ESPECIALISTA EN HARD DISCOUNT
DIRECTOR ESTRATÉGICO DE LA ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE RETAIL - INNOVADOR https://colombiaretail.com/
Investigación y Consultoría / Asesoría estratégica en Marketing de Retail (igomeze@gmail.com) (igomeze@colombiaretail.com) (BLOG desde febrero de 2005).
Miembro de HISPANIC RETAIL CHAMBERS OF COMMECE, DISCOUNT RETAIL CONSULTING
Con información de Colombia, Latam y Descuento duro
La industria y el comercio completan, a febrero, un año con malos resultados, según los reportes entregados por el Dane.
Durante los últimos doce meses hasta febrero de 2024, la producción real de la industria manufacturera presentó una variación de -5,5%, las ventas reales de -5,0% y el personal ocupado -1,1%.
El organismo detalló en un boletín que en febrero de 2024 frente a febrero de 2023, el sector de industria manufacturera presentó una variación negativa de -2,2 %, casi dos puntos menos que el descenso del mes anterior.
De las 39 actividades industriales representadas por la encuesta, 30 registraron variaciones negativas en su producción real, restando 4,4 puntos porcentuales a la variación total anual y 9 subsectores con variaciones positivas sumaron en conjunto 2,2 puntos porcentuales a la variación total.
Comercio
iStock
Entre los sectores con peor desempeño, según el reporte, están Fabricación de carrocerías para vehículos automotores, remolques (-34,9%), Fabricación de vehículos automotores y sus motores (-32,5%), Fabricación de productos de caucho (-17,2%) y Elaboración de cacao, chocolate y productos de confitería.
En lo corrido del año hasta febrero de 2024, la producción real de la industria manufacturera presentó una variación de -3,2%, las ventas reales de -3,3% y el personal ocupado de -1,1%.
Al comercio no le fue bien
Los comerciantes minoristas, por su parte, alcanzan en el último año, a febrero, una variación de -7% en ventas. Ese resultado dista del resultado de un año atrás cuando llegó a 2,2%, según indicó el Dane.
Por su parte, en febrero de 2024, las ventas del comercio minorista decrecieron 1,8% frente a las registradas en el mismo mes de 2023. Nueve líneas de mercancía registraron variaciones anuales negativas en sus ventas reales y, por otra parte, diez líneas de mercancía registraron variaciones anuales positivas en sus ventas. Las principales contribuciones negativas a la variación anual se presentaron en las líneas de Otros vehículos automotores y motocicletas, Equipo de informática y telecomunicaciones para uso personal o domésticos y Vehículos automotores y motocicletas principalmente de uso de los hogares, aportando en conjunto -3,1 puntos porcentuales a la variación total del comercio minorista.
Las mayores contribuciones positivas se presentaron en la venta de Combustibles para vehículos automotores y Alimentos, aportando en conjunto 1,7 puntos porcentuales a la variación total.
Comercio.
En el período de enero a febrero de 2024 en comparación con el período de enero a febrero de 2023, las ventas del comercio minorista decrecieron 2,9%. En este lapso, once líneas de mercancías registraron variaciones negativas en sus ventas reales, mientras que las ocho (8) líneas restantes registraron variaciones positivas.
Las líneas de mayor contribución negativa al comercio fueron Otros vehículos automotores y motocicletas, Vehículos automotores y motocicletas principalmente de uso de los hogares, y Prendas de vestir y textiles, aportando en conjunto -2,5 puntos porcentuales (p. p), y la principal contribución positiva se registró en la línea de Combustibles para vehículos automotores con 0,6 p. p.
COMERCIO Cúcuta volvió en 2023 a ser el punto de salida de exportaciones hacia a Venezuela sábado, 16 de marzo de 2024
GUARDAR
Más de 400% aumentó en 2023 el comercio hacia Venezuela respecto a 2019 Foto:Gráfico L
El comercio binacional entre Colombia y Venezuela se volvió a activar con la llegada el presidente Gustavo Petro al poder BÁRBARA ANDREINA OROZCO OSTOS
Las relaciones se debilitaron por más de ocho años, lo que afectó el comercio entre las dos naciones, especialmente la exportación que se hacía hacia el vecino país.
Tras el restablecimiento de las relaciones entre ambos países, se vio una reactivación mayor de la exportación de Colombia hacia Venezuela y con ello, el reposicionamiento de los puntos de salida de la mercancía, que por el cierre cambiaron.
De acuerdo con la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, Maicao se posicionó entre 2019 y 2022 como punto de acceso y destronó a Cúcuta como la principal zona de salida, pero en 2023, cuando todo fue regresando a la normalidad, Cúcuta retomó su posición, esto está muy relacionado con la reactivación del Puente Simón Bolívar.
Gráfico LR
El decano de Negocios de la U. Piloto, Andrés Castro, aseguró que Maicao se volvió un punto neurálgico para el comercio binacional por el contrabando y porque el control no se podía hacer de manera efectiva dentro de las Aduanas.
En 2022, las fronteras entre Colombia y Venezuela comenzaron a operar con normalidad, lo que derivó en un crecimiento de 91% en las exportaciones de Colombia hacia Venezuela, 6% entre 2022 y 2023. Además, creció 426% en 2023 frente a 2019.
Siguen sin tocar fondo: por qué la industria y el comercio se siga contrayendo
Producción y ventas de la manufactura llegaron a niveles de -4,3% y -4,1%, respectivamente, mientras que los minoristas sintieron una caída de 3,9%.
Comercio
Óscar Berrocal / EL TIEMPO POR: PORTAFOLIO
Tanto la industria como el comercio comenzaron el 2024 con indicadores negativos, según los informes presentados por el Dane sobre el desempeño de estas actividades en enero.
La producción real de la actividad manufacturera decreció 4,3%, en tanto que las ventas reales cayeron 4,1% y el empleo también bajó a un nivel de 1,1%.
Hace un año, en enero del 2023 la actividad industrial fue de 0,2 por ciento, lo cual evidenció que un año después se ha profundizado la crisis del sector.
De las 39 actividades industriales representadas por la encuesta, un total de 29 registraron variaciones negativas en su producción real, restando 5,4 puntos porcentuales a la variación total anual.
Por su parte, 10 subsectores con variaciones positivas sumaron en conjunto 1,2 puntos porcentuales a la variación total. Fabricación de productos de caucho (-30,1%), Hilatura, tejeduría y acabado de productos textiles (-21,7%), así como confección de prendas de vestir (-21,8%), Industrias básicas de hierro y acero (-16,3%) y Elaboración de cacao, chocolate y producción de confitería (-16,1%), fueron los sectores más golpeados en enero.
Entre los subsectores con variaciones favorables sobresalen Fabricación de productos farmacéuticos, sustancias químicas medicinales (22,8%), Industrias básicas de metales preciosos y no ferrosos (13,8%), Fabricación de otros tipos de equipo de transporte (13,1%) y Fabricación de carrocerías para vehículos automotores, remolques (10,1%), advierte el reporte publicado por el Dane.
Comercio.
En los últimos doce meses hasta enero de 2024, la producción real de la industria manufacturera presentó una variación de -5,3%, las ventas reales de -4,9% y el personal ocupado de -0,9%.
Una vez el Dane reveló los datos del sector correspondientes a enero, el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia, Andi, Bruce Mac Master, expresó que ese reporte confirma la preocupación de los empresarios sobre la situación del sector.
“Estos resultados deben ser una señal de alarma y nos deben convocar para tomar medidas urgentes de reactivación, que no solo impulsen al sector productivo, sino que además generen certidumbre y confianza, para que se estimule la inversión y las empresas puedan hacer una adecuada planeación en el largo plazo, viendo a Colombia como un lugar atractivo para trabajar y generar empleo”, dijo.
Mal, el comercio
En enero de 2024, las ventas reales del comercio minorista disminuyeron 3,9% y el personal ocupado decreció 0,2% en relación con el mismo mes de 2023. Excluyendo el comercio de combustibles, la variación de las ventas reales del sector fue de -4,9%.
