundo. - larepublica.co







Tendencias de consumo de los millennials

Bogotá_

La nueva generación de clientes, que hace años llamábamos potenciales, es hoy una realidad. Los millennials, también conocidos como generación Y y quienes son los nacidos entre los años 1980 y 2000, cambian las reglas tradicionales de comunicar el valor por la marca, exigiendo una adaptación por parte de las empresas a sus necesidades y características.

Se habla mucho sobre sus características comportamentales disruptivas, su independencia, la capacidad de adaptarse al cambio, las altas metas personales, el convencimiento para perseguir sus aspiraciones y ese balance de bienestar económico y calidad de vida. Incluso, generaciones anteriores pueden tildarlos de volátiles, inseguros y hasta inconstantes, pues la rotación en empleos de esta generación es, de manera notoria, superior a las anteriores. Sin embargo, la realidad es diferente: su ímpetu por cambiar el funcionamiento tradicional de las empresas, así como sus costumbres como consumidores, no se rigen por los paradigmas tradicionales con los que se han gestado y construido las empresas de hoy.
Para las generaciones predecesoras, los millenials parecen narcisistas pues el uso que le dan a las redes sociales es frecuente, incluso intenso, actualizando sus perfiles y subiendo fotos sobre todo lo que hacen, pues aparentemente buscan ser el foco de atención entre sus amigos, siendo “micro celebridades”. Como dato para destacar, diariamente, solo en Facebook se comparten cerca de 300 millones de fotografías y más de 5 billones de actualizaciones en los estados de los miembros de esta red social digital. 
Toda esta interacción es hoy un nuevo “mantra” para los directivos de marketing que quieren “colarse” en esta conversación con sus marcas. Sin embargo, las oportunidades en estos clientes no es clara; ni la academia, ni las empresas han logrado encontrar los verdaderos factores de éxito. Según el informe Think With Google, actualmente 65% de los consumidores buscan más información online con respecto a otros años. Incluso, mientras están en la tienda revisando el producto, 82% de los compradores realizan búsquedas relacionadas al producto, la marca o la categoría. Esta nueva realidad exige una mayor exposición y explicación que las marcas y sus productos dan a sus clientes. Es por esto que la generación de los millennials va más allá de consumir publicidad online. Creen fielmente en las referencias de terceros y pretenden estar mucho más informados sobre la real experiencia de consumo de la marca en cuestión. Disfrutan escribiendo sobre sus experiencias con los productos y se dejan guiar por comentarios de otros, que al final son más relevantes para ellos que lo que la misma marca anuncia. 
Según la investigación de Katherine Taken, los millennials sienten una gran atracción por los bonos de descuentos, premios y cupones, siendo de gran preferencia los sitios web con precios competitivos para contrastar ofertas. Estos factores son motivantes en 71% para volver a repetir su visita. 
Vale la pena destacar que este segmento también tiene una aversión por los anuncios invasivos en YouTube, pues no los consideran como legítimos y espontáneos. De hecho, algunos millenials con gran número de visitas comparten en video su experiencia con productos, haciéndose tan famosos que son conocidos como “youtubers”, es decir, celebridades en YouTube. A esta situación, tanto los youtubers como algunas empresas, han sabido sacarle provecho. Estas últimas pagan a los youtubers para que hablen de sus productos, quienes mensualmente pueden llegar a ganar alrededor de US$2.000, dependiendo del número de reproducciones del video.
Como es evidente, esta generación exige que los directivos de las organizaciones conozcan con mayor profundidad sus intereses, sean más asertivos a la hora de comunicar el valor de las marcas y dispongan de una mayor cantidad y detalle de información, que les permita gestionar su proceso de compra de una forma más efectiva. 
*En colaboración con Cindy Pinzón, investigadora de Inalde.

Para contactar al autor de esta nota:

Ignacio Osuna

Ph.D., profesor Inalde Business School*

Editor de esta nota:
María Carolina Ramírez
mcramirez@larepublica.com.co

lunes, septiembre 28, 2015

¿Cómo compran los millennials? - Silicon News

¿Cómo compran los millennials? - Silicon News








¿Cómo compran los millennials?


image: http://www.siliconnews.es/wp-content/uploads/2015/09/millennials-684x250.jpg
millennials

 0 2 No hay comentarios
Los millennials realizan una intensa investigación en la red antes de comprar y un 75% acaba comprando online. No obstante, la mayoría sigue prefiriendo las tiendas físicas.
La generación de jóvenes de 16 a 34 nacidos en la era digital, los denominados millennials, son uno de los objetivos prioritarios de todas las marcas. Por eso, conocer su comportamiento a la hora de comprar se ha convertido en una prioridad.
Según un reciente estudio de The Valley Digital Business School, se trata de una generación hiperconectada, con un perfil altamente digital, algo que serefleja en el proceso de compra. Así, el 62% de ellos asegura que tiene que estar seguro de conocer todas los opciones posibles antes de decidir qué compra, recurriendo a internet para buscar información. Y un 75% acaba comprando online.
En cuanto a la forma de recabar datos, el 58% recurre a un buscador para localizar información sobre un producto que ha visto en televisión, mientras que el 45% va directamente a la web del anunciante o acude a las redes sociales para saber más acerca de la marca. De hecho, las redes sociales son muy importantes. Casi un 20% de los encuestados reconoce que se hace seguidor en Facebook de la marca que ha comprado y más del 10% comenta su compra en Twitter o en blogs.
El uso de la tecnología es un rasgo diferencial de esta generación. No en vano, se conectan a la red desde un universo de dispositivos superior que el resto de la población. Los aparatos más empleados son el PC (75%) y los dispositivos móviles (72%), mientras que Smart TV y videoconsolas son también una opción, aunque minoritaria (4%). En cualquier caso, el móvil es su dispositivo preferido. Más de la mitad de los millennials opina que el smartphone es parte esencial de su vida social y más de un tercio admiten sentirse perdidos sin él. De este modo, el móvil y su acceso a internet constituyen su principal actividad de ocio, pasando conectados 144 minutos al día de media.
Sin embargo, pese a este interés por la red, los millennials siguen estando muy pegados a la realidad física. El estudio ‘Understanding How Millennials Shoppers Decide Whatt o Buy’, elaborado por Maybe Solutions, analiza el comportamiento de 1.900 millennials que han comprado recientemente tanto online como offline. El 41% de los consultados encuentra ideas para sus compras en tiendas de calle, mientras que el 39% afirma que busca en comercios electrónicos. Además, el 32% encuentra inspiración en su pareja, amigos y familiares y un 25% recurre a las redes sociales. Y la televisión también tiene un papel importante para el 15% de los consultados, así como las revistas (21%).
Igualmente, los miembros de esta generación acuden a diferentes fuentes para formarse una opinión. El 48% consulta a su pareja, el 37% pregunta a sus amigos y el 35% recurre a familiares. Sin embargo, apenas el 10% pregunta a los dependientes de la tienda y menos aún a compañeros de trabajo (6%) o usuarios de foros o comunidades online (3%).
Como vemos, el mundo offline tiene un gran peso a la hora de inspirarse o formarse una opinión. Y también lo tiene a la hora de materializar la compra. No en vano, el 55% de las compras realizadas por los encuestados habían sido en tiendas físicas, frente al 25% efectuadas desde el ordenador de su casa. Más lejos quedan las compras desde el móvil o la tablet (7% en ambos casos).

Lea más en http://www.siliconnews.es/2015/09/27/como-compran-millennials/#EACk44fzdbfKiYz2.99