El valor económico de los datos en un mundo regido por la información
Steve
Todd, miembro de EMC Fellow y vicepresidente de Estrategia e Innovación en EMC
Para el año 2024, tendremos establecida en su totalidad la economía
de la información, donde los datos son cruciales para aquellas empresas que
buscan detectar en forma predictiva nuevas oportunidades para obtener una
ventaja competitiva. La información basada en estándares se venderá, donará y
comercializará en intercambios abiertos. Los mercados de datos facilitarán la
transferencia de información desde y hacia los sistemas aislados con mayor
fluidez y la gente comenzará a comercializar sus propios datos. Ya vemos signos
de esta situación, aunque este es solo el comienzo.
En este
panorama, es obvio que los datos de su empresa son importantes. ¿Pero cuál es
la importancia que tienen? ¿De qué manera podemos medir su valor?
Hoy
hablaremos sobre los “datos como la nueva moneda corriente” e intentaremos
ponerles un precio. Generalmente, estos datos valen lo que alguien esté
dispuesto a pagar. Pero esa visión transaccional sencilla no describe toda la
situación.
Mientras
las organizaciones compiten en su afán de comprender las oportunidades y los
problemas asociados con un mundo cada vez más impulsado por los datos, las
empresas se enfrentan a la necesidad de medir en forma más precisa el verdadero
valor de la información.
Pero no
hay que temer, no todo es negativo. Las empresas inteligentes tomarán nota y se
prepararán para el futuro mediante una “arquitectura para el valor”, a través
de la comprensión y creación de procesos de valoración de TI y los negocios
dentro de la empresa que revelen el verdadero valor de los datos. Veamos
algunos ejemplos de actividades nuevas de valoración de datos que llevan a cabo
las organizaciones actualmente.
Los datos son el nuevo
producto
Un informe
reciente sobre la interrupción en el mercado de big data, realizado por
Capgemini y EMC, determinó que el 63 % de los encuestados consideraban que
la rentabilidad de los datos podría eventualmente volverse tan valiosa para sus
organizaciones como lo son sus productos y servicios existentes. Esto dice
mucho sobre el potencial de big data. Las empresas que han vendido productos
por ingresos durante años podrían comenzar a generar más ganancias del valor de
los datos que del valor de los productos. Babolat, el fabricante de raquetas de
tenis francés, produce una “raqueta inteligente”, la Babolat Play, que genera y
recopila datos sobre el desempeño del jugador en la cancha. Mediante la
creación de un producto inteligente, Babolat dio el primer paso hacia el valor
de los datos. Los datos podrían convertirse en un flujo de ingresos totalmente
nuevo. Por ejemplo, Babolat podría vender estos datos a programadores de
aplicaciones que buscan crear productos y experiencias del usuario nuevos, o
venderlos a organizaciones de investigación deportiva para minería de datos.
Una raqueta de tenis solo puede venderse una vez, pero los datos que genera
tienen un potencial de rentabilidad infinito.
Valoración de datos para el
peor escenario
Las
vulneraciones cibernéticas a gran escala se están volviendo cada vez más
frecuentes, lo que genera una gran pérdida financiera para muchas empresas.
Como resultado, las pólizas de seguros de los datos se convierten en una parte
necesaria de los negocios. Dado que trabajan con asegurados, las empresas de
seguros de datos tienen que valorar el conjunto de datos que no solo se
relaciona con el valor de los datos de la empresa del asegurado, sino que
también tiene en cuenta la multiplicidad de otros factores que ocurren en caso
de una vulneración de datos. Las notificaciones a los clientes, las
reparaciones y otros costos, como las relaciones públicas para control de
daños… todos se deben tener en cuenta para el precio del seguro. CyberEdge de
AIG, Privacy and Network Security de ACE y la división Cyber & Technology
de Lockton ofrecen coberturas a las compañías en caso de una vulneración que
tienen en cuenta los diferentes efectos de una vulneración de datos.
Datos en una bancarrota
digital
Caesars
Entertainment Operating Co., que controla Caesars Palace, Caesars Atlantic
City, Harrah’s Reno y más de doce propiedades regionales, se presentó en
bancarrota a principios de este año. Algo interesante es que el activo
individual más valioso por el que compiten los acreedores es el Programa de
lealtad de recompensas totales del Caesar, el programa de lealtad del cliente
de big data de la empresa, que se desarrollado durante los últimos 17 años
y que se dice que contiene datos de más de 45 millones de clientes. Estos
datos tienen un valor de US$1,000 millones, un número realmente
importante. Supera el valor de cualquiera de las propiedades físicas de Caesar
en Las Vegas, lo que pone en perspectiva el valor de los datos. Asimismo, se
dice que el programa corresponde al 17 % del valor total de todos los
activos operativos del Caesar. Dado que el sector del juego no ha acordado
políticas ni prácticas de valoración para los datos, el valor del Programa de
lealtad de recompensas totales será impugnado en tribunales y podría tener como
resultado resoluciones interesantes en relación con la valoración de datos.
Acuerdos de datos, fusiones y
adquisiciones
Actualmente
los datos son uno de los recursos principales que buscan las empresas en las
fusiones y adquisiciones, mucho más que el personal, la propiedad intelectual o
los bienes raíces. En la adquisición reciente que hizo LinkedIn de Lynda.com,
los datos fueron indudablemente el recurso más importante en el precio del
acuerdo. Jeff Weiner, director ejecutivo de LinkedIn, tuvo en cuenta la amplia
biblioteca de videos premium de Lynda.com como una razón de peso para la compra
de la compañía, lo que implica que LinkedIn buscaba los activos de datos de
Lynda.com para aumentar su red profesional. Del total de US$1,500 millones,
es probable que una parte importante haya sido utilizada para la compra de los
activos de datos de los videos.
Economía de la información
para un mundo mejor
El Atlas
del Genoma del Cáncer (TCGA) busca desarrollar objetivos farmacéuticos y de
diagnóstico en cáncer facilitando la posibilidad de compartir los datos
genéticos. Esta colaboración entre el NCI y el Instituto Nacional de
Investigación del Genoma Humano busca principalmente codificar datos del genoma
para que los elementos de datos comunes, basados en estándares, se puedan
compartir a través de una infraestructura de código abierto.
Para tener
éxito en la economía de la información, una organización debe posicionar a los
datos en el centro de todo lo que hacen, todos los días. Las empresas deben priorizar
la valoración de los datos para el contenido impulsado por el negocio y las
cuestiones técnicas en toda la organización. Deben convertirla en parte de su
estrategia de negocios mediante el desarrollo de herramientas para la
valoración y políticas y servicios que permitan la adquisición o la venta de
datos. Para poder avanzar en este nuevo mundo, las empresas deben mantenerse
enfocadas en mejorar sus habilidades para lograr conocimiento impulsado por los
datos, detectando en forma predictiva las nuevas oportunidades.
Algunas
empresas nuevas y organizaciones tradicionales ya están progresando en este
tema. Para otras, todavía hay tiempo. Pero a medida que la economía de la
información vaya tomando forma en los próximos años, quienes avanzan demasiado
lento no sobrevivirán. La competencia ya está en marcha; no se quede atrás.