Once líneas de mercancía registraron variaciones anuales negativas en sus ventas reales y, por otra parte, ocho líneas de mercancía registraron variaciones anuales positivas en sus ventas.
Las principales contribuciones negativas a la variación anual se presentaron en las líneas de Prendas de vestir y textiles, Repuestos, partes, accesorios y lubricantes para vehículos y Vehículos automotores y motocicletas, principalmente de uso de los hogares, aportando en conjunto -2,2 puntos porcentuales a la variación total.
En el periodo de febrero de 2023 a enero de 2024, en comparación con el periodo de febrero de 2022 a enero de 2023, las ventas del comercio minorista decrecieron 6,9%.
Industria
iStock Cayó ocupación hotelera
Según la Encuesta Mensual de Alojamiento (EMA) del Dane, mientras que en enero del 2022 la ocupación hotelera fue de 53,6%, en el primer mes del 2024 se ubicó en 49,9%, una reducción de 3,7 puntos.
El destino donde más cayó fue Cartagena, pues la ocupación para este mes fue de 70,8%, mientras que un año atrás fue de 76%, situación similar ocurre en el resto de las ciudades y ninguna mostró un aumento.
Debido a esta situación, los ingresos reales de los hoteles cayeron 10,2%, una dinámica sostenida desde marzo del año anterior.
Comercio se aferra a un milagro para salvar el año
Con el reporte de ventas de septiembre completan nueve meses en fila con saldo en rojo.
Compras
FOTO: iStock POR: DANIEL HERNÁNDEZ
Una caída constante en las ventas, repuntes de la inseguridad y una creciente desconfianza frente a lo que se viene de cara al futuro es el panorama que actualmente golpea a los comerciantes en Colombia, que en septiembre completaron nueve meses seguidos con saldo en rojo y ahora ponen todas sus esperanzas en lo que vendrá para la temporada octubre-diciembre, para repuntar.
Según la más reciente encuesta de opinión comercial revelada por Fenalco en su publicación Bitácora Económica, el 82% de los comerciantes consultados indicó que sus volúmenes de ventas se estancaron o disminuyeron en comparación con el año anterior, mientras que sólo un 18% reportó un aumento en las ventas, dejando claro que están frente al mismo panorama que viven desde hace varios meses.
Para Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, esto debe ser motivo de preocupación, ya que es prueba de que la situación actual del comercio no es la mejor, mientras que las perspectivas para el cuarto trimestre son negativas.
“Entre los desafíos que enfrenta el sector se encuentran la falta de demanda, las altas tasas de interés, demoras en la logística y una creciente inseguridad que afecta tanto a grandes comerciantes como a pequeños establecimientos”, dijo el vocero gremial.
Fenalco resaltó que la inseguridad y las extorsiones padecidas por los comerciantes detallistas también están frenando la dinámica del ciclo de ventas, especialmente en sectores como abarrotes, tiendas de barrio, minoristas de ropa y calzado.
La encuesta de septiembre también exploró el grado de cumplimiento de los presupuestos de ventas para este año y los resultados son desalentadores, ya que solo el 14% de los comerciantes cree que logrará cumplir al pie de la letra su presupuesto, mientras que un 5% se muestra optimista y considera que superará sus metas.
“Acá lo que más preocupa es que un abrumador 81% sostiene que no alcanzará sus objetivos de ventas para este año, es decir, que aspiran a cerrar el año con pérdidas, afectando seriamente sus economías y la oportunidad de crecimiento”, explicó Cabal.
A pesar de la difícil situación, la Bitácora Económica destaca que septiembre pudo haber sido aún peor si no fuera por ciertos factores que estimularon las ventas. La coincidencia de cinco sábados durante el mes impulsó las visitas de los compradores a los centros comerciales del país.
En cuanto al empleo en el sector, el panorama también es sombrío. El 88% de los consultados afirmó que el nivel de empleo en sus empresas durante el cuarto trimestre del año no se incrementará, mientras que sólo un 12% cree que habrá un aumento en el empleo. Esto resulta preocupante dado que durante la temporada de fin de año, por lo general, se espera un incremento en las oportunidades laborales en el comercio, que no podría tener el mismo dinamismo para las fechas venideras. Un panorama complejo
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco
Santiago Saldarriaga / CEET
Portafolio también habló con expertos del Centro de Investigaciones Económicas Anif, que si bien destacaron que la economía del país está dando muestras de contracción y el momento actual de los comerciantes no es el mejor, no hay que pasar por alto que se vienen tres meses clave para dar vuelta a esta mala racha.
Para José Hernández, investigador económico de Anif, “si bien es cierto que las cifras de comercio vienen contrayéndose por varios meses, y pues es una tendencia que seguirá, creemos nosotros, en lo que falta del año, los últimos meses de todos los años son los que presentan los mejores niveles de ventas históricamente, pues por tratarse de las festividades de diciembre, las vacaciones”, dijo.
Es por esto que destacan que en este último trimestre se van a enfrentar dos grandes fuerzas que impulsarán al alza y a la baja, al mismo tiempo, al comercio; razón por la cual se podrían presentar “unos niveles de variación cercanos a cero”.
“Vamos a tener niveles menores, evidentemente, del año anterior, donde la demanda interna seguía creciendo muchísimo. Las fiestas de final de año no van a dejar que esté tan complicado el panorama para el sector comercio a final del 2023”, agregó Hernández.
Rosmery Quintero, presidenta de Acopi, sostuvo que el panorama para las microempresas no es mejor, puesto que en este escenario también “se ha observado una disminución en el gasto del consumidor, una reducción en la inversión empresarial y una mayor competencia, lo que ha generado un entorno comercial muy desafiante”.
“Durante el primer semestre del año, hemos observado que más del 50% de las MiPymes consultadas en nuestra Encuesta de Desempeño Empresarial experimentaron una reducción en sus niveles de ventas. Este fenómeno se ha destacado como uno de los principales indicadores de disminución, ubicándose detrás de la rentabilidad y las inversiones en términos de percepción de afectación”, manifestó Quintero.
El apocalipsis ha terminado, prepárense para el renacimiento del comercio minorista Por Jackie Mallon
15 dic 2022
MODAImagen: Holiday shoppers, Ph FashionUnited
El apocalipsis del retail que dominó los titulares de los medios de comunicación hace apenas un año, se ha convertido en el resurgimiento del comercio minorista, según Nikki Baird, jefe de Estrategia de Aptos. "Nunca habíamos visto tanto entusiasmo en la tienda y lo que realmente puede aportar en términos de eficiencia operativo y compromiso del cliente", dijo Baird a FashionUnited. "Es un momento emocionante" ¿Pero estamos preparados?
Durante la pandemia, este tipo de pronóstico habría sonado como un retroceso a una época dorada pre-Amazon, pero Baird también nos advierte que esperemos fallas. Durante los dos últimos años, debido a la falta de afluencia de público, los retailers no han invertido en tecnología en las tiendas. Esto ha provocado una crisis en el ciclo de sustitución que también choca con los actuales retos de la cadena de suministro en lo referente al hardware. Baird explica: "Un gran número de dispositivos de pago están incumpliendo la normativa desde el punto de vista de la seguridad y deben ser sustituidos. Las cajas registradoras o los cajeros utilizan dos sistemas operativos de Microsoft muy antiguos, específicos para el comercio minorista, que se dejarán de usar en pocos años. Los minoristas tienen que sustituirlo todo, el hardware, los sistemas operativos y el software, principalmente". El regreso del comercio tradicional
A nadie le gusta ver cómo cierran sus tiendas favoritas o cómo las calles se llenan de inmuebles vacíos. Este fue otro resultado desafortunado de que todo el mundo comprara en línea durante dos años, combinado con una subestimación del poder de la experiencia personal para el consumidor de la Generación Z. "Aunque la Generación Z pase mucho tiempo en Internet, quiere una contrapartida a eso, y si puedes hacer que la experiencia en la tienda sea atractiva, vendrá", dice Baird. "Lo difícil es definir cuál es esa experiencia".
Los comerciantes minoristas deben invertir en actividades orientadas al interés del cliente y al servicio. Estas tienden a estar más impulsadas por la mano de obra, lo que implica más contrataciones de personal. Las viejas estrategias para atraer clientes, como los trunk shows o las grandes rebajas, ya no sirven. Un ejemplo sería el de Levi's, que ofrece a sus clientes la posibilidad de bordar sus jeans o cambiar los botones. Baird afirma: "Se convierte en algo participativo. Habla de la necesidad de personalización. No se puede hacer por Internet. Vale la pena venir a la tienda para experimentarlo". La tecnología no es una mala palabra
En las conferencias sobre comercio minorista rara vez se menciona la tecnología, pero no se puede ignorar la realidad de que Internet existe. "Hemos retrocedido un poco, casi como si la tienda fuera una zona libre de tecnología", afirma Baird. "No se trata de que la tecnología esté frente a ti, pero sí de que sea una parte de la experiencia". Los vendedores impulsan el compromiso
La evolución del papel del vendedor será vital para la nueva experiencia en la tienda. Los minoristas quieren que sus asociados dispongan de un dispositivo móvil para poder caminar por la tienda e interactuar con los consumidores que han adquirido el hábito de comprar delante de una pantalla. Los carros móviles que pueden desplazarse por la tienda y los empleados que pueden doblar y embolsar hacen que el mostrador de la caja registradora deje de ser el epicentro de la experiencia en la tienda. De hecho, es posible que en muchos casos se elimine. Según Baird, "retirar las cajas registradoras de las tiendas para abrir el espacio podría realmente remodelar el aspecto de la tienda en los próximos 3 a 5 años". Pero operativamente hay algunos retos. El dispositivo para retirar la etiqueta de seguridad debe ser accesible para los empleados en movimiento, pero no para los clientes, porque aumentaría los hurtos. Los pop-ups no se detienen
"Los pop-ups son un experimento de ubicación y formato que permite a las marcas probar nuevos mercados antes de tomar un compromiso. Un ejemplo reciente es la decisión tomada en octubre por la empresa de cupcakes Baked by Melissa, fundada en Nueva York, de elegir a la ciudad de Boston para expandirse por primera vez fuera del estado. La apertura de un pop-up en la zona de Seaport se basó en el elevado número de pedidos que recibieron de Boston durante la pandemia. Ahora la empresa puede comprobar si el comportamiento del consumidor de cupcakes de Boston se prolonga más allá de la pandemia antes de firmar un contrato inmobiliario a largo plazo.
Los arrendamientos a corto plazo para llenar los puntos de venta vacíos de los centros comerciales son cada vez más populares. Popable, fundada en 2017, trabaja con socios inmobiliarios como Simon, Kimco y Brookfield Property Partners, acaban de darle la bienvenida a Walmart incorporandolo a su cartera de más de 10.000 marcas. A tiempo para el periodo de compras navideñas, Walmart alquilará espacio por un corto plazo a pequeñas marcas que quieran evitar los agobiantes contratos de alquiler a largo plazo. La importancia del probador
"Si yo tuviera un negocio, los probadores serían lo más importante", dice Baird. "Serían lujosos y habría muchos, porque me gustaría que todo el mundo estuviera allí". Describe un futuro no muy lejano en el que los consumidores podrían interactuar con el espejo y la talla solicitada caería del techo por un tubo. El momento de la conversión se produce en el probador, por lo que convertirlo en la experiencia más satisfactoria para el consumidor debería ser la prioridad de todo retailer. Descuidado durante la pandemia, ahora desempeñará un papel central en el éxito de una tienda. La oportunidad de las devoluciones
Los comerciantes minoristas no deberían intentar emular la política de devoluciones de Amazon porque no sólo sería imposible, sino una mala jugada comercial. Cuando los consumidores devuelven un artículo a la tienda es una oportunidad para comprometerse y vender otra cosa en su lugar. Baird afirma: "No se quiere incomodar al cliente, pero tampoco se quiere que las devoluciones sean tan fluidas que parezcan algo muy sencillo. Hay un término medio". Una conversación sobre qué ha fallado en el artículo y qué se puede hacer para que el cliente quede satisfecho contribuirá en gran medida a recuperar la lealtad de los clientes tras la pandemia. También podría ayudar a desincentivar los malos comportamientos alimentados por la pandemia, como el bracketing, la práctica de comprar varias tallas en línea, quedarse con una y devolver el resto. Para hacer frente al aspecto insostenible de las devoluciones en línea (residuos de embalaje por envío, productos que no siempre vuelven a ponerse a la venta), los retailers podrían ofrecer un descuento si el artículo se devuelve en su bolsa original.
Este artículo fue originalmente publicado en FashionUnited.com, y ha sido traducido y editado al español por Cynthia Ijelman
COMERCIO Comercio y servicios fueron los dos sectores con más ventas durante 2021 jueves, 23 de junio de 2022
GUARDAR Las actividades facturaron $264 billones y $254 billones, respectivamente, en 2021 según la Superintendencia de Sociedades
Cristian Acosta Argote
La Superintendencia de Sociedades reveló su informe de las 1.000 empresas más grandes con corte al año 2021, y evidenció que por sectores, las organizaciones del país tuvieron un importante crecimiento luego de un retador 2020 que puso en vilo al tejido empresarial de Colombia.
Más allá del sector de energía e hidrocarburos, el rubro de comercio lidera como el que más ingresos operacionales tuvo durante 2021: logró $263,8 billones, lo cual representó un aumento de 28,6% si se tiene en cuenta que los ingresos para el año de la pandemia llegaron a $205,2, cifra que, a su vez, representó un déficit de -1,8% en relación con el año 2019. Javier Díaz, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), asegura que el comercio fue uno de los sectores más golpeados por la llegada del covid y su repunte para el año 2021 fue la salida del letargo que sufrió tras el cierre generalizado por cuenta de las cuarentenas.
“Cuando nos quedamos en casa y se cerraron los centros comerciales y el comercio en general, vimos que fue un sector que sufrió bastante. En la medida en que la economía se abrió y empezó a recuperarse el que sector empezó a crecer de manera positiva”, explica Díaz. El experto destaca que el Gobierno Nacional ha entregado una serie de subsidios que permitieron que el gasto dentro de los hogares tuviese un crecimiento relevante. “En el primer trimestre de este año, el gasto de los hogares subió más de 12%”, explica el directivo.
La relación entre el gasto y el comercio ha sido, sin duda, una de las ecuaciones que ha posicionado al sector como líder en materia de ingresos operacionales. También vale la pena destacar otras iniciativas del Estado como el Día sin IVA, que impulsa en sus jornadas el crecimiento empresarial y comercial en Colombia.
Dejando de lado el sector energía, el sector servicios está en segundo lugar en la variable de ingresos operacionales después de comercio. Las empresas más grandes dedicadas a este rubro lograron ingresos por $254,5 billones, cifra que representa un crecimiento de 18,6% del año 2020 a 2021. Durante el año de la pandemia, los empresarios dedicados a los servicios lograron $214,6% en ingresos, una reducción de 2,9% si se compara con los $221 billones alcanzados para el año 2019.
El sector de manufacturas es el tercero con más crecimiento según la Supersociedades. Su bonanza también es reportada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), que reportó un crecimiento de 19% y 18% en materia de producción y ventas, respectivamente, si se compara abril de 2022 con 2019.
Para el año pasado, las manufacturas tuvieron ingresos operacionales por $221,7 billones, un crecimiento de 30,2% comparado con 2020, año en que se lograron ingresos por $170,3 billones, -3,4% menos que en 2019. Los últimos dos sectores con incrementos importantes fueron la construcción y el agro, cuyos ingresos subieron 15,2% y 21,7%, respectivamente.
Navegando la inflación en el comercio minorista: seis acciones para los minoristas
Los minoristas se enfrentan a la posibilidad de una inflación persistente, pero pueden enfrentar ese desafío de manera que optimicen las operaciones, retengan a los clientes e impulsen un crecimiento rentable.
La inflación aterrizó como un golpe en el sector minorista en mayo cuando los líderes de la industria informaron sobre el impacto que los costos más altos estaban teniendo en sus operaciones. No pasó mucho tiempo antes de que los inversores respondieran, y algunos de los minoristas más grandes de Estados Unidos vieron las mayores caídas en los precios de sus acciones desde la caída del mercado de 1987.
El año pasado, a medida que más y más estadounidenses fueron vacunados contra el COVID-19, los minoristas disfrutaron de un gran impulso en las ventas. Pero la fuerte demanda de bienes pronto abrumó las cadenas de suministro, y los desequilibrios entre la oferta y la demanda se combinaron con las presiones de costos impulsadas por los productos básicos para impulsar los precios al alza. En los EE. UU., la inflación alcanzó casi el 8,5 por ciento en marzo de 2022, su nivel más alto en 40 años.1 Los precios de las materias primas volvieron a subir cuando Rusia invadió Ucrania, lo que exacerbó los aumentos de costos, tanto directos como indirectos, para los minoristas y elevó aún más la inflación.
Los planificadores han llegado a esperar una tasa de inflación de aproximadamente el 2 por ciento, pero se ha vuelto cada vez más evidente que la inflación podría permanecer muy por encima de eso durante el próximo año y posiblemente más allá. Los bancos centrales de todo el mundo están aumentando las tasas de interés para moderar la demanda y limitar la inflación futura, pero esos esfuerzos tardarán en dar resultados.
Los minoristas de todo el sector deben tener en cuenta las nuevas realidades de inflación récord y desarrollar soluciones para sostener sus negocios, retener clientes y garantizar el crecimiento a largo plazo. Hemos identificado seis áreas clave en las que los líderes de la industria pueden centrar sus esfuerzos para transformar este período de estrés en una oportunidad para el futuro. Los minoristas están siendo exprimidos
A medida que la economía se ha vuelto a abrir en los últimos meses, hemos visto desafíos tanto en los resultados superiores como en los inferiores con la desaceleración del crecimiento de las ventas para algunos y la compresión de los márgenes, una combinación desafiante para los minoristas. De cara al futuro, es probable que la industria se enfrente a un entorno de crecimiento más desafiante incluso cuando se enfrenta a mayores gastos. Los minoristas deben lidiar no solo con el aumento del costo de la mercancía, sino también con los aumentos de costos en todo, desde los insumos de fabricación hasta el flete y el combustible y los salarios. Además, el comercio electrónico ahora representa casi el 13 por ciento de todas las ventas minoristas,2 ejerciendo una mayor presión a la baja sobre la rentabilidad de los minoristas.
Si bien la inflación aún no ha tenido un impacto significativo en el gasto nominal del consumidor, estamos comenzando a ver los primeros signos de un posible retroceso. En los primeros meses de 2022, en medio de una inflación récord, los consumidores estadounidenses continuaron abriendo sus billeteras. El crecimiento en el gasto de los consumidores quizás no fue sorprendente: los consumidores estadounidenses tenían aproximadamente $ 3.3 billones más en ahorros que en 2019,3 y muchos no dudaron en echar mano de esas reservas cuando se relajaron las restricciones pandémicas. Y no han sido solo los ahorradores los que han hecho compras; la deuda de las tarjetas de crédito también está comenzando a aumentar.
Si bien el gasto general se mantuvo fuerte, el gasto de los consumidores se ha reducido en algunas categorías que anteriormente estaban creciendo, lo que provocó que se estancaran o incluso cayeran. Gran parte del crecimiento año tras año en el gasto en comestibles se debe a la inflación, no a un mayor consumo. En categorías como gasolina, viajes y restaurantes, los consumidores pagan más pero consumen menos.4
Como otro indicador de una posible desaceleración, vimos que la confianza del consumidor comenzó a disminuir a fines de febrero, cuando los consumidores comenzaron a adoptar comportamientos más conscientes del valor. Solo el 38 por ciento de los encuestados en la última encuesta Consumer Pulse de McKinsey dijeron que se sentían optimistas, frente al 44 por ciento en octubre de 2021.5 La caída más pronunciada en el sentimiento se produjo entre los consumidores de mayores ingresos, que con frecuencia cambiaron a productos y marcas más caros en 2020 y 2021, pero pronto podrían controlar el gasto. Con el dinero del estímulo de COVID agotado y la inflación afectando las compras diarias, los hogares de bajos ingresos siguen siendo los más pesimistas sobre el estado de la economía.
Estos cambios en el sentimiento están comenzando a manifestarse en el comportamiento de compra, con más consumidores estadounidenses que informaron que cambiaron de marca y minorista en 2022 que en cualquier otro momento desde que comenzó la pandemia. Y la mayoría dice que tiene la intención de seguir cambiando, con el precio en la parte superior de la lista de motivaciones de los consumidores. Con la inflación en un nivel récord, más personas buscan valor; entre los que dijeron que habían cambiado de marca, un poco más de un tercio dijo que optaron por comprar productos de marca privada.
Casi todos los consumidores, el 90 por ciento, han notado que los precios están subiendo. En particular, informaron aumentos significativos en los precios de dos cosas que muchas personas compran varias veces a la semana: gasolina y comestibles, lo que podría conducir a una disminución del gasto en artículos discrecionales si la tendencia persiste.
También hemos visto una preocupación considerable sobre las perspectivas minoristas de Wall Street. De los 79 grandes minoristas que reportaron ganancias entre el 1 de abril y el 23 de mayo de este año, el 59 por ciento reveló una disminución en las estimaciones de ingresos de consenso para 2023, y el 71 por ciento vio una disminución en las estimaciones de ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización para 2023.6 Dos tercios de estas empresas vieron caer el precio de sus acciones el día que reportaron ganancias. Durante el mismo período (del 1 de abril al 23 de mayo), el S&P Retail Composite Index cayó un 24,1 %, casi el doble de la caída del S&P 500 durante el mismo período.
Una oportunidad de reposicionamiento para el crecimiento futuro
Los minoristas pueden convertir estos desafíos en oportunidades , si toman decisiones audaces y deliberadas. De hecho, las empresas que logran un desempeño extraordinario durante las recesiones económicas tienden a superar a sus pares durante la década siguiente. Vimos esto después de la Gran Recesión de 2007 a 2009; los minoristas más resistentes pudieron impulsar un crecimiento anual del 11 % en el rendimiento total para los accionistas, más de cinco veces más que sus pares hasta 2018.
Si bien no existe una bala de plata, los minoristas pueden tomar una serie de acciones transformadoras para abordar la inflación e impulsar un desempeño de cambio radical para los próximos años. Aquellos que adopten un enfoque integral podrán combatir las presiones inflacionarias y preservar sus ingresos rentables. Con ese fin, hemos identificado seis áreas de enfoque para los minoristas a corto plazo:Revise sus estrategias de categoría para reflejar los cambios en el comportamiento de compra del consumidor y los perfiles de margen.En el entorno actual, los consumidores son cada vez menos leales a las marcas y recurren a productos de marcas privadas para hacer frente a la inflación. Para convertir esto en una ventaja, los minoristas deben volver a examinar periódicamente sus estrategias de categoría. Los minoristas ganadores equilibrarán las preferencias cambiantes de los consumidores (quizás en categorías de valor) con presiones inflacionarias específicas del producto. Esto puede significar pensar de manera diferente sobre su combinación de marcas privadas y nacionales. Quienes busquen mejorar la penetración de las marcas privadas primero pueden desarrollar marcas con un alto nivel de reconocimiento, defensa y lealtad independiente mediante la adopción de estrategias de marca dirigidas por el consumidor y capacidades de gestión y diseño de categorías por las que las empresas de bienes de consumo envasados son conocidas.
Aborde el costo de servicio de extremo a extremo a través de una mayor visibilidad y diversificación de la cadena de suministro. Los minoristas pueden reorientar sus redes de suministro y distribución para enrutar los envíos a través de puertos de baja congestión y rutas marítimas de menor costo, ubicar los centros de distribución en ubicaciones óptimas que equilibren la disponibilidad o los costos de mano de obra con los costos de la última milla, y utilizar la logística y el suministro de terceros. proveedores de cadena como servicio para reducir la intensidad de los activos y los gastos generales de distribución. Una mayor visibilidad del inventario de extremo a extremo, los costos de cumplimiento y las métricas de la experiencia del cliente pueden permitir a los minoristas equilibrar costos y servicios de manera más efectiva.
Sea granular con la fijación de precios y la promoción, y adapte la entrega de valor a los consumidores. En lugar de implementar aumentos de precios amplios que pueden erosionar la confianza del cliente, los minoristas pueden adaptar su respuesta de precios inflacionarios por segmento de cliente y producto, teniendo en cuenta tanto el rendimiento del margen como la disposición a pagar de los consumidores. El aumento de precios es desagradable tanto para los consumidores como para los minoristas. Los minoristas que adoptan un enfoque quirúrgico tienen más probabilidades de emerger con la rentabilidad y las relaciones con los consumidores intactas. Además, los minoristas pueden volver a evaluar su combinación de precios y promociones durante este tiempo; Retirar las promociones puede ayudar a administrar los aumentos de costos sin aumentar los precios.
Utilice herramientas de abastecimiento de última generación para impulsar la excelencia en el abastecimiento de productos de marca y de marca propia:Hay una amplia gama de madurez en el abastecimiento de marca privada. Cuando los minoristas comenzaron a adquirir productos de marca privada, muchos simplemente replicaron sus modelos de abastecimiento de productos de marca. Los minoristas más avanzados han evolucionado dramáticamente desde esos primeros días, al darse cuenta de que tienen el control total del diseño y las especificaciones del producto, así como de la cadena de valor, y negocian en función del costo. Para hacer esto, los minoristas pueden implementar herramientas de abastecimiento de próxima generación para crear una visibilidad en tiempo real del impacto de la inflación en los costos del producto final y desarrollar objetivos de costos de productos de abajo hacia arriba en sus carteras. Las herramientas de monitoreo de costos en tiempo real permiten a los minoristas identificar cuál debería ser el impacto real de los cambios en los costos de los insumos (de materias primas, fletes, mano de obra, tipos de cambio, etc.) y dónde se apartan de los precios propuestos por los proveedores y tomar medidas. Los modelos digitales de costos deberían permitir a los minoristas desarrollar rápidamente una vista detallada de lo que deberían costar sus productos en miles de SKU y ajustarlos fácilmente a medida que evolucionan las condiciones del mercado. Luego, pueden aprovechar estos conocimientos en tiempo real para administrar mejor su exposición a los insumos inflacionarios optimizando el diseño y las especificaciones del producto y reevaluando su matriz proveedor-país.
Para los productos de marca, los minoristas pueden investigar opciones para mejorar los márgenes en su cartera. En primer lugar, pueden aumentar la transparencia para comprender los márgenes "todo incluido" con los proveedores, incorporando todos los costos, financiamiento y servicios de valor agregado para garantizar que los comerciantes comprendan completamente las compensaciones entre las marcas dentro de su cartera. Luego, pueden implementar análisis avanzados para informar mejor las decisiones comerciales sobre cosas como la transferibilidad del espacio en los estantes y la inversión en PLU en lugar de confiar en la intuición. Esto les ayudará a comprender el impacto de los cambios macroeconómicos, como los precios de los productos básicos y el envío, en los costos del producto final. Finalmente, pueden involucrar a sus proveedores de manera consistente y basada en hechos, con el apoyo de un equipo central, para garantizar la colaboración en la navegación de los desafíos de un entorno inflacionario.
Replantee las operaciones de la tienda para optimizar la productividad. Para contrarrestar los efectos de la inflación de los costos laborales, los minoristas pueden reevaluar sus procesos en la tienda y buscar oportunidades para restablecer el modelo operativo de la tienda implementando tecnología y análisis, restableciendo la asignación y programación de mano de obra y adoptando una visión de extremo a extremo. de costos Los minoristas también pueden invertir en la experiencia y retención de los empleados de primera línea para reducir la costosa rotación al aprovechar el análisis de reclutamiento y talento y repensar el desarrollo de capacidades.
Establezca una “sala de ganancias” de inflación. La gestión de las implicaciones de la inflación en un amplio panorama operativo exige una respuesta transversal, disciplinada y ágil. Una "sala ganadora" de la inflación, o una estructura interfuncional flexible con la autoridad para coordinar la respuesta a la inflación, puede establecer objetivos claros para la organización, establecer una fuente de verdad, aumentar la velocidad de la toma de decisiones y garantizar un hecho sistemático. enfoque basado en el seguimiento de la ejecución, el diagnóstico de ganancias y pérdidas, y la aplicación de las lecciones aprendidas.
Es probable que el entorno para los minoristas siga siendo desafiante durante algún tiempo, pero la situación también presenta una oportunidad para que aquellos que se mueven con decisión y rapidez desarrollen una respuesta. La mayoría de las organizaciones minoristas tienen las capacidades necesarias para capear la tormenta y emerger como ganadoras. Reconocer que es probable que la inflación persista puede dar a los minoristas un sólido incentivo para actuar de manera integral en toda la organización y la cadena de valor. El futuro pertenecerá a aquellos que estén dispuestos a remodelar sus capacidades y hacer crecer su resiliencia organizacional.
SOBRE LOS AUTORES)
Kari Alldredge es socia en la oficina de Minneapolis de McKinsey; Becca Coggins es socia sénior en la oficina de Chicago; Ryan Drassinower es socio asociado en la oficina de Miami; y Jesse Nading es socio asociado en la oficina de Denver.
Los autores desean agradecer a los siguientes colegas por sus contribuciones a este artículo: Praveen Adhi, Steven Begley, Susan Nolen Foushee, Ezra Greenberg, Jad Hamdan, Patricio Ibanez, Aniket Joglekar, Eric Kuehl, Ben Mathews, Emily Reasor, Kelsey Robinson, y Aneliya Valkova.
Los espacios tangibles son importantes y por ello los grandes siguen apostando por ellos
Jordi Mas Fundador de CrearmasBarcelona. 23 marzo de 2022 05:30
iStock 1341505048
Es un hecho que los gigantes del comercio siguen apostando por abrir tiendas físicas a pesar del boom digital, porque saben bien que si hay un lugar en el que merece la pena invertir, sin duda, es este. Suscríbete a VIA Empresa y recibirás en tu correo nuestras mejores historias, reportajes y entrevistas, además de otras ventajas exclusivas para suscriptores.
Si lo pensamos bien, incluso Amazon, el gigante del comercio electrónico, está apostando por el negocio físico a largo plazo. Si hace un año nos sorprendió con el lanzamiento de su propio supermercado, a finales de 2022 inaugurará su primera tienda de ropa física en Los Ángeles, una división popular en su página web.
La tienda física sigue siendo una tendencia al alza porque los espacios tangibles son importantes, ya que el cliente sigue queriendo tocar, degustar, oler, oír y dejarse aconsejar por el vendedor.
El proceso de adaptación del comercio a las demandas de hoy en día, necesita la alineación de la tecnología y el retail (el comercio minorista). Es por este motivo que la tienda física no pierde atractivo, si no que, por lo contrario, mejora la experiencia de compra añadiendo lo más importante: el valor.
La tienda física sigue siendo una tendencia al alza porque los espacios tangibles son importantes
Los espacios comerciales se están renovando para adaptarse a las nuevas demandas de los clientes, como es el caso de Nespresso, marca de Nestlé que tradicionalmente se ha enfocado en vender cápsulas de café, máquinas y otros complementos.
La marca está dando un enfoque diferente a sus tiendas, otorgando más importancia a las experiencias. El año pasado abrió en abril un comercio físico en Viena que incorporó algunos cambios, como el hecho de que un empleado enseñe a los clientes diferentes métodos para hacer café y las diferencias de sabor entre el café cultivado en diferentes partes del mundo. La tienda también facilita que los clientes realicen pedidos, una simbiosis perfecta entre el online y offline.
Las ventas de Nespresso a través de boutiques representan un pequeño porcentaje de las ventas totales de la marca, pero eso no significa que no los necesiten, ya que como expresó el director ejecutivo de Nestlé, son importantes para el muestreo, el servicio al cliente y el asesoramiento.
Es importante ser consciente de que el cliente ha cambiado, ya que cada vez más dispone de información y conocimiento a través de las páginas webs y canales sociales. El consumidor busca ser especial y único, buscando productos que se adapten a ellos y a cada circunstancia.
En la tienda física, el cliente persigue que la experiencia de compra sea personalizada y memorable, como un momento más de ocio, por eso merece la pena invertir en espacios bien definidos que aporten un plus a la venta online. Es en este momento cuando entra en juego la figura de un profesional que asesore y atiende, un rol insustituible.
En la tienda física, el cliente persigue que la experiencia de compra sea personalizada y memorable, como un momento más de ocio
La decoración de los espacios también cobra importancia y especialmente cuando nos dirigimos a la generación Z (los nacidos entre 1997 y 2015), la cual le presta una gran importancia al diseño. Este canal tienes que cuidarlo y además, debe estar alineado con tus valores y filosofía de empresa.
Otro punto clave es la presentación de los productos y la demostración, creando una exhibición clara para que el cliente encuentre fácilmente lo que busca. Es importante acompañar al cliente desde el inicio hasta el final de la venta, siempre teniendo presente sus necesidades, y teniendo en cuenta si tiene prisa, o si no.
La clave de la tienda física es ser mucho más visible para los clientes. Eso se consigue teniendo en cuenta algunos factores. En primer lugar, eligiendo una buena ubicación que sea fácilmente accesible. Por otro lado, apostando por un escaparate bien diseñado para mostrarle a los usuarios lo que puedes ofrecerles.
Será imprescindible usar un mobiliario que vaya en sintonía con el tipo de producto que pretendes vender. Y, por último, replantear la calidad del customer service, para conocer sus opiniones tras recibir el servicio, estando siempre de su lado.
COMERCIO Comercio organizado se prepara con descuentos hasta de 70% en diferentes artículos jueves, 25 de noviembre de 2021
GUARDAR
Según Fenalco, este sector alcanzó un crecimiento de 33,8% durante el tercer trimestre del año versus el mismo periodo en 2020 Nathalia Morales Arévalo
Tras las dos jornadas de días sin IVA donde se alcanzaron ventas por más de $20 billones, el comercio organizado se prepara para una nueva jornada de descuentos, tanto en tiendas físicas como virtuales, que empezará mañana con el ‘Black Friday’, seguirá con el Cyber Monday y concluirá con el tercer día sin IVA, fecha que se celebrará el próximo viernes 3 de diciembre.
Según Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, este sector ha sido el gran impulso de la economía y el empleo en el país en el 2021. “Durante el tercer trimestre alcanzamos un crecimiento de 33,8 por ciento, frente al mismo periodo del año anterior y con estas fechas y el inicio de la temporada navideña, queremos seguir apostando por la reactivación del país”, afirmó.
Es por eso que el comercio organizado está preparando una serie de ofertas que alcanzan descuentos hasta de 70%, en diferentes artículos, sobre todo los más buscados durante el fin de año.
Entre tanto, centros comerciales, pymes y pequeños negocios intentan atraer la atención de los clientes con importantes descuentos para esta semana; destacan que una de las razones que mejorarían la experiencia de compra es la financiación al consumidor.
Según la Segunda Encuesta Anual de Comportamiento de Consumo de Sensormatic, que incluye países como México, Colombia, Brasil y Chile, se evidencia que los colombianos tienen una clara preferencia por la experiencia sensorial de la compra física donde pueda explorar, mirar, cotizar y realizar toda una rutina de compra.
“Esperamos un positivo aumento en las ventas durante esta jornada que empieza mañana, lo más importante es que todos los colombianos disfruten de los descuentos y promociones que tiene preparado el comercio organizado. Recomendamos, como siempre, respetar todos los protocolos de bioseguridad”, concluyó Cabal Sanclemente
Por crisis, la industria y el comercio cayeron hasta 8%
Pese a que hubo una mejora en diciembre de 2020, en el año corrido las ventas cayeron 7,8% y la producción 8%.
El comercio organizado dice que garantiza la bioseguridad de sus clientes cuando van de compras.
MILTON DÍAZ POR: PORTAFOLIO FEBRERO 12 DE 2021 - 06:41 P. M.
Ayer el Dane dio a conocer los datos que muestran el impacto real que ha tenido la pandemia por coronavirus en la producción industrial y en el comercio. El golpe fue de 7,8% y 8% durante 2020, respectivamente.
Para el caso de la producción industrial, que aunque tuvo un dato positivo en diciembre (1,5%) después de una caída profunda en abril de (-35,9%), en lo corrido del año la contracción de ese indicador fue de 8%, de las ventas reales también de 8% y del personal ocupado de 5,8%.
De acuerdo con Juan Daniel Oviedo, director del Dane, el golpe más fuerte para la actividad fue en abril y mayo, cuando las medidas de confinamiento fueron más estrictas y la economía tuvo que parar varios de sus sectores.
Por industrias, las que tuvieron una reducción durante el 2020 fueron la fabricación de vehículos automotores (-38%), la confección de prendas de vestir (-25,3%), las industrias básicas de hierro y acero (-21,2%), y la coquización, refinación de petróleo y mezcla de combustibles (13,9%), entre otros.
En contraste, las que tuvieron un mejor desempeño el año pasado fueron los alimentos preparados para animales (4,4%); productos de molinería, almidones y sus derivados (3,9%); otros artículos de alimentación (3,7%) y aceites de origen vegetal y animal (3,0%).
Y pese a que el desempeño para la producción industrial fue positivo por primera vez desde febrero de 2020, en el módulo de estimación temprana del Dane, calculan que este puede tener una caída de 2,7%.
Para Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), “la manufactura nos arroja cifras positivas, pero tenemos todavía rezago en variables importantes como en ventas o generación de empleo. Contamos con una tendencia que todavía no es positiva, como teníamos antes de la pandemia, pero nos hace pensar que en un futuro próximo empezaremos a ver datos positivos en todas las variables en el país.
EL COMERCIO
En cuanto al desempeño del comercio, en el mes que tradicionalmente se registra el mayor movimiento de negocios por las compras propias de las festividades de fin de año en almacenes y centros comerciales, se registró una disminución de 2,8% frente a al mismo mes del 2019.
Por su parte, para el año completo, marcado por la crisis que generó la pandemia, la variación del comercio al por menor fue de -7,8% respecto al 2019.
Según el informe del Dane, en el último mes del año diez líneas de mercancía registraron variaciones negativas en sus ventas reales y nueve presentaron incrementos.
Las líneas con mayor contribución negativa fueron las prendas de vestir y textiles, con 16,2% y un impacto de -1,7pps. Lo mismo pasó con otros vehículos automotores y motocicletas, con una reducción de 11,5% y una contribución de -0,8pps.
Por su parte, el calzado, artículos de cuero y sucedáneos del cuero registraron una contracción de 23,6% y una contribución de -0,8. En contraste, la línea de mayor aporte positivo al comercio fue productos para el aseo del hogar, con un alza de 23,7% y una contribución de 0,5 puntos porcentuales.
Ahora bien, con la foto de cómo cerró el 2020 para la industria y el comercio, el reto es volver a los niveles previos a la pandemia, como lo han alertado varios expertos. “La reactivación tiene que ser un compromiso de todos. Seguramente necesitamos políticas adicionales para volver a la senda que teníamos.
Lo importante es que los colombianos nos unamos y logremos recuperar la actividad económica que le permite al país luchar contra la pobreza y la inequidad”, concluyó Mac Master.
Industria y comercio, a la zaga del consumidor transformado
Con cifras preocupantes en sus indicadores, estos sectores trabajan para sacar adelante los negocios y confían en este último tramo del año.
La actividad económica del país, que se ha ido reabriendo de manera gradual, recibirá otro impulso este martes.
FOTO: CÉSAR MELGAREJO/CEET POR: PORTAFOLIO SEPTIEMBRE 24 DE 2020 - 10:05 P.M.
Transcurridos más de 7 meses de la pandemia, ninguna empresa que promueve bienes y servicios puede decir que no ha cambiado en algo la manera de producir, vender, llegar o comunicarse con clientes que se han transformado por las circunstancias.
La industria y el comercio son un ejemplo de ello, en medio de indicadores preocupantes y negativos en su desempeño como, mes a mes, lo ha reportado el Dane a nivel nacional y en las distintas ciudades del país.
Pese a los resultados que se advierten hasta el momento, los empresarios esperan que con el paso de los días se puedan reactivar más las ventas y la producción, aunque están a la expectativa de que se tomen medidas de fortalecimiento empresarial y de estímulo al empleo, dado el impacto generado por la crisis que tomará tiempo en ser superada.
Para lo corrido del año (enero – julio 2020), la producción real de la industria manufacturera se redujo 11,8%, así como las ventas reales (-11,9%) y el personal ocupado (-5,2%), frente al mismo periodo de 2019.
La Elaboración de bebidas, registró una variación de -14,3% en los primeros siete meses de 2020, en comparación con los primeros siete meses del año anterior, y fue el dominio con la mayor contribución negativa (-1,6 p.p.) a la variación total durante este periodo.
Por su parte, con una variación de 4,5%, Elaboración de otros productos alimenticios fue la actividad industrial con la mayor contribución positiva (0,2 p.p.) a la variación total anual.
En el caso del comercio al por menor, entre enero y julio de 2020, la variación anual de las ventas reales del comercio minorista y de vehículos fue de -11,9% con respecto al mismo periodo de 2019; dicha variación sin combustibles ni vehículos fue de -4,0%. El deterioro en sectores como el de los vehículos, así como en el de las confecciones y el calzado es lo que los expertos han señalado como preocupaciones latentes.
CONSUMO MASIVO
Los expertos han coincidido en que desde el principio de la crisis los productos de consumo masivo, principalmente alimentos y los artículos de aseo del hogar han ganado terreno. Cuando empezó la crisis sanitaria y se ordenó el aislamiento, empezó este crecimiento.
El más reciente reporte Consumer Insights de Kantar, indica que en el segundo trimestre del año se registró la demanda, especialmente de bienes de consumo masivo, más fuerte de los últimos años en América Latina. Se presentó un incremento acelerado en las últimas semanas de mayo hasta junio, superando los niveles de consumo pre covid-19.
“El tiempo extra en casa repercute en los hábitos de compra, es decir, cuanto más se está en el hogar, la frecuencia de compra disminuye, por lo que hay menos exposición y por consecuencia se hacen compras más grandes cada vez”, y eso incide hasta en los planes de producción en las compañías.
Esta tendencia es más marcada en países como Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú donde se han presentado más restricciones de movilidad, mientras que en Brasil y México, con reglas menos estrictas, hay cambios menos drásticos. El estudio señala que tanto la presión económica como el aislamiento social interactúan para definir el ambiente de consumo en cada mercado.
Añade que Bolivia, Colombia, Ecuador se enfrentaron a elecciones de productos más difíciles, “ya que, con sus ingresos habituales reducidos, y sin mucho dinero extra del gobierno, la permanencia en el hogar generó necesidades claras, por lo que se vieron forzados a elegir lo esencial”.
Otra de las cosas a destacar, menciona Cecilia Alva, Client & New Business Director Latam Worldpanel División de Kantar, es que los latinos perciben al efectivo como una fuente de contagio en mayor proporción que las tarjetas en este contexto, además éstas permiten acceder a canales con mejor precio y hacer compras más grandes, por lo que el gasto con este método de pago se incrementó tres veces más en comparación con el efectivo.
Cabe mencionar que el e-commerce es otro canal al que la pandemia trajo nuevos “motores de crecimiento”, ya que se considera una forma segura de comprar bienes de consumo masivo. El hecho de que en la mayoría de los países haya ganado más penetración en el grupo de mayores de 65 años, siendo que antes tenían barreras para usar el canal, es una prueba de ello.
¿CÓMO ES EL CLIENTE?
Fenalco plasmó las nuevas tendencias del consumidor: 1 .- Consume la mayoría o toda la comida en casa. 2 .- Pide alimentos, bebidas y todo tipo de comestibles en línea. 3 .- Busca experiencias que unan lo presencial con lo virtual: compra en línea y retiro en tienda. 4 .- Alto uso de domicilios. 5.- Limita visitas a las tiendas físicas. 6.- Visita tiendas de gran formato solo cuando necesita 10 artículos o más. 7 .- Busca valor agregado para las interacciones y los servicios sin fricciones. 8.- Responde a promocio- nes por smartphones y otros dispositivos móviles. 9 .- Como una costumbre, lleva equipo de protección personal: desinfectantes de manos y tapabocas. 10.- El lavado de manos en una constante.
La economía local creció 3,3% en 2019 frente a 2018 y la suma total alcanzó $1.062 billones. El financiero también fue de los que más aportaron
Adriana Carolina Leal Acosta
La economía colombiana se consolidó como la de mayor crecimiento en la región, con una variación de 3,3% frente a lo logrado en 2018, y fue la más alta conseguida a nivel local desde 2014.
Esto, puesto en términos corrientes, significa que el PIB colombiano estuvo compuesto por $1.062 billones el año pasado, mientras que en 2018 la cifra fue de $985 billones.
IVÁN DUQUEPRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
“Una excelente noticia, el Dane reveló que el PIB en 2019 fue 3,3%, el mayor desde 2014. Esto demuestra que Colombia crece por encima de promedios regionales”
JUAN DANIEL OVIEDODIRECTOR DEL DANE
"El 3,4% del cuarto trimestre y 3,5% del tercer trimestre son los crecimientos más importantes de los últimos cuatro años que tiene la economía colombiana”
ALBERTO CARRASQUILLAMINISTRO DE HACIENDA
"Si bien la expectativa que teníamos no se cumplió, lo que vemos hoy es una recuperación contundente de la economía colombiana, en medio de vientos de cola externos”.
JAIME ALBERTO CABALPRESIDENTE DE FENALCO
“Registramos con complacencia el 3,3% del crecimiento del PIB, en línea con nuestros pronósticos con el hecho de que el comercio fue el jalonador de esta cifra”.
SANDRA FOREROPRESIDENTA DE CAMACOL
“Teníamos previsto este resultado, pero esperamos un 2020 positivo teniendo en cuenta el aumento de la comercialización de vivienda, lanzamientos e inicios de obra”.
JORGE ENRIQUE BEDOYAPRESIDENTE DE LA SAC
“El nivel de crecimiento va de la mano con la consolidación, eso nos lleva a una estabilización que demanda la economía nacional urgente para sectores como el agro”.
BRUCE MAC MASTERPRESIDENTE DE LA ANDI
“Debemos hacer esfuerzos para afianzar esta tendencia y así responder al gran reto que tenemos en términos de ser más competitivos y generar empleos de calidad”.
SANTIAGO CASTROPRESIDENTE DE ASOBANCARIA
"Asobancaria mantiene sus perspectivas de un crecimiento cercano a 3,4% para 2020, y espera que los factores que impulsaron el consumo privado y la inversión sigan contribuyendo a la solidez de nuestro aparato productivo".
De acuerdo con Juan Daniel Oviedo, director del Dane, el grupo de actividades que más contribuyó a este comportamiento fue el de comercio, transporte, alojamiento y servicios de comida, que aportaron 0,9 puntos porcentuales a la suma, cuyo crecimiento respecto al año anterior fue de 4,9%.
Este sector también había estado dentro de los primeros lugares de 2018, cuando aumentó 2,8% y, según Oviedo, pese a haberse visto afectado en el cuarto trimestre del año por la caída en las ventas que ocasionaron las jornadas de paro nacional, las campañas de promociones y el ofrecimiento de horario extendido de los comerciantes surtieron un efecto positivo y contrarrestaron el impacto a nivel de facturación.
“Registramos con complacencia el 3,3% del crecimiento del PIB. Este resultado estuvo en línea con nuestros pronósticos, y se demostró que el comercio continúa siendo un gran jalonador de la economía nacional”, señaló Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco.
El segundo sector que más aportó a esta dinámica fue el público, bajo la categoría de administración, defensa, educación y salud. Este renglón contribuyó con 0,8 puntos porcentuales a la variación del PIB anual de 2019 y, de manera individual, creció 4,9% frente a 2018.
No obstante, el incremento no fue muy diferente al que se registró entre 2017 y 2018, cuando la cifra llegó a 4,6%.
“El ligero crecimiento del sector público se explicó, fundamentalmente, por la ‘educación de no mercado’, dijo Oviedo y se dio debido a que a finales de 2018 el presidente Iván Duque adquirió unos compromisos con el sector de educación, incrementos más que proporcionales de los salarios de los docentes, una inyección de recursos a las universidades públicas y al sistema educativo importante; y, si bien el gasto del Gobierno distinto a educación no crece a la misma tasa de 2018, el impacto de educación de no mercado es significativo”, explicó Oviedo durante la presentación del informe de resultados.
En tercer lugar, ingresando a los primeros lugares, se ubicó el sector de las actividades financieras y de seguros, que aportó 0,3 puntos porcentuales al dinamismo de la economía y, a su vez, fue la categoría que más crecimiento registró entre 2018 y 2019, con una variación de 5,7%.
No obstante, según los analistas, el desempeño podría haber sido incluso mejor sino se hubiesen tenido que desembolsar US$150 millones para hacer efectiva la póliza de riesgo de Hidroituango.
Cabe destacar que solo estos tres sectores fueron responsables de aportar dos puntos porcentuales a la cifra total de crecimiento del PIB el año pasado, mientras que en 2018 los tres protagonistas del crecimiento, en el que estaban incluidas las actividades profesionales y científicas pero no el sector financiero, aportaron 1,6 puntos al 2,5% que varió el PIB.
El sector manufaturero, sin embargo, no tuvo los resultados que se esperaban, pues a pesar de haber crecido 1,6% en 2019, la cifra fue menor a la lograda en 2018, cuando fue de 1,8%.
Lo anterior sería una consecuencia de la desaceleración de la producción de artículos de metalurgia básica, como vigas para construcción, dado que la demanda bajó en comparación con 2018, cuando el sector construcción había hecho grandes pedido de estos insumos para finalizar sus proyectos.
En concreto, mientras, por ejemplo, en el cuarto trimestre de 2018 este grupo productivo había crecido 5,9%, en el mismo lapso de 2019 la variación fue de -1,7%.
Frente a esto, Bruce Mac Master, presidente de la Andi, llamó la atención al señalar que el crecimiento del sector ha registrado variaciones inferiores a las de otros sectores durante varios periodos.
“Es claro que, si en un país como Colombia queremos contar con una economía sólida en el mediano plazo, es fundamental construir una canasta que nos permita producir y exportar bienes y servicios. Si bien durante los últimos años nos ha acompañado la producción de hidrocarburos y minería, y estos sectores han generado recursos y divisas totalmente necesarios para el funcionamiento económico del país, en los dos casos se trata de bienes no renovables que más temprano que tarde tendrán que ser reemplazados por productos industriales y servicios generadores de valor agregado”, aseveró el dirigente gremial.
Por otro lado, los resultados del sector de minas y canteras mostraron signos de recuperación, pues pasaron de haber caído 1,9% entre 2017 y 2018, a crecer 2,1% entre 2018 y 2019.
Una de las razones fue el incremento de la producción de petróleo, que en 2018 había siso de 865.000 barriles/día y pasó a 886.000 barriles/día el año pasado.
“Cuando sumamos el efecto de estabilidad del carbón con una mayor explotación de petróleo y además con un crecimiento importante de la explotación de oro, que fue superior a 7%, vemos un mejor panorama en este sector”, destacó el director de la entidad estadística.
Dentro del sector de servicios, solo la actividad de información y comunicaciones presentó una desaceleración importante, pues en el último periodo habían crecido 2,9% y en 2019 la variación fue de apenas 1,7%.
En el caso de la agricultura, que creció 2% pero que en 2018 había logrado la cifra de 2,4%, no fue suficiente el dinamismo del sector cafetero para compensar la caída de las cosechas de los otros tipos de cultivos.
“La estructura de la economía cambió a favor de los sectores no transables en los últimos años. En efecto, mientras que en el año 2005 los sectores transables explicaron 30% de PIB, hoy ese porcentaje es de 25%”, señalaron los analistas de Bbva Research.
Por otro lado, el director del Dane destacó que el PIB per cápita, es decir, el valor promedio de la riqueza nacional que le corresponde en promedio a cada colombiano, aumentó sustancialmente. Pues pasó de $1.710.000 al mes en 2018, a $1.793.000 en 2019. “Esto es un hito importante teniendo en cuenta que la cifra supera el incremento de 6% del salario mínimo para este año”, manifestó Oviedo.
Alberto Carrasquilla, ministro de Hacienda, celebró la noticia a la vez que aceptó que el resultado no fue tan alto como el esperado originalmente, cuando las proyecciones oficiales apuntaban a 3,6%.
Construcción, el único sector que cayó en 2019
De las 12 actividades económicas que componen el PIB, el valor agregado de la construcción fue el único que en el año corrido decreció 1,3%, frente al mismo periodo de 2018. Según las estadísticas este comportamiento se explicó por la caída en la construcción de edificaciones residenciales y no residenciales, la cual cayó 7,7%. A su vez, la construcción de carreteras y vías de ferrocarril y otras obras de ingeniería tuvieron una variación negativa de 10,7%. Además, el rubro de actividades especializadas para construcción de edificaciones también cayó en 2%.
e las 16 líneas de mercancía que estudia la entidad, 13 mostraron un desempeño positivo y contribuyeron al alza total
Ana María Sánchez - amsanchez@larepublica.com.co
El informe de comercio minorista de noviembre que actualiza el Departamento Administrativo Nacional (Dane), reveló que las ventas aumentaron 4,4%, frente a las registradas en el mismo mes de 2018. De las 16 líneas de mercancía que estudia la entidad, 13 mostraron un desempeño positivo y contribuyeron al alza total. Al revisar lo corrido del año, las ventas crecieron 6,4%.
Las líneas de negocio que mostraron mejor variación fueron: la de equipo de informática y telecomunicaciones para uso personal o doméstico con una variación de 19,9%; productos para el aseo del hogar, con 16,3%, y los alimentos y bebidas no alcohólicas que crecieron 11,2%.
Por su parte, la venta al por menor de vehículos automotores y bicicletas registró una caída de 16%. A su vez, la venta de repuestos, partes y accesorios y la venta de libros, papelería, periódicos y revistas fueron las otras dos líneas se redujeron en el comercio al por menor.
En el año corrido, la venta de equipos de informática y telecomunicaciones sigue liderando la lista de los que más crecen (17,7%), y la venta de libros, papelería y revistas es la única que cae con una variación negativa de 5,5%.
En cuanto al personal ocupado del comercio minorista, en noviembre se registró una variación positiva de 1,9%, frente al mismo mes del año anterior. Según el documento, esto fue resultado del aumento en 3,5% en el personal permanente, de 0,5% del personal temporal directo y la disminución de 6,8% en el personal temporal contratado a través de empresas.
En el año corrido, el personal ocupado tuvo una variación de 1,2%, frente al mismo periodo del año anterior